Ayer pasé alrededor de seis horas al lado del mar observando la multitud de gente en la playa desde la sombra, sudando como un cochino, como todos, es que, hacía muchísima calor y no había nada de viento. Aun la gente de piel oscura estaba sudando como cochinos, era increíble, la gente estaba como desesperada, y por eso me imagino había tanta gente metida en el agua, mucho más de lo normal.

Bueno, normalmente la gente que acude a esta playa, viene de los barrios de Caracas temprano en autobús y se regresan a Caracas como a las 3 o 4 PM, pero ayer la playa todavía estaba absolutamente llena de gente, con muchísima gente bañándose en la oscuridad a las 7:30 PM cuando regresé a mi taller. Me imagino que debe ser resultado del calor extremo que ha hecho desde hace seis meses con este asunto del calentamiento global.

Bueno, no pasó nada en particular, nada diferente, pero como siempre, vi varios casos de extorción por parte de los diferentes cuerpos policiales para permitir a algunos negocios vender cerveza y licor clandestinamente (eso es algo común aquí en Venezuela). Sin embargo, me vino a la cabeza algo que me pasó el viernes pasado en el pueblo antes de ir a pescar en el rompeolas de esa misma playa, una experiencia muy interesante, la cual redacté esa misma noche pero que me olvidé de incluir en el diario del día siguiente.

Aquí está:

Antes de ir a pescar, fui al pueblo, y probablemente no por casualidad me tropecé con un agente no uniformado de la inteligencia militar venezolana. Desde la nada, él se me acercó y me preguntó si yo era chileno y yo le dije que sí, y enseguida él empezó a hacerme un montón de preguntas para extraerme informaciones personales. Básicamente, él me estaba interrogando allí en la parada de autobuses mientras esperábamos el autobús.

Sí señor.

Parecía que él me estaba investigando, lo cual no me molestaba, ni tampoco me sorprendía, de hecho, es algo que encuentro muy interesante, es que, yo no les tengo nada de miedo a esa gente ya que trabajé casi toda mi vida en ese tipo de ambiente. Por ejemplo, el actual presidente de Venezuela me mandó a ser interrogado durante 4 horas por la DGCIM en el 2008 (lo hizo a espaldas de Chávez, quien yo conocí personalmente).

De todas maneras, creo que él tipo sabía quién soy, posiblemente a causa de Juan Veroes, quien me delató aquí públicamente en Aporrea aun después de haberme prometido de jamás divulgar dónde yo vivía. Creo que Juan Veroes quiere que me metan preso y que me torturen hasta la muerte como le hicieron al Capitán Arévalo en el 2019, como para "darnos una lección" a los chavistas que estamos en contra de los maduristas, o sea, en contra del actual presidente de Venezuela y su gente.

Bueno …

Sin entrar en muchos detalles, durante mi interrogatorio en la parada de autobuses, el cual se desarrolló más como una conversación de 30 minutos, el agente de inteligencia me dijo algo muy interesante cuando yo le respondí a una de sus preguntas sobre la posibilidad de que el actual gobierno de Venezuela prohíba los vuelos comerciales entre España y Venezuela (debido al actual conflicto diplomático entre Venezuela y España), donde yo le respondí, "No creo que le harán," y él me respondió, "Lo van hacer, es un negocio," y yo, porque de repente sé me encendió el bombillo y sé que este gobierno tiene negocios con Turkish Airlines (línea aérea de Turquía, ver más abajo), le respondí:

"Ah, sí, tienes razón, entonces, sí, el gobierno de Venezuela de hecho va a prohibir los vueles desde y hacia España, verdad, no se me había ocurrido hasta ahora, sí, creo que tienes razón."

Lo que pasa es que, Turquía se encuentra en el Mediterráneo, y España también, entonces, si este gobierno prohíbe los vuelos a España, los venezolanos y venezolanas que quisieran viajar a España, tendrían que viajar vía Turkish Airlines a Turquía, y de allí agarrar otro vuelo de Turkish Airlines a España, incrementando considerablemente los negocios de Turkish Airlines, así me lo expuso ese agente de la inteligencia militar venezolana, y creo que él tiene toda la razón, es más, él me contó que uno de sus hermanos es piloto para las líneas aéreas comerciales y que ese es el escenario que ellos están viendo actualmente desde adentro.

Y eso tendría mucho sentido.

Se trataría de negocios, dinero, y más dinero, nada que ver realmente con la diplomacia. Simplemente tomarían esta oportunidad del conflicto diplomático con España para incrementar los negocios venezolanos con Turkish Airlines. De hecho, me imagino que el actual gobierno de Venezuela exacerbará el conflicto diplomático para ese propósito.

Vean lo siguiente:

Turkish Airlines tiene vuelos casi todos los días desde Maiquetía (Venezuela) hacia Estambul (Turquía).

Ver: https://www.aeropuerto-maiquetia.com.ve/app_biva/

Turkish Airlines tiene vuelos desde Estambul (Turquía) hacia Málaga y Barcelona (España) y me imagino que podrían agregar vuelos adicionales a otras ciudades de España, ¿verdad?

Ver: https://www.istairport.com/en/flights/flight-info/arriving-flights/?locale=en

Negocios, dinero, y más dinero, de eso se trataría.