En Australia, la diferencia entre las escuadras chinas y norteamericanas fue de tres medallas de oro a favor de los atletas gringos, pero cuatro años más tarde los asiáticos le sacaron de ventaja la bicoca de 15 doradas al otrora poderoso equipo del norte. Sí, quince pruebas de diferencia entre el país más habitado de la tierra y el más avanzado tecnológicamente, el mejor armado, el que tiene soldados en tres frentes del mundo a la vez en pleno conflicto.
Eso tiene sus méritos para el país anfitrión, que aparte de hacer grandes inversiones en instalaciones deportivas que, según los críticos, son de un altísimo nivel arquitectónico y de avanzada tecnología, tuvo que preparar el contingente de 645 atletas que lo representarían en la magna justa deportiva del mundo y que incluso, cerca de la fecha de la inauguración su territorio sufrió un devastador terremoto que causo una gran cantidad de muertos y heridos.
Es también interesante hacer ver que la política guerrerista del presidente etílico de USA, acompañado del inefable primer ministro inglés, la premier alemana y el vinero francés, intentaron sabotear los juegos anteponiendo el tema de los derechos humanos e intentando favorecer la imagen del Dalai Lama y la independencia del Tibet del territorio chino. Al final, Bush se vio en las canchas y estadios chinos con una espectacular borrachera que los guardaespaldas se vieron en la necesidad de sacarlo cargado de la tribuna.
Bueno, eso en realidad es lo anecdótico pero trascendente a la vez, pero en realidad se buscaba el fracaso de los chinos en la organización y en la ejecución de los juegos pero se llevaron una tremenda sorpresa que tampoco fue tal para el mundo con los resultados generales de los juegos y que se observa en el medallero dorado.
Sé que lo han seguido en la prensa pero se los escribo: le siguieron Rusia, Gran Bretaña y Alemania con 23, 19 y 16 medallas de oro respectivamente. Australia 14, Corea del Sur con 13 y una primera sorpresa por encima de Japón con 9, la Italia con 8, Francia con 7 al igual que Holanda y de todos esos, Canadá con 3 de oro en el puesto 19. Ucrania con 7 de oro también fue una sorpresa entre los grandes. Son los dueños del mundo, el grupo de los 8 o G-8, los industrializados, los dueños de la tecnología.
Entre los 20 primeros países se repartieron la cantidad no despreciable de 245 medallas doradas, incluyendo entre esos a la sorprendente Jamaica que se hizo de 6 del preciado metal, por encima de la España, franquista ella, de Brasil, Argentina, México y Cuba. La delegación venezolana, junto al resto de los 180 países mas que asistieron a estos juegos se llevan el bagazo, con un valor extraordinario, pero bagazo al fin.
Es más, unos 123 países que participaron no ganaron medallas y 53 países dejaron de participar.
Así, siguen siendo los grandes porque entre ellos eliminan y ponen deportes, como es el caso del beisbol y el softbol que se jugaron por última vez y la causa es muy sencilla, que hace Londres, la próxima sede del 2012, con estadios para esos deportes. Y nadie dijo nada. Para eso organizaron la copa mundial de Beisbol con peloteros profesionales de las grandes ligas, para entretenernos y se dan el lujo de llevar a los jugadores y atletas profesionales de basket, atletismo, volibol y mañana incluirán el futbol americano y su hermano practicado por los ingleses y algunos países como argentina en América, el Ruby.
Lo que si es y debe seguir siendo cierto, es que el gobierno venezolano debe seguir invirtiendo en la gente, en el deporte de alto rendimiento y en el deporte recreacional y en este último con más fuerza porque son los que impulsan la prevención en los diferentes estratos de las comunidades, aparte de la educación. Deben nacer mas piscinas, mas canchas en aquellos deportes en que hagan falta, debe salir los recursos y se sugiere que los impuestos que pagan los casinos, las loterías , los caballos y cualquier juego de azar vaya a un pote para el deporte….
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