Se está poniendo en marcha, lo mismo que dijo Trump hace dos años atrás, que el petróleo de Venezuela era de ellos, y que qué bolas tenía Biden al estar comprándolo en lugar de arrebatárnoslo. El plan, durante su primer mandato era asesinar a Maduro, y de hecho se intentó con unos drones, pero todavía sigue en pie y ahora reforzado con la política del gusano, alumno de Posadas Carriles, míster Marco Rubio. Es que los gringos durante casi un siglo dispusieron de nuestro petróleo como les vino en gana, y les quedó esa perversa y degenerada costumbre, o nos lo entregan o los asesinamos. Juan Vicente Gómez decía que el petróleo no valía nada y que más le deberíamos dar las gracias a los gringos porque se lo llevarán. De vaina no dijo que hasta le debíamos pagar por ello. Esa política de "o nos lo entregan o los asesinamos", puso a temblar a todos los presidentes del Puntofjismo.

A partir del gobierno de Gómez, Venezuela se convirtió en un hervidero intrigas por controlar el negocio petrolero, es decir de inseguridad política y militar para así tenernos controlados Estados Unidos. López Contreras da continuación al proyecto gomecista de dejar en manos de las compañías petroleras nuestras leyes de hidrocarburos, en lo relativo al precio del barril y las concesiones. Pero entonces al tomar el poder Isaías Medina Angarita se revierte todo este proyecto, Medina pide controlar nuestras refinerías establecidas en Curazao e imponer lo del fifty fifty, por lo cual lo derrocan. Luego, las compañías petroleras no confían en Rómulo Gallegos por el poder que va adquiriendo el partido Acción Democrática en los sindicatos petroleros, aliados a la vez de los grupos sindicales controlados por los comunistas, por lo que Harry Truman toma la decisión sobre "cero riesgos" y decide derrocarlo también.

Luego, derrocado Gallegos, accede al poder, una especie de triunvirato de militares dominado por Carlos Delgado Chalbaud, quien envía una misión a Irán para conformar un cartel petrolero que defienda los precios, y es cuando se urde el plan de asesinarlo. Al principio todo había sido muy confuso. Acusan del asesinato a Rafael Simón Urbina, pero poco después a Urbina vienen y lo eliminan también. La trama se va agigantando a medida que transcurren los días. Es sin duda una conspiración de grandes proporciones contra Venezuela, cuyos jefes se encuentran en las poderosas compañías petroleras. Y el crimen se daba en momentos en que Carlos Delgado Chalbaud estaba dando pasos para llamar a elecciones y convocar una reunión de países productores de petróleo. El presidente Delgado Chalbaud quería formar un poderoso cartel, como hemos dicho. Lo que llama la atención de este atentado, es que sea de los típicamente diseñados por el Departamento de Estado norteamericano en los que no queda nadie vivo para contarlo.

En el proyecto de golpe de estado planificado por Urbina, se previó un gabinete en el que figuraba Antonio Aranguren para presidente y un militar retirado para el Ministerio de la Defensa, reservándose Urbina para sí la Gobernación del Distrito Federal. Aranguren era un poderoso magnate petrolero quien en 1907, había recibido del gobierno una importante concesión, conocida como la Concesión Aranguren. Tendría el privilegio de desarrollarla durante 50 años para extraer petróleo y asfalto en los distritos Maracaibo y Bolívar, del estado Zulia. Con el objeto de utilizar las mismas triquiñuelas que aplicaban siempre estos oligarcas, viajó Aranguren a Londres en 1910 para traspasar su concesión a los británicos, dicha concesión, con lo cual obtuvo jugosas ganancias. Es cuando se inventa la Venezuelan Oil Concessions Ltd, VOC, que se crea definitivamente en 1913. Aranguren sigue teniendo en esta compañía importantes acciones, las cuales serán posteriormente adquiridas por la Royal Dutch-Shell (con Aranguren manteniendo una importante participación).

A Pérez Jiménez lo derroca la CREOLE en 1958 y a Chávez lo derroca la EXXOMOBIL el 11 de abril de 2002, y esa misma compañía lo acaba envenenando, conduciéndolo a su muerte el 5 de marzo de 2013. Desde el asesinato de Chávez, la EXXOMOBIL no ha dejado de conspirar contra Venezuela. Fue ella la que exigió las sanciones y bloqueos que aplicó Obama contra nosotros, y ahora disparan por mampuesto desde Guyana, para tratar de despojarnos el territorio Esequibo. La EXXOMOBIL ahora con Trump exige que se le aplique aranceles del 25% a los países que compren nuestro petróleo. Trump tuiteó que dichos aranceles entrarían en vigor el 2 de abril. Pero quien está al mando del referido decreto es nuestro enemigo a muerte, secretario de Estado, Marco Rubio. Algo que no se entiende es que de momento se pide que siga operando Chevron en Venezuela, ¿y será que EE UU se aplicará a sí misma aranceles del 25%? Dice le decreto: "A partir del 2 de abril de 2025, se podrá imponer un arancel del 25% a todos los productos importados a Estados Unidos desde cualquier país que importe petróleo venezolano, ya sea directamente desde Venezuela o indirectamente a través de terceros… Estados Unidos no tolerará que ningún tercer país o sus empresas petroleras produzcan, extraigan o exporten petróleo y productos relacionados con el petróleo con el régimen de Maduro en Venezuela… Se trata de un régimen que ha robado sistemáticamente en las elecciones, saqueado a su pueblo y colaborado con nuestros enemigos. Cualquier país que permita a sus empresas producir, extraer o exportar desde Venezuela estará sujeto a nuevos aranceles, y cualquier empresa estará sujeta a sanciones...". Hay que tomar en cuenta que China es el principal importador de nuestro petróleo, pero también están España, India, Rusia, Singapur, República Dominicana, Cuba y Malasia. ¿Se irán a lanzar contra todos ellos? Al Catire bocazas, ya casi nadie le está creyendo… pero lo que si no debemos dejar de lado es el proyecto de Marco Rubio, de intentar asesinar al presidente Maduro: ese es el verdadero punto en este momento!!!!