No han sido 16 los campesinos muertos, son muchos los desaparecidos y no quieren estregar los cadáveres.
En días precedentes, hubo escenas de violentas agresiones a personas y arremetidas a bienes de instituciones dependientes del Gobierno, además de toma del aeropuerto y otros se suscitaron en la capital pandina. Desde que el Consejo Nacional Democrático (grupo de ultra derecha) (Conalde) declaró el inicio de movilizaciones, hace casi tres semanas, por la restitución del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), los hechos de violencia en la región pandina la cabeza del Comité Cívico y la Prefectura fueron en aumento.
Ni los efectivos de seguridad del Estado, como los militares y policías se salvaron de los abusos e intolerancia de grupos de personas alentados por la Prefectura y los cívicos. Estos fueron humillados y amenazados por estas turbas, que amenazaron la seguridad y el bienestar de la población. Según versiones de testigos y dirigentes campesinos, la madrugada del pasado miércoles, una marcha de este sector que se dirigía a un ampliado en la localidad de Filadelfia fue emboscada por funcionarios de la Prefectura, entre ellos supuestos sicarios.
Hay información de que hay muchos más muertos y heridos en inmediaciones de El Porvenir, Filadelfia y otras regiones del lugar.
Los ministros de Gobierno, Alfredo Rada y de Defensa, Wálker San Miguel, dieron anoche lectura al Decreto Supremo 29705 mediante el cual queda prohibido el uso de armas de fuego, armas blancas, material explosivo, reuniones, mitines y que más de tres personas caminen juntas a partir de las 00.00 hasta las 06.00 horas. A esta misma hora deberán cerrar puertas, bares, cantinas, centros de diversión y lenocinios entre otros. Del mismo modo, queda prohibido el tránsito de automóviles entre las 00.00 hasta las 06.00 horas. Asimismo, instruyó proceso contra los responsables de estos actos que no escatimaron en romper con la tranquilidad de aquel departamento.
AEROPUERTO
Casi simultáneamente, un contingente militar, fuertemente armando, retomó la tarde de este viernes el aeropuerto de la ciudad de Cobija “Capitán Anibal Arab”, que estaba ocupado por cívicos y funcionarios de la Prefectura. Al menos, son 200 uniformados los que tomaron las calles de Cobija que se encuentran en penumbras, porque la energía eléctrica fue cortada ayer por los cívicos. Asimismo, se confirmó y se mencionó la muerte de un militar y seis personas resultaron heridas. En esos momentos se cortó el suministro de energía eléctrica.
Medidas de presión continúan; pero sin actos de violencia.
El Gobierno y el Consejo Nacional Democrático (Conalde) llegaron esta madrugada a un principio de acuerdo para lograr la completa pacificación y la normalidad retorne al país. Luego de una reunión que se prolongó más de ocho horas en Palacio Quemado, entre representantes gubernamentales, el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y otras autoridades de esa región, finalmente se abrió una puerta real al diálogo.
Inicialmente se había anunciado también la presencia del prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, pero la autoridad cruceña no llegó a La Paz. Se conoció que durante el encuentro se abordaron en grande los temas centrales como: el levantamiento del Estado de Sitio, devolución de la infraestructura de las instituciones del Estado que fueron tomadas por los cívicos, el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), reforma constitucional y autonomías.
El Prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, desautorizó la noche del viernes a su colega de Tarija, Mario Cossío, que se reunía con el Gobierno en Palacio Quemado (0055), indicando que no lo representa, y amenazó que no acatará el estado de sitio decretado por el Poder Ejecutivo. El Prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, no acata la Constitución Política del Estado vigente, que contempla el Estado de Sitio para reestablecer el orden en lugares donde hay convulsión interna; tampoco cumple normas internacionales humanitarias que en situaciones de conflicto protegen a la persona humana, su vida y libertad. “Resistiré”, dijo a varios medios Fernández, aliado durante años del ex dictador Hugo Bánzer Suárez. Ante esta realidad, el gobierno anunció su detención. La negativa de Fernández viola el Derecho Internacional Humanitario, codificado en los Cuatro Convenios de Ginebra del 12 de Agosto de 1949 y en sus protocolos adicionales de 1977, contempla normas de derecho inspiradas por el sentimiento de la humanidad y centradas en la protección de la persona humana, en la protección de la vida y la libertad de miles de seres humanos. Entre las principales normas, las autoridades en conflicto deben contemplar algunos puntos como por ejemplo: • Colocar a los heridos en lugares fuera de peligro. • Prohibición de atacar al personal de salud. • Prohibición de atacar a los solados enfermos. • Consideración del hospital como santuario. • Considerar al hospital militar tan sagrado como el hospital civil.
El Derecho Internacional Humanitario crea unos deberes para el personal de salud.
Un deber de asistencia humanitaria (recoger y asistir a heridos y a enfermos)
Esto incluye el ejercicio de las profesiones propias del personal sanitario acorde con principios éticos y humanitarios al brindar tratamiento a heridos y a enfermos, prevenir las enfermedades y desarrollar programas de rehabilitación. Hasta la fecha, no se pudo hacer nada de eso en Cobija. Es más, algunos personas internadas en el Hospital de esa ciudad temen por sus vidas porque algunas personas del nosocomio les amenazaron con matarlos si es que los militares decidían tomar el control de toda la ciudad.
Defensor del pueblo aseguró que existen más cuerpos…
A las ocho personas que fallecieron el jueves en un violento enfrentamiento por parte de miembros de la Prefectura de Pando contra campesinos de la zona, ayer se sumaron otras seis, la mayor parte, colonos. El representante del Defensor del Pueblo en Cobija, Rafael Vidal, aseguró que existen más cuerpos que no pueden ser rescatados por la oposición de sectores radicales que impiden el ingreso a Porvenir, distante a 35 kilómetros de la capital.
El ministro de Gobierno, Alfredo Rada, calificó el hecho de “una masacre” perpetuada por sicarios y habla de desaparecidos. Según el hospital de Cobija, 85 resultaron heridos (cinco graves). El jueves se creía que los afectados sólo llegaban a 38. Son 20 los heridos por arma de fuego. El senador disidente de Unidad Nacional Abraham Cuéllar relató que los seis cuerpos hallados ayer se encontraban botados en un playón del río Tahuamanu, cerca de Porvenir.
El jueves, los campesinos se trasladaban al municipio de Filadelfia, bastión masista, donde tenían planificado su ampliado. En Tres Barracas, a 20 kilómetros de Cobija, el Servicio de Caminos (Sepcam), dependiente de la prefectura, hizo dos zanjas para evitar el paso de la delegación por decisión del Comité Cívico.
En ese punto, hay dos versiones: Los colonos aseguran que hay grupos paramilitares armados, los funcionarios prefactúrales se defienden. En este punto, las versiones son contradictorias. El dirigente de la Federación de Campesinos, Antonio Moreno, relató que la gente de su sector fue emboscada por paramilitares que estaban escondidos entre los árboles. Varios fueron asesinados por las ráfagas de ametralladoras mientras cruzaban el río. En cambio, los más afortunados, lograron huir monte adentro. Vidal confesó que la situación es desgarradora. “Hay gente que está perdida en el monte, atemorizada y dispersada, no permiten acceder a la zona donde balearon".
Impiden rescate de lo cadáveres...
Hasta la tarde del viernes la persecución a los campesinos continuaba y que el área de combate está controlada por sectores armados. Moreno confirmó que bandas organizadas impiden el ingreso a los equipos de rescate y que los cuerpos están desapareciendo. “Algunos campesinos vieron que están tomando la huella digital de los cadáveres, luego los desvisten y, finalmente, son cargados en volquetas y trasladados a paraderos desconocidos”. El reporte indica que existen varios desaparecidos. Moreno explicó que, por ejemplo, la delegación de su comunidad estaba integrada por 35 personas y que hasta ahora sólo aparecieron 15 y no saben nada de los otros. El director del Sepcam, Julio Villalobos, justificó la violencia, argumentando que los campesinos venían armados y con la intención de tomar la Prefectura. Sin embargo, sólo un funcionario de esa dependencia cayó muerto y el resto eran campesinos y conolizadores. Además, confirmó que la decisión de bloquear a los campesinos fue tomada por el Comité cívico de Pando. El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, informó que el Ejecutivo pidió al Congreso investigar la violencia en Cobija como cabeza de la Fiscalía.
El director Nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), coronel Pablo Caballero, aseguró que se indaga la posible existencia de más muertos y desaparecidos en Pando y que, hasta el momento, ya hay 14 detenidas, las cuales fueron remitidas a la cárcel por orden del juez cautelar. Sin embargo, los 14 fueron tomados como rehenes por los cívicos, quienes los entregaron a la Policía.
Los campesinos protestaron porque los detenidos son de su sector fueron aprehendidos por cívicos, y luego de ser apaleados y brutalmente golpeados. Se informó que Alfonso Cruz, un estudiante de Puerto Rico, también falleció fue baleado en el frente. Le toman la huella digital a los cuerpos, los desvisten y los suben a volquetas para desaparecerlos
Julio Villalobos (director del Sepcam): “El señor Miguel Becerra, que tiene una agrupación ciudadana aliada del MAS, organizó grupos de campesinos. Son gente que venía desde Riberalta, gente pagada y armada que venía dispuesta a matar a las personas, entrar a Cobija y tomar a la prefectura. El Comité Cívico de Cobija tomó la decisión de hacer dos zanjas en la carretera para evitar su llegada y así evitar la matanza. Ellos tenían armas, los cívicos no tenían. Para evitar las provocaciones se hizo este trabajo en el puente de Cachuelita. Cuando llegaron los campesinos, el Comité Cívico retrocedió a la comunidad de Porvenir donde se concentró, pero cruzaron otros campesinos que venían del municipio de Filadelfia, disparando desde tres camiones. En el primer ataque con armas de fuego mataron a dos personas. Ahí comenzó la matanza” y el resto eran campesinos y conolizadores. Además, confirmó que la decisión de bloquear a los campesinos fue tomada por el Comité cívico de Pando. El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, informó que el Ejecutivo pidió al Congreso investigar la violencia en Cobija como cabeza de la Fiscalía.
El director Nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), coronel Pablo Caballero, aseguró que se indaga la posible existencia de más muertos y desaparecidos en Pando y que, hasta el momento, ya hay 14 detenidas, las cuales fueron remitidas a la cárcel por orden del juez cautelar. Sin embargo, los 14 fueron tomados como rehenes por los cívicos, quienes los entregaron a la Policía. Los campesinos protestaron porque los detenidos son de su sector fueron aprehendidos por cívicos, y luego de ser apaleados y brutalmente golpeados. Se informó que Alfonso Cruz, un estudiante de Puerto Rico, también falleció fue baleado en el frente. Le toman la huella digital a los cuerpos, los desvisten y los suben a volquetas para desaparecerlos.
Campesina que pidió el anonimato:“Yo ya sabía que mis dos hermanos venían con la delegación. Me acerqué a la zona gracias a un primo mio porque ya habíamos visto a gente de la prefectura trasladarse. Llegamos hasta el lugar del hecho cuando los campesinos estaban en medio puente. Al frente, de unos carros de la prefectura empezaron a disparar con ametralladoras. Los barrieron a toditos, los mataron. Los tumbaron al río, entre ellos venían mujeres y niños. A los que nadaban les disparaban, los que iban al monte los perseguían. Volvieron y dijeron "ya los matamos, a uno le sacamos los ojos, vamos a ver si va a vivir ese". A uno y en nuestras narices lo mataron, con dos tiros en las piernas y uno en la boca, lo desvistieron y lo botaron al río. Había un hombre que se llevó toda la ropa de los muertos. Deben haber como 80 personas muertas.” Los fallecidos: 1. Bernardino Racua; 2. Agripino Vargas; 3. Sebastián Rodríguez; 4. Celedonio Basualdo; 5. Germán Justiniano; 6. Emilio Peña; 7. Alfredo Céspedes, 8. Nora Montaño; 9. Arnoldo Gonzáles; 10. Dieter Tupa; 11. Sr. Aldias (no se sabe nombre) 12. Peter López;13. Alfonso Cruz;14. Pedro Oshiro.
“Amenazaron con matarme si los militares se animan a tomar Cobija”, narró Jorge Borbo, una de las víctimas que permanece internada en el Hospital.
Ante esta realidad, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, anunció a la Red Erbol la detención del Prefecto Leopoldo Fernández, precisamente “por haber violado la Constitución y por haber generado la sangrienta matanza de campesinos”.
“Tomaremos en cualquier momento el control de la ciudad de Cobija”, indicó minutos antes del operativo final para reestablecer el “orden constitucional” alterada por “grupos paramilitares, mafiosos que operan a órdenes de Fernández, quien se hizo como político en la dictadura”.
Honduras se rebela contra EEUU en solidaridad con Bolivia
Honduras, que en los años 80 fue catalogada como un portaaviones de Estados Unidos, se ha revelado por primera vez contra Washington por una decisión del presidente Manuel Zelaya de solidarizarse con Bolivia, aunque el mandatario afronta una aplanadora en contra por su decisión. "USS Honduras" era una de los calificativos que recibía este país centroamericano de parte de la misma prensa estadounidense en los años 80, cuando acogió a más de 300.000 efectivos norteamericanos.
Era la época en que Honduras servía de base a los rebeldes contrarrevolucionarios nicaragüenses, más conocidos como 'contra', apoyados por Washington, que levantaron sus bases en las montañas fronterizas con Nicaragua, y desde donde incursionaban a su país tratando de derrocar al régimen izquierdista de los sandinistas (1979-90).
Zelaya ha dado vuelta al disco y, en una acción sin precedentes, postergó el viernes el acto de recibimiento de credenciales al nuevo embajador de Estados Unidos, Hugo Llorens, exigiendo que "se busque una solución al problema boliviano”
Zelaya, que llegó al poder a través del derechista Partido Liberal (PL) ha dado un giro y se define como de "centroizquierda, y si les molesta que le quiten lo de centro".
El 25 de agosto, el mandatario hondureño firmó la adhesión de Honduras a la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA) fundada por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, pese al rechazo del empresariado y buena parte de las fuerzas políticas del país. Ya antes, Zelaya había dado señales de una política antiestadounidense, sobre todo el 19 de julio cuando participó en Nicaragua en el aniversario del triunfo de revolución sandinista, donde fustigó a Estados Unidos.
Luego de que el 30 de mayo se accidentó un avión de Taca, con saldo de cinco muertos, en el aeropuerto de Tegucigalpa, Zelaya intentó abrir como terminal aérea civil la base de Palmerola, construida a 70 km al norte de la capital, por Estados Unidos precisamente en el marco de la guerra fría y actualmente base de unos 500 efectivos estadounidenses.
Pero a nivel interno, tanto la firma del ALBA como el acto inamistoso contra el embajador Llorens levantaron una ola de críticas contra Zelaya, al extremo que el ex presidente del Parlamento Centroamericano (Parlacen), Mario Facussé, pidió que "llegó el momento en que el Congreso debería ya sustituir al presidente de la República".
La decisión de Zelaya contra Estados Unidos es "un acto totalmente demencial al pretender romper una relación con un país que realmente nos ha favorecido y del país que dependemos absolutamente", advirtió Facussé. Mientras el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), en una ola de protestas de distintos sectores, manifestó su "sorpresa" por la decisión de Zelaya y señaló que "para solidarizarse con un pueblo amigo, no se necesita poner en riego las relaciones con otro pueblo amigo".
"Este año se esperan 3.000 millones de dólares en remesas, ni siquiera con el pensamiento un hondureño debería poner en riesgo esas remesas", afirmó el presidente del Cohep, Amilcar Bulnes, en alusión al millón de hondureños que vive en Estados Unidos y que envía desde allí dinero para sus familiares.
Pero Zelaya señaló que la recepción de cartas credenciales sólo se pospuso y que no están en riesgo las relaciones con Washignton, pues incluso tiene una viaje después del 21 de setiembre para reunirse con el presidente George W. Bush y otras autoridades de ese país.
Embajadas de Estados Unidos y de Bolivia “ intentan bajar de nivel
deterioro” • Las legaciones diplomáticas serán dirigidas por los encargados de negocios. Dos ex cancilleres sostienen que ambos gobiernos tienen que crear un clima de confianza mutua.
ESO ESTÁ POR VERSE……Bolivia resiste, los pueblos de este hemisferio te defenderemos, nos defenderemos. Y Organización de estados Americanos por qué tanto silencio.
