“Sí hubo vuelos de la Fuerza Aérea Colombiana'', fueron las primeras palabras del mandatario en un corto comunicado que leyó después de escuchar el pronunciamiento de los los cuatro oficiales que estaban bajo el poder del grupo rebelde.
TeleSUR 02/02/09.- El presidente colombiano, Álvaro Uribe, admitió este domingo que aviones militares bajo su mando sobrevolaron por la zona en la que se liberaron cuatro retenidos por la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y anunció que en el resto del proceso, que continúa entre lunes y martes, seguirá realizándose pero sin la participación del grupo Colombianos por la Paz ni la Senadora opositora Piedad Córdoba.
"Sí hubo vuelos de la Fuerza Aérea Colombiana", fueron las primeras palabras del mandatario en un corto comunicado que leyó después de escuchar el pronunciamiento de los cuatro oficiales que estaban bajo el poder del grupo rebelde.
Asimismo, aseguró que se "respetaron las alturas mínimas en el área autorizada", como respuesta a las denuncias de las FARC y del periodista Jorge Enrique Botero, en las que acusa al Estado de irrespetar la desmilitarización, que casi provoca el aborto de la operación de liberación.
Aunque no se tiene información precisa de la presunta la muerte de un rebelde a manos del Ejercito, Uribe negó que se ejecutaran "operaciones militares ofensivas".
En la comunicación el mandatario también anunció que "se autoriza exclusivamente al Comité Internacional de la Cruz Roja y a su apoyo logístico otorgado por la República del Brasil para continuar con esta operación lo cual es suficiente para un acto humanitario".
La orden del mandatario la dio desde la Casa de Nariño (sede de Gobierno) acompañado del Alto Mando militar y los cuatro ex retenidos: Alexis Torres, Juan Fernando Galicia y José Walter Lozano, y el soldado William Domínguez.
El resto de las liberaciones se harían entre lunes y martes, donde se espera por la salida de cautiverio del ex gobernador del Meta Alan Jara y al ex diputado del Valle del Cauca Sigifredo López.
La declaración de Uribe pudiera traer como consecuencia la suspensión de esta gestión liderada por Piedad Córdoba, ya que las FARC había pedido que "exclusivamente" sea la senadora la que recibiera a los retenidos.