El gendarme desconocido

Según la Web, "el término desconocido se refiere a algo o alguien que no es conocido o reconocido por una persona en particular o por un grupo más amplio. La ignorancia puede deberse a diversas razones, como la ausencia de información, la falta de familiaridad o el carácter oculto de la identidad". Esta situación se dio en Venezuela cuando, desde Argentina, trató de ingresar al suelo venezolano por Colombia, el gendarme desconocido, y no era Cantinflas cuando le encomendaron la tarea de infiltrarse en los billares para descubrir a una banda de ladrones. (Película mexicana). No. Este gendarme desconocido traía como objetivo, sumarse a la conspiración en representación de Argentina, como si en nuestro país se celebraran los juegos olímpicos conspirativos, porque todos los días le echan el guante a un extranjero conspirando en Venezuela.

Ese gendarme conspiró lo que dura un viento en un chinchorro. De inmediato fue detenido y puesto a la orden de las autoridades. Esto convirtió a Patricia Bullrich, allá en Argentina, en una fiera, defendiendo a su gendarme, e insultando y amenazando a Diosdado Cabello. Su respuesta es un fiel reflejo de su fracaso como seleccionadora de gendarmes para la conspiración en otro país. Y yo creo que tiene que ver con la economía argentina. ¿Cómo va a seleccionar a un cabo, donde hay tantos generales, para conspirar? Milei anda en busca de mano de obra barata. Debe quedar claro, que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al descubrírsele su gallo tapao, su gendarme desconocido, hasta el momento de la detención, la invadió la rabia y aun sin digerir la información sobre el hecho, de manera visceral y como si estaba comiéndose un pan de los que antes llamaban "Bombón" y tomando Coca-Cola hablaba con la boca llena profiriendo insultos y amenazas al ministro venezolano. Así lo percibí.

Solo a Patricia se le ocurrió enviar a Venezuela a alguien que lleve el apellido Gallo, cuando aquí se ha hecho el esfuerzo por sacar a los patarucos; y en efecto, este conspirador resultó ser otro pataruco más. Fue detenido por los cuerpos policiales venezolanos por estar implicado en una nueva conspiración con sello argentino. Sin embargo, tenía su coartada o excusa, ya que venía a buscar a su esposa; y resulta que su esposa estaba en Argentina. En verdad, este Gallo no pudo entrar al corral. Las pruebas que le hicieron para reconocerlo fueron suficientes para detenerlo. Se le enredó el kikiriki.

Si nuestro país ha sobrevivido ante los ataques de presidentes de otros países, intentos de invasión, amenazas de generales, etc., ¿Cómo se le ocurre al gobierno Argentino, mandar a conspirar a un Cabo y además, Gallo, cuando hay un poco de patarucos derrotados y que quieren subir a la mata de tamarindo a "juramentarse". Y por si lo duda, este Cabo no va a quedar suelto, hay que atarlo por un tiempo en las rejas de la prisión; para que aprenda que el Gallo siempre debe estar cerca de su corral. ¿Qué hacía por aquí, si su gallina estaba en Argentina?



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Jesús Rafael Barreto


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