La Tecla Fértil

Izquierda en el Sur, se reagrupa con fuerzas del derechismo para tomar el poder, y unificar proyecto de La Gran Colombia

El sistema capitalista del Siglo XIX al XXI, en vez de decrecer, fomento su capacidad financiera hacia el Cono Sur, mediante novedosos impuestos que hicieron desaparecer pequeñas industrias., logrando que el esquema capitalista se fundamentara en regiones pobres sin traumas. En este largo período de nuestra historia política se logro la fusión de capitales entre la burguesía nacional y el sector económico transnacional, siendo una característica fundamental de este mundo globalizado. El imperialismo norteamericano se levantó sobre la exaltación del yo, en desmedro de la sociedad y el colectivismo.

Creo, que hemos llegado a la saturación del gobierno bolivariano, sin profundizar sobre motivaciones, sino limitado a la acción y sus efectos. Nuestro país creció y fortaleció bajo la mirada de un grupo de mujeres que ejercían como maestras, que nos enseñaron la lectura y escritura, ahorrar y tener disciplina. Sobre todo, las damas Tovareñas como Aurora Méndez Vivas. Muchas desde sus casas se dedicaron a enseñar y en las pequeñas escuelas de la época.

Aprendí mucho del dirigente sindical Valmore Rodríguez, estudiado en Texas y, quien iba mucho a la finca de mi tía Mélida Vera de Ferrer, en Ciudad Ojeda a descansar de los avatares de Caracas. La ignorancia de un pueblo acabo con el desarrollo de una nación, cuyo costo fue cien años de continuo crecimiento, para derrumbar todo en apenas veinte y siete años.

Se deben hacer precisiones, en los años 60,70 y 80, en las universidades del país, solo se hablaba de marxismo. Y en los diarios de provincia, muchos columnistas destacaban expresiones a favor de la fundamentación de una izquierda que despertaba sobre los balcones de las casas del páramo andino.

CAP, en 1989, ya estaba muy nervioso y Reinaldo Figueredo, quién fue secretario general de AD en el Estado Miranda, le mando a blindar toda su oficina presidencial y accesos, me refiero al Palacio de Miraflores con una empresa alemana. Era la más clara representación de Europa en Venezuela, Los rusos, alemanes, cubanos y norteamericanos, siempre han estado en el país, desde la llegada de la Democracia Socialista, en la voz y presencia de Don Rómulo Betancourt.

El linchamiento político en la clase dirigente es lento, pero progresivo. Las redes sociales utilizan junto a la telefonía móvil Boots y propaganda subjetiva, para borrar la memoria del venezolano, y darnos una nueva presencia ideológica, donde la figura castrense es primordial, porque estimula el miedo y el temor. Las recientes elecciones así, lo han demostrado. Hay una diversidad de Golpes de Estado, desde lo jurídico hasta el militar. Es dado por categorías, y a los venezolanos nos tienen por tontos y agazapados, carentes de libertad. Hasta los protestantes han aprendido mucho de ello, sacan de las asambleas a creyentes por lo mínimo y no restauran, son cogollos espirituales, como lo son en los partidos políticos. Esto, sucedió en la época del Emperador Tito, y en Roma solo quedaron los Temerosos de Dios, es decir los católicos, el pueblo judío en esa escapada llegaron de nuevo a Turquía, Egipto, Siria y llegaron hasta Alemania, en Europa. Jamás lo vuelven a restaurar en comunión, no hay el perdón. Así pasa en los partidos políticos, el principal elimina al que no le conviene y le entrega las insignias y siglas a otro conglomerado social, Hablan de paz y son desobedientes. El que vocifera algo, es juzgado y penado. Es una democracia restringida con apariencia de libertad. Nuestros jóvenes son obligados por presiones a migrar a otros países, Venezuela es un país de ancianos que se reúnen en un comedor, para darles una melcocha de arroz o pasta con aceite sabor a sardina, he pasado y paso por esta experiencia, no es hablar o denigrar, es una verdad. Abierta a toda sociedad.

He venido nombrando la clase militar venezolana en asuntos del Estado, pero, lo reflejo porque desean cargos del estamento civil y, son incapaces de orientar al presidente Nicolás Maduro Moros sobre algunos temas de inteligencia, como seguridad del Estado. ¿Como es posible dejar estacionado un avión costoso en los andenes o a cielo abierto en República Dominicana? Esta isla es prácticamente una colonia norteamericana, como lo fue Cuba de España, donde se distribuían los esclavos.

Donde fuere, el pensamiento siempre será estratégico. La persona debe conocer su espacio territorial y buscar presionarlo para adecuarse, en base a la experiencia. En la actualidad es el cambio de paradigmas en la cosmovisión, conceptos y, en general >> repito<< en el pensamiento estratégico. Las viejas estructuras políticas y económicas quedaron en el pasado. Cuando vamos a la Filosofía, vemos la decisión de renovar los cuadros desde adentro e implementar una novedosa estructura que implique una sola doctrina, para verla desde distintas ópticas.

la luz de los acontecimientos vividos por la humanidad en la última década del siglo XX, vemos que hubo pensadores que llegaron a anunciar el "Fin de la Historia". Pronosticaron el advenimiento de una época de integración, interdependencia, unipolaridad y paz; sin embargo, años transcurridos en lo que va del nuevo siglo, la nueva confrontación armada entre Israel y el pueblo palestino; la guerra civil en Siria y Ucrania; el terrorismo brutal del denominado Estado Islámico de Irak y Levante, las atrocidades de los radicales islamistas del África, la aparición de enfermedades como el Ébola y COVID, el irrespeto generalizado del Derecho Internacional por las potencias mundiales, entre los más graves acontecimientos, contradicen las visiones optimistas. Por el contrario, se debe aceptar, aunque con pesar, que el mundo se sumerge nuevamente, como los previeron los esposos Toffler, en guerras multiplicadas por guerras; en choques de civilizaciones, como pensaba Hungtinton; o en la descomposición del Sistema (Mundo) actual, según Immanuel Wallerstein.

la Geopolítica privilegió lo global y lo nacional, con relación a las demás escalas, y dotó de sentido y racionalidad a la práctica de las elites políticas. Las representaciones y prácticas dominantes (o hegemónicas) de la Geopolítica moderna son, casi en su totalidad, desarrolladas por las elites políticas de las grandes potencias, que han tenido la capacidad de imponer sus visiones al resto

del mundo. El pensamiento geopolítico moderno se sustenta en tres suposiciones cuestionables: 1) la soberanía estatal se encuentra vinculada al espacio territorial; 2) el territorio del Estado es el espacio que confina a la sociedad; y, 3) existe una polaridad entre lo doméstico y lo internacional. Se suman a estas suposiciones dos conceptos que las dinamizan: el interés nacional y la seguridad, que convierten al mundo en un escenario de permanente competencia entre los Estados, por alcanzar la primacía.

Emerge una sociedad civil global, como puede observarse en los frecuentes foros informales de los movimientos sociales y las sociedades civiles; a la vez que surgen, paralelamente, con poder creciente, las llamadas ‘corporaciones globales’, con capacidad de penetración a través de numerosas fronteras estatales. Para enfrentar las amenazas transnacionales, la humanidad transita de la seguridad nacional a la seguridad global. La Geopolítica crítica denuncia que tratar los asuntos en términos de prioridades ‘globales’, debilita los contextos específicos de las inseguridades, y oculta las dimensiones causales de la violencia actual.

Ante esta realidad, ¿Dónde están los asesores de seguridad del gobierno bolivariano?

Gustavo Petro, como presidente de Colombia, viene reuniéndose con la sociedad colombiana para poner en vigencia viejos temas, que El Libertador plasmó en su libro de notas para lograr putos comunes con el universo latino.

Utilizando la retórica de lo ‘global’, se sugiere que los problemas originados, en gran parte, por los países desarrollados, son cuestiones de igual interés para toda la humanidad. Por otra parte, la economía global se apropia de los recursos marginando a la gente pobre en diversos lugares del planeta. En muchos casos, los intentos del Estado por facilitar la modernización generan más inseguridad para los grupos étnicos y pueblos indígenas que habitan las zonas que abastecen de recursos a la economía comercial. Para muchas culturas alrededor del mundo, la modernidad, en sus diversas presentaciones, es una amenaza. Se ha llegado a argumentar que los Estados modernos están efectivamente en guerra con las minorías indígenas y los aborígenes de muchos lugares de lo que puede ser llamado el ‘Cuarto Mundo’



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Emiro Vera Suárez

Profesor en Ciencias Políticas. Orientador Escolar y Filósofo. Especialista en Semántica del Lenguaje jurídico. Escritor. Miembro activo de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo. AESCA. Trabajó en los diarios Espectador, Tribuna Popular de Puerto Cabello, y La Calle como coordinador de cultura. ex columnista del Aragüeño

 emvesua@gmail.com

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