APOYO A MATILDE GARCÍA
Recientemente, Matilde García, periodista egresada de la Universidad Santa Rosa ingresó a la Dirección de Comunicación e Imagen Institucional de la Biblioteca Nacional de Venezuela, llena de entusiasmo y deseos de aprender sobre la institución responsable de preservar la memoria del país y proporcionar a todos los compatriotas el acceso a dicha memoria.
No tenía idea Matilde de que su ánimo y buena voluntad en relación a su trabajo la llevaría a enfrentarse en una diatriba sin sentido con un ciudadano denominado José Sant Roz, quien se ha dedicado a despotricar acerca del Dr. Fernando Báez, Director General del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, así como de la gestión que está llevando a cabo al frente de la BN.
A los ojos de Sant Roz, el Dr. Báez es responsable de una serie de delitos entre los que se encuentran ser Licenciado en Educación, doctor en Bibliotecología, hablar correctamente varios idiomas, haber escrito varios libros exitosos y para colmo ser un hombre reconocido internacionalmente por denunciar el memoricidio realizado por Bush en Irak. Sant Roz niega rotundamente la hoja de vida del Doctor Báez y por supuesto obvia los resultados positivos de la gestión de Báez al dirigir la Biblioteca Nacional. Ignora por completo la extensión del horario, la Biblioteca Digital Venezolana, la recuperación de los espacios aledaños a la Biblioteca Nacional, los usuarios y usuarias beneficiados con la modernización de la sala de Referencia, el intenso trabajo desplegado para conmemorar los 175 años de la Biblioteca, en fin todos los avances ocurridos desde que el Dr. Báez asumió la Dirección de la BN en abril pasado.
Sant Roz enfiló su verbo destructivo y descalificador con una colega que está comprometida con la tarea que viene desarrollando en la Biblioteca, acusándola de ser el alter ego de Báez y dudando de su existencia. Para información del señor Sant Roz, Matilde García existe, está trabajando con la mayor responsabilidad y eficiencia cubriendo informaciones de la Biblioteca y de las Bibliotecas Públicas de todo el país.
Considero absurdo gastar tiempo y energías discutiendo con un ser que se dedica a desprestigiar de todo y de todos incluyendo al Presidente Chávez. La revolución necesita profesionales como Matilde García, personas dispuestas a enumerar los logros alcanzados en revolución y a plantearse metas de trabajo que beneficien un gran número de personas.
Dar a conocer las mejoras de la Biblioteca Nacional no es ningún acto bochornoso, por el contrario debe ser motivo de orgullo para esta colega valiente y solidaria que alzó su voz en defensa de la Biblioteca Nacional. Todos los hechos tienen aspectos positivos y negativos, lo positivo del capítulo Matilde- San Roz es que los lectores de aporrea se han enterado de todas las posibilidades que les ofrece la Biblioteca Nacional para informarse, educarse, formarse como promotores de cultura y enriquecer su espíritu para mejorar cada día el proceso de cambios en que estamos involucrados.
Cada quien escoge su forma de dejar una huella en la vida, Matilde García decidió hacer un periodismo constructivo, en pro de una mejor revolución, el Sr. Sant Roz, escribe panfletos destructivos en los que ofrece a los lectores puro detritus. La gente da lo que puede dar.
(*)Directora de Comunicación e Imagen de BN
lindarias@cantv.net