Caracas, 16 Feb. “Ustedes los jóvenes nacieron con el fin de un mundo y el nacimiento de un nuevo mundo, y son ustedes los que están dando las batallas para constituir un futuro llenó de gloria y grandeza”, dijo el presidente Hugo Chávez.
En declaraciones ofrecidas desde el Palacio de Miraflores, a su salida del Balcón del Pueblo, desde donde se dirigió a los venezolanos, el Jefe de Estado recordó los acontecimientos de estos últimos 20 años, comenzando por el Caracazo (27 de feberero de 1989) y señaló que los venezolanos y la juventud de la nación están marcando los caminos del nuevo mundo que nace y se desarrolla en Latinoamérica.
"Yo te he visto a ti dando batallas muchacho, ¡y con qué coraje, en medio de las hienas! Y con una gran tranquilidad encendida y una pasión militante. Y al Potro Álvarez lo he visto dando batallas", dijo refiriéndose al conocido beisbolista. También felicitó a Teresa Maniglia, quien durante la presidencia de Carlos Andrés Pérez se enfrentó a su ministro del Interior, Luis Piñerúa Ordaz, cuando éste trató de regañarla.
Indicó que las luchas que libra hoy la juventud revolucionaria y la Revolución Bolivariana han reivindicado las luchas que libraron los jóvenes estudiantes venezolanos durante las décadas de los 80 y 90. “Ustedes están en batalla y junto a la Revolución Bolivariana estamos reivindicando a aquellos que murieron casi niños durante tanto tiempo en Venezuela”, subrayó.
"Yo recuerdo a muchos líderes estudiantiles que masacraron aquí poco antes del 4 de febrero, mártires jóvenes que murieron casi niños". Citó a Jean Paul Sartre, cuando dijo que "sólo la juventud tiene la pasión necesaria, la fuerza necesaria y el fuego necesario para hacer una revolución".
El Presidente venezolano reafirmó su compromiso con la Revolución Bolivariana y con el pueblo venezolano en la lucha que mantienen por construir una sociedad mejor y una patria grande.
“Yo me consumiré completamente hasta que construyamos la patria que soñó Bolívar”, enfatizó diciendo que lo hará gustosamente, para que jóvenes como con los que habló, sus hijos y sus nietos puedan vivir en una Patria con la que Chávez soñó en su juventud.
Dirigiéndose a los jóvenes presentes, les dijo: "Ustedes no se van a consumir. Ustedes van a vivir en una Patria grande, bonita y buena que nosotros no vimos. Y a lo mejor no veamos como soñamos, pero ya nos imaginamos. Ya no está tan lejana como la de Bolívar".
Finalizó diciendo: "¿Qué importa que estos ojos míos no vean la Patria que sueño? Lo que importa es que, en los ojos que la van a ver, palpite mi sangre".
Amén.
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