El periodista Juancho Marcano llegó temprano a su casa, pues hacerlo más tarde era encontrarse con la ráfagas destellantes disparadas por el sol, que quieren destruir no solo los seres vegetales, si no los demás seres vivientes que se encuentran en ese espacio llamado la Tacarigua de Margarita.
El perro Pipo lo recibió, como siempre, y dejó que pasara a la casa a tomar agua para que luego se sentara en el garaje para tomar fresco, como era su costumbre.
Pasado un tiempo, Pipo, se llegó donde se sentó el periodista y ahí sin muchos titubeos, lo abordó: ¿Cómo te fue Juancho? ¿Qué cuentas?
El reportero respondió con prisa y expresó: "Me fue bien, Pipo, a pesar de ese calor angustiante que recorre al pueblo como diversión en diciembre. Allí hablé con un viejo agricultor que tiene más de 90 años y me confesó que en su vida, no había visto semejante sequía en este lugar, aunque han habido otras que como la gente criaba vacas, el pasto escaseaba y había que llegarse a las cumbres de ciertos cerros a buscar las hojas de una mata llamada Cagua que eran grandes y frescas y al ganado vacuno le gustaba mucho".
¿ Es decir, Juancho, que esas sequías vienen desde hace mucho tiempo?
- Claro, Pipo, ya como si lo hemos hablado. ¿Por qué tú crees que ahora en el pueblo hay tan pocos conucos? Simple y llanamente, porque la gente se fue alejando y decepcionando de las actividades agrícolas y migraron a otros trabajos, unos no tan rentables, pero ahí tienen un jornal fijo y con eso se defienden éllos y su familia. Mientras que en un conuco, donde el trabajo es extenuante, tienen que depender de la lluvia y si ésta no viene, se pierde el trabajo y también la semilla.
- Es lastimoso y triste todo lo que dices Juancho, pero cómo se brega contra la naturaleza y, de paso, el hombre cada día inventa formas para seguir destruyéndola.
Pero hay que seguir luchando. Porque no sé si has escuchado esto: "Los éxitos más importantes se consiguen cuando existe la posibilidad de fracasar", y lo dijo: Mark Zuckerberg. ¿Qué te parece?
- Muy bien, Pipo, dijo el periodista, y después ambos callaron.
