"La acción sin pensar es como disparar sin apuntar"
B. C. Forbes
El que busca algún objetivo por la fuerza, inventa mil maneras de esconder las armas de la violencia. Todos los pasos dados por la oposición para arrancar el proceso bolivariano de raíz, se han encontrado con dos obstáculos poderosos, el cual le han impedido asaltar el poder: por una parte, la dignidad de un pueblo, y por la otra el gobierno encabezado por el presidente Maduro, con el estandarte de la soberanía en la mano, el verdadero escudo protector para defender la patria, de cuanta alimaña se aparece apoyada por los gobiernos gringos de turno.
Desde el 28 de julio, los enemigos de la patria se encuentran revolcándose en los excrementos preparados por todo el poder mediático del imperialismo, para tratar de infectar al pueblo venezolano, con sus mentiras preparadas de manera apresurada, sin importarles, si, siguen haciendo el papel de unos simples títeres totalmente devaluados, ya que, el propósito es seguir repitiendo lo mismo, pero en otro formato, para ver quien cae en la trampa.
Son tantos los intentos desesperados, que en algunos casos, se aparecen verdaderos tramposos, con la experiencia de auténticos gánsteres de la política, caso Antonio Ledezma, el mismo vociferador, que ha terminado, como un ridículo al llenarse la boca, con la expresión ¡mi presidente Guaidó! como si había hecho un descubrimiento para salvar vidas; ahora, salió, con una para tomar en serio, el cual solamente se le ocurre al que está acostumbrado a mandar, y los demás a callar, cuando prácticamente le ordenó a José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente español, que sea el intermediario para salir del presidente Maduro, porque ahora, es Edmundo González. Cambio a Guaidó, un delincuente protegido en Estados Unidos, por la opción del exagente de la CIA y asesino a sueldo ¡a bichito el Ledezma!
La oposición carga un verdadero circo ambulante por varios países, hasta conseguir en cada sitio sus payasos, para ponerlos en escena en el momento, cuando la carpa se les viene encima. La propia directora de la tramoya, aún, cuando se encuentra inhabilitada sacó de una enredadera –no piensen mal– como los verdaderos magos, al señor de la macabra historia en el Salvador, al lado de Leopoldo Castillo, pero este Edmundo vino al mundo atrás de los dólares, y ahora los necesita más que nunca, para terminar de pasar sus últimos días de una vida triste y sombría, a pesar, que ahora es héroe por mandato del presidente de España, Pedro Sánchez.
El circo (MADE IN USA) presenta en cartera una función de último hora, pero un tanto rebuscada, para cazar bobos o en su defectos verdaderos pendejos, ya que, es algo increíble, después de dos meses se aparece el Centro Carter, por intermedio de Jennie Lincoln, con la bolsa de basura y al no conseguir donde echarla, se fueron a la OEA; así, como se oye, para entregárselas al encargado de ese antro, el mismo Luis Almagro, tan devaluado, como las mismas actas, al que no le creen, ni disfrazado de papa en la puerta del Vaticano y de paso, ya sabemos, que tiene un parecido, con Toñito Ledezma, se arriman a cualquier palo podrido, por mandato del imperialismo atrás de un puñado de dólares. La revisión está en mano de Almagro, bajo la atenta mirada de la Lincoln, por supuesto sabemos el resultado por anticipado ¡Edmundo presidente! Pero todavía no sabemos a dónde, porque aquí en Venezuela es Nicolás Maduro Moros y punto.