La lucha de contrarios es un concepto central en la dialéctica hegeliana y marxista, metodología filosófica que en su expresión moderna fue desarrollada por Hegel y Marx. Este concepto describe y desarrolla la idea que el cambio es impulsado por fuerzas opuestas, la síntesis y la antítesis. Este conflicto entre contrarios es el motor del cambio y el desarrollo en todos los sistemas, ya sean naturales, sociales o ideológicos. Es la lucha de contrarios a lo interno de los procesos.

La dualidad y el conflicto consiguiente, están presente en cada sistema o fenómeno, siendo el conflicto lo que impulsa el cambio y el desarrollo. Esta dualidad se refiere a la existencia de dos fuerzas, síntesis y antítesis, aspectos o componentes que son opuestos pero interdependientes. El conflicto surge cuando estas fuerzas duales entran en oposición directa, creando tensión y desequilibrio. El conflicto puede llevar a una resolución o transformación del sistema, donde uno de los opuestos predomina o ambos se integran en un nuevo equilibrio.

Así que mientras que la dualidad representa la coexistencia de opuestos, el conflicto es la interacción dinámica que puede conducir a cambios y nuevas formas de equilibrio.

Unidad de los Contrarios: A pesar de su oposición, estas fuerzas opuestas están interconectadas y dependen una de la otra para existir, siendo esta relación dialéctica lo que forma la unidad de los contrarios. Las fuerzas opuestas son interdependientes y su existencia tiene sentido solo en relación con la otra. Por ejemplo, no se puede entender la luz sin la oscuridad, o el bien sin el mal. Estos opuestos definen y dan significado a sus contrarios y contribuye a la totalidad del sistema, el sistema día por ejemplo lo componen el día y la noche, creando un ciclo del tiempo.

La unidad de los contrarios nos lleva a ver más allá de las aparentes contradicciones, superar las apariencias y entender que diversidad y tensión entre opuestos son fundamentales para el equilibrio y el desarrollo en múltiples aspectos de la vida, desde el crecimiento personal hasta la comprensión de fenómenos naturales y sociales.

Transformación y Progreso: Es a través de la lucha y la resolución de estos conflictos que se producen las transformaciones, el progreso y la evolución de los sistemas.

Es que la dialéctica permite entender la evolución mediante la superación de las contradicciones internas y cada síntesis se convierte en una nueva tesis que eventualmente enfrentará, en su momento, su propia antítesis, impulsando un ciclo continuo de desarrollo. Tesis-antítesis-Tesis.

Es este el llamado proceso dialectico, con el cual los sistemas se adaptan y transforman, respondiendo a cambios internos y externos. Esto promueve la innovación y la mejora continua.

El proceso dialéctico es una herramienta poderosa para entender y fomentar el progreso y la evolución en los diversos sistemas en que se desenvuelve la vida humana, desde la filosofía y la ciencia hasta la sociedad y la política. Al resolver las contradicciones y promover la integración de ideas opuestas, la dialéctica de los sistemas impulsa un desarrollo continuo y dinámico.

Cada uno de estos elementos (tesis, antítesis y síntesis) puede estar formado por múltiples aspectos, argumentos, factores o elementos que contribuyen a su definición y desarrollo. Estos elementos pueden ser analizados de manera detallada para comprender mejor las complejidades y matices de la realidad que se está estudiando, lo cual es una tarea pendiente para todos los nuevos militantes que se incorporan a la lucha por el socialismo, la revolución y la libertad.

Es necesario realizar el análisis de los argumentos examinando los argumentos presentados en la tesis y la antítesis para identificar las afirmaciones clave, comprobar las evidencias utilizadas para respaldar esas afirmaciones y las consecuencias lógicas que de ella se derivan. Así podemos analizar los hechos sociales, políticos y económicos.

Es ineludible en el análisis que se haga al estudiar dialécticamente el desarrollo y el conflicto, la identificación de perspectivas, considerando las diferentes perspectivas o puntos de vista desde los cuales se construyen la tesis y la antítesis. Para el marxismo la perspectiva la provee el punto de vista de la clase a la que se defiende.

Es pertinente señalar que el desarrollo de la lógica dialéctica, inicialmente planteado por Friedrich Hegel y continuado por Carlos Max y Friedrich Engels, constituyen un avance civilizatorio que modifico completamente las tendencias de desarrollo mundiales y una de las piedras fundacionales de la sociedad moderna actual, por lo que creo que es de obligatorio estudio y conocimiento para el avance revolucionario y socialista.

Oscar Rodríguez Estrada 2 de diciembre de 2024