Cynthia Machado Zuloaga está feliz, con una sonrisa de crema dental y con una minifalda que no deja nada para la imaginación, sobre todo para los que no tenemos imaginación.
Estoy trabajando con María Corina Machado, amigo, la única persona que se está tomando en serio este cuento de la unidad de la oposición. Hay allí un tal señor Omar Barboza que parece un enviado de Alfaro Ucero, así dijo mi papi, papito, papitote, porque yo a estas alturas no sé quién es ese señor Alfaro, pero te cuento que este Barboza parece sacado de las pirámides de Egipto. Dice cada cosa. En cambio Marycori no dice, trabaja, y allá está en el estado Aragua, que según me contó nunca lo había visitado, y aquello parece que le falta de todo, desde un buen centro comercial hasta un aeropuerto internacional.
El mesonero se acerca lentamente. Viene haciendo un paneo desde la punta de los pies de Cynthia hasta la cabeza. El hombre ve y saca la lengua.
Llega a la mesa, coloca la botella de agua Evian y me dice que después me trae el café. Es una excusa para volver y verla de cerca.
Estamos a punto de crear una empresa encuestadora, porque no confiamos en ninguna. Según Liliana, quien ahora sale mucho más bonita en los afiches, antes parecía que estaba molesta, Leopoldo López le ha pagado a todas las encuestas para que coloquen como ganador en el Municipio Chacao a su nené, el niño Graterón.
Cómo será la cosa, que ni Miguel Enrique Otero, o sea, al que tu amigo Teodoro lo llamó no sé qué cosa, tampoco cree en las encuestas. Ahora la única persona que tiene seriedad en la oposición es Marycori, y por eso ya estamos montando nuestra encuestadora, con la particularidad de que todas las personas que van a trabajar allí serán mujeres, y con el perfil de Marycori, por eso, yo estoy practicando desde ya, y te pienso hacer mi primera encuesta. Nuestro slogan es: Encuéstate con Súmate.
El mesonero vuelve con mi café. Lo veo venir con una cara de deseo reprimido que Sigmund Freud lo atendería contentísimo en el diván. El hombre se acerca y viéndole ese cuerpo ansiado y deseado a Cynthia, coloca el café sobre la mesa.
Le digo a Cynthia que el mesonero puede ser su primer entrevistado. Y me contesta: "Esa es otra diferencia, en Súmate no encuestamos marginales".
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