Aumenta el costo de vida en Europa; Estados Unidos pierde 62 mil empleos; 50 millones de personas se suman al ejército de hambrientos


06-06-2008.-Una de las peores semanas en la historia del sector bursátil acaba de concluir en Estados Unidos, por la incesante subida del precio del petróleo, la debilidad del dólar y de la economía doméstica. Lo que más preocupa a los inversores en Londres, Nueva York o Tokio es que no aparece una luz en el horizonte y los pronósticos son más que pesimistas.

En el caso de Wall Street se prevén malas noticias al comenzar la etapa de informar los resultados empresariales en el segundo trimestre, y la continuación de la pérdida de la confianza de los estadounidenses en la economía del país.

Las bolsas neoyorquinas tuvieron una semana corta dado el feriado por el Día de la Independencia, el viernes, en la cual el Dow Jones de Industriales, el promedio más conocido, perdió 0,5 por ciento. El Nasdaq, del sector de nuevas tecnologías, entregó el 0,3 por ciento y el Standard and Poor's 500, el más concurrido, 1,2 por ciento.

El día intermedio de la semana el Dow Jones cayó más de 20 por ciento por debajo del máximo histórico, alcanzado en octubre. Cuando se presenta tal situación se considera que el mercado está en terreno pesimista.

Allende el Atlántico, la decisión del Banco Central Europeo de elevar las tasas de interés en un cuarto de punto a 4,25 por ciento, aunque aguardada, mató las esperanzas de muchos inversores, quienes soñaban con una rebaja.

Analistas consideran que no hay razones para el pánico bursátil, pero según Caspar Zitzewitz, de la firma de administración de capitales Trendconcept, se atraviesa un periodo de amenazas, con una economía débil y una inflación alta.

En la City, centro financiero británico, el promedio Footsie 100 bajó el viernes 1,16 por ciento y se situó en 5.412,8 puntos, el precio más bajo del año y similar al registrado en noviembre de 2006. El CAC-40 de París, cedió 1,8 por ciento, hasta 4,266 unidades y se instaló en niveles desconocidos desde comienzo de julio de 2005. El Ibex 35 de Madrid entregó esta semana 2,75 por ciento, a 11.765,9 puntos, mínimo anual de cierre y nivel similar al de de agosto de 2006. Cerró así su peor semestre desde 1990. La situación fue similar en Milán, donde el Mitbel resbaló 1,61 por ciento, Francfort, con pérdidas de 1,28 para el DAX, y Zurich donde el SMI retrocedió 1, 04 por ciento.

Los mercados financieros asiáticos cayeron por cuarta semana consecutiva y los peores resultados fueron para Tokio donde el Nikkei 13.237,89 puntos tras 12 descensos sucesivos, su peor registro desde abril de 1954.

Negro futuro para el mercado petrolero


Las cotizaciones del petróleo, convertidas en verdugo de la economía mundial, establecieron esta semana nuevas marcas absolutas al alza. Esto ocurrió -según analistas- por la devaluación del dólar dólar, con el cual se cotiza el llamado oro negro, y el temor a un desajuste de la economía de Estados Unidos. A ello se unen problemas en los suministros de Nigeria e Iraq, más las amenazas de agresión a Irán.

Este último asunto se debatió a mediados de la semana en un encuentro internacional en Madrid en el cual el ministro iraní del Petróleo, Gholam Hossein Nozari, advirtió acerca de que una posible acción militar contra Teherán acelere la escalada en los precios del crudo.

Otro factor que influyó en el encarecimiento de los combustibles fue la decisión del BCE de subir las tasas de interés a su nivel más alto en siete años con el objetivo de mantener bajo control la inflación.

En una semana corta, pues el viernes fue feriado en Estados Unidos por el Día de la Independencia, el barril de petróleo que se entregará en agosto subió el jueves al precio récord de 145,85 dólares, antes de cerrar en 145,29.

La Agencia Internacional de Energía (AIE) pronosticó en Francfort que el precio del petróleo caerá en los años próximos para repuntar en 2013 cuando prevé una caída de la oferta y el aumento de la demanda. El presidente de la Agencia Nobuo Tanakas hace el vaticinio en entrevista con el diario financiero alemán Handelsblatt, que la publicará el lunes.

En una versión del material divulgada hoy, el funcionario repite el llamamiento a los productores de crudo a aumentar las inversiones en la prospección y explotación y a los consumidores a ahorrar energía. Instó, asimismo, a los países en desarrollo a suprimir los subsidios de los precios de la gasolina y a los industrializados a mantener los impuestos al combustible, para evitar una mala interpretación de la situación por los consumidores.

Días antes Tanaka declaró a la prensa que el mercado mundial del oro negro está muy ajustado y deja vulnerable factores capaces de fomentar el aumento de las cotizaciones.

La semana que termina las precios del crudo establecieron nuevos récord al alza en el New York Mercantile Exchange y el Intercontinetal Exchange de Londres, en los cuales se vende ya a más de 145 dólares el barril.

La canasta de 13 calidades de la Organización de Países Exportadores de Petróleo sobrepasó el jueves último la cota de ciento cuarenta dólares el tonel que se entregará en agosto.

Hambre

La crisis alimentaría y la escalada en los precios del petróleo mantienen en tensión el escenario económico financiero del planeta y auguran un segundo semestre lleno de preocupaciones. La crisis alimentaría, que amenaza con provocar la hambruna global, fue motivo el jueves de una sesión del Parlamento Europeo para analizar sus causas y posibles soluciones, mientras el número de muertos por inanición aumenta en el mundo.

En la cita el director general del Fondo de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO) Jacques Diouf indicó que otros 50 millones de personas comenzaron a pasar hambre en el mundo este año debido a la escasez y encarecimiento de los alimentos. a FAO concedió particular importancia en el agravamiento de la situación a la especulación y las restricciones a la exportación.

El costo de la vida en la Eurozona llegó en junio al cuatro por ciento, máximo histórico en 17 años. El instituto emisor europeo ha establecido el dos por ciento como límite para considerar una economía sustentable.
El jueves el Departamento norteamericano de Trabajo reveló que en la semana anterior se perdieron otras 62 mil plazas laborales, aunque la tasa de desempleados se mantuvo en el 5,5 por ciento. Los analistas esperaban la pérdida de 60 mil empleos y un índice de desocupación de 0,1 punto.

Retroceso en la economía regional
El presidente de la Corporación Andina de Fomento (CAF) Enrique García Rodríguez advirtió sobre el eventual fin de la bonanza económica regional debido a la crisis en Estados Unidos. "Los últimos cinco o seis años han sido, sin lugar a duda, los mejores que ha tenido América Latina posiblemente en los últimos 50 años". Sin embargo, "hay que poner luz amarilla, casi roja, que lo que parecía tan bueno y que continuaría ad infinitum hace un año, hoy día por las dificultades que se han planteado en Estados Unidos con la crisis que comenzó en el sector hipotecario y las derivaciones que eso ha tenido en la economía real, y las implicaciones que tiene en la economía mundial, indudablemente nos obliga a poner una señal de cautela".

El aumento de la inflación podría llevar a un menor crecimiento económico de los países de América Latina y el Caribe, comentó el Observatorio Regional de Seguridad Alimentaria y Nutrición, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

Según el organismo, los elevados precios de los alimentos "se han reflejado a través del incremento de la inflación regional". En 2007, la inflación en Latinoamérica cerró en 6,3 por ciento, poco más de un 1 por ciento mayor que la tasa del año anterior. "Considerando 16 economías de la región, el promedio de inflación acumulada general y de alimentos a mayo de 2008 se ubica en cinco por ciento y 7,2 por ciento respectivamente, en tanto que en los últimos 12 meses la variación de cada uno de los índices fue de 11,1 por ciento y de 17,5 por ciento".