Caracas, 04 Feb. ABN.- El Gobierno de Venezuela
rechazó contundentemente las acusaciones en contra del país y la gestión
del presidente de la República, Hugo Chávez Frías, presentadas en un
informe, denominado Evaluación Anual de Amenazas de 2009, elaborado por
Estados Unidos (EEUU) y con el que supuestamente se pretende alertar
sobre posibles problemas en la región.
El embajador de Venezuela en Estados Unidos, Bernardo Álvarez
Herrera, envió una carta a la senadora Dianne Feinstein, quien preside
el Comité Selecto de Inteligencia en el Senado de ese país, mediante la
cual además reclamó el derecho soberano de la nación de Bolívar de
elegir su destino.
En el informe, presentado en Washington por el director nacional de
Inteligencia de EEUU, Dennis Blair, se acusa al presidente Hugo Chávez
de estar a la cabeza de un grupo de líderes que pretenden convertirse en
una fuerza regional contra Estados Unidos, a su vez que Venezuela
debería sumarse a la lista de países que representan un peligro para la
seguridad estadounidense.
A continuación, la transcripción integra de la carta del embajador
Álvarez Herrera:
Senadora Dianne Feinstein, Presidente
Comité Selecto de Inteligencia
Senado de Estados Unidos
Estimada Senadora Feinstein,
Me decepcionó leer el testimonio del Sr. Dennis Blair, director
nacional de Inteligencia, ante el Comité Selecto de Inteligencia del
Senado sobre la Evaluación Anual de Amenazas de la Comunidad de
Inteligencia de los Estados Unidos. Como en años anteriores, el informe
está lleno de acusaciones políticamente motivadas y cínicas contra mi
país.
Déjeme comenzar por señalar que Venezuela es un país soberano que
demanda respeto a su derecho a trazar su propio destino.
Informes sin fundamento como este presentado por el Sr. Blair al
comité que usted dirige fueron usados por el gobierno de Bush para
preparar el terreno en la opinión pública para el golpe de Estado de
2002, que derrocó al gobierno democráticamente electo del presidente
Hugo Chávez y para imponer sanciones políticamente motivadas contra mi
país que todavía están en pie. Ese mismo golpe llevó al Congreso a
investigar el rol que las agencias estadounidenses podrían haber jugado
en el derrocamiento del presidente Chávez.
Quisiera aprovechar esta oportunidad para alertarla a usted y a los
miembros del comité, porque estamos una vez más viendo intentos de
criminalizar a nuestro gobierno y estimular a sectores de la oposición
venezolana a que busquen caminos antidemocráticos para alcanzar el
poder.
El reporte asegura que “el presidente Chávez sigue imponiendo un
modelo político populista autoritario en Venezuela que socava las
instituciones democráticas”.
Al contrario, Venezuela está en el proceso de extender la democracia
a todo su pueblo. Esto incluye encontrar un balance entre el Estado y
el mercado que nos permita garantizar el bienestar de nuestro pueblo y
superar los errores históricos de la pobreza y la desigualdad.
En la última década Venezuela subió 10 puntos en el Índice de
Desarrollo Humano de las Naciones Unidas, mientras que los niveles de
pobreza han descendido y el acceso a los servicios se han incrementado.
De hecho, la participación política y la conciencia en Venezuela se han
expandido dramáticamente en la última década. Estos avances han ocurrido
dentro de lo que nosotros llamamos el “Socialismo del siglo 21”, un
proceso político democrático centrado en impulsar el bienestar de
nuestro pueblo como una alternativa al modelo capitalista actualmente en
crisis.
El reporte también afirma que Venezuela ha “restringido la libertad
de expresión y de la oposición mediante el cierre de las actividades de
las empresas de noticias independientes, hostigando y deteniendo a los
manifestantes y amenazando a líderes de la oposición mediante el cierre
de las actividades de las empresas de noticias independientes,
hostigando y deteniendo a los manifestantes, y amenazando a líderes de
la oposición con cargos de corrupción.
Venezuela no ha cerrado ningún medio independiente, más bien ha
aplicado leyes y regulaciones a medios operando en el país, como en
cualquier otra democracia. En Venezuela más de 76% de los medios en el
espectro público son privados y la mayoría de éstos están controlados
por la oposición al gobierno. Adicionalmente más de 184 canales operan
libremente a través de las cableras.
Los manifestantes antigubernamentales continúan disfrutando sus
derechos constitucionales de reunión pacífica. Adicionalmente, muchos
miembros de la oposición venezolana viajan con plena libertad alrededor
del mundo promocionando su agenda política - incluyendo a Estados Unidos
– y regresan a Venezuela para ejercer los derechos políticos que la
Constitución de 1999 les garantiza.
A diferencia de las conclusiones del informe, se han presentado
acusaciones penales en contra de una serie de individuos acusados de
corrupción sin tomar en cuenta su afiliación política. Recientemente,
Venezuela logró evitar una crisis financiera cuando tomó medidas para
detener a un número de bancos que amenazaban con desintegrar el sistema
financiero del país. Dos ciudadanos imputados en este caso tenían
vínculos cercanos con autoridades gubernamentales. Ambos fueron
detenidos y serán objeto de un juicio por sus crímenes.
No podemos – y no debemos – permitir que criminales corruptos se
escondan detrás de la noción de “persecución política” para evitar
enfrentar a la justicia venezolana. En ese sentido, recientemente
solicitamos la cooperación de autoridades estadounidenses para
extraditar un banquero que logró huir del sistema judicial venezolano y
actualmente se encuentra en Estados Unidos con el dinero que le robó a
los contribuyentes de Venezuela. Al ofrecerles refugio seguro a dichos
fugitivos, Estados Unidos ha politizado el sagrado concepto del asilo
político. Cabe resaltar que en los últimos años Venezuela ha deportado a
varios criminales solicitados por Estados Unidos.
El informe también asegura que el presidente Hugo Chávez, junto a
sus homólogos en países hermanos de la región, “probablemente se opongan
a cualquier iniciativa de política estadounidense en la región,
incluyendo la expansión del libre comercio, la cooperación antidrogas y
antiterrorismo, los ejercicios militares, las iniciativas de seguridad e
incluso los programas de ayuda estadounidenses”.
Venezuela posee relaciones transparentes con los países vecinos de
la región a través de una serie de mecanismos, incluyendo la Alianza
Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), la Unión de
Naciones Suramericanas (Unasur), el Mercado Común del Sur (Mercosur) y
una serie se iniciativas de tipo energético, como Petrocaribe. Dichos
mecanismos les permiten a los países de la región mejorar la cooperación
en temas de interés mutuo, especialmente en el desarrollo de
estrategias para superar la pobreza. Estas alianzas no representan una
amenaza para Estados Unidos. De hecho, un hemisferio que trabaje de
manera conjunta para luchar contra la exclusión social posee más
posibilidades de alcanzar la estabilidad en el largo plazo.
En lo relacionado al tema del antiterrorismo, Venezuela busca
principalmente atacar las condiciones que permiten que el terrorismo se
expanda, mientras que en el terreno de la lucha antidrogas, Venezuela
cree firmemente en enfoques de responsabilidad compartida que vayan más
allá de los fracasados modelos centrados en la oferta y la intervención
militar en los países productores. Es importante resaltar que las
incautaciones de drogas en Venezuela se han incrementado en 38% desde el
año 2005, año cuando terminamos la cooperación con la DEA.
Estados Unidos se beneficiará si logra desarrollar un enfoque
multilateral en lo relacionado con estos importantes temas y colabora
abiertamente y de igual a igual con todos los países de la región. Por
supuesto, dicha cooperación debe fluir de ambos lados. Desde 2005,
Venezuela ha estado esperando por la extradición al país de Luis Posada
Carriles, conocido terrorista quien actualmente vive libremente en el
sur del estado de Florida, por su actuación en la colocación de una
bomba a un avión civil en 1976. En Estados Unidos, Posada Carriles ha
sido acusado solamente de haber mentido a autoridades migratorias. Esto
representa una burla a la justicia.
Luego de haber leído el informe del señor Blair, uno no puede dejar
de preguntarse qué le pudo haber hecho un país como Venezuela a Estados
Unidos para justificar el cinismo y las acusaciones infundadas que su
gobierno de manera irresponsable ha lanzado en contra de nosotros.
La única respuesta pareciese ser que hemos rehusado a “obedecer” las
prescripciones hegemónicas y que hemos decidido trazar nuestro propio
rumbo hacia una democracia completa y un desarrollo igualitario. Sólo
representamos una “amenaza” para quienes aún perciben a América Latina
como parte del “patio trasero” de Estados Unidos en lugar de vecinos
regionales igualitarios.
Desafortunadamente, el informe es una copia de carbón de la
mentalidad de la Guerra Fría que por mucho tiempo persistió en las
relaciones entre Estados Unidos y la región, la cual favorecía a las
dictaduras del continente y permitía desfachatadas violaciones a los
derechos humanos en nombre de los intereses de Estados Unidos.
Permítame asegurarle que, al contrario del informe del señor Blair,
no existe ningún tipo de sentimiento “antiestadounidense” en el Gobierno
de Venezuela. Sin embargo, rechazamos las políticas imperialistas que
pretenden dictaminar el tipo de desarrollo y democracia que deberíamos
seguir. Es por eso que exigimos respeto y reiteramos que defenderemos
nuestra soberanía a cualquier costo.
El informe publicado por el señor Blair reproduce el mismo guión
politizado e ideológico que ha acompañado a las intervenciones
estadounidenses en los asuntos de las naciones soberanas del continente
por décadas. Ese tipo de informes pudiesen ser interpretados por algunos
grupos en la región como una invitación para explorar con medios
antidemocrático para lograr sus objetivos políticos.
Como embajador de la República Bolivariana de Venezuela en Estados
Unidos, es mi responsabilidad alertarle a usted y sus colegas en el
Senado acerca de nuestra preocupación con las intenciones de ese tipo de
informes de inteligencia, los cuales están repletos de medias verdades y
falsas acusaciones que dificultan los esfuerzos por el entendimiento
entre ambos países.
Atentamente,
Bernardo Álvarez Herrera
Embajador
Video Fuente: http://www.youtube.com/user/IVANGARCIAZAMA