14/11/11.-El racismo y la exclusión social, tantas veces desmentidos en los estamentos de poder, se mantienen hoy vigentes en la sociedad puertorriqueña, según opinión mayoritaria de los participantes en una encuesta mediática.
El 85 por ciento de los consultados para el diario puertorriqueño El Nuevo Día afirmó que el racismo es una realidad, a pesar de la mezcla que existe en el país: taínos, españoles y africanos.
Según la consulta, basada en una muestra representativa de mil personas de 18 años o más, el ocho por ciento considera que el racismo no existe, un seis por ciento no está seguro y un uno por ciento estima que “quizás existe”.
En lo referente a la discriminación entre las clases sociales, el 89 por ciento de los puertorriqueños aseguró que prevalece en esta isla del Caribe de 3,8 millones de habitantes, un estado libre asociado a Estados Unidos, que la invadió en 1898.
En este sentido, un cinco por ciento de los encuestados durante el mes de octubre, considera que no existe la exclusión social, otro cinco por ciento cree que “quizás existe”, mientras que el uno por ciento “no está seguro”.
La presencia de negros en los cargos del gobierno central puertorriqueño históricamente es mínima o inexistente y muy pocas veces un candidato a cargo electivo logra el favor de los electores si es de esa raza.
De hecho, el común de los puertorriqueños identifica como “blanquitos” o “guaynabitos”, en referencia al vecino municipio de Guaynabo, a los que controlan el poder político y económico.
El sociólogo Manuel Torres Márquez manifestó que hay “un nivel de exclusión altísimo en el mismo gobierno”.
Destacó que pese a que la sociedad puertorriqueña es “totalmente mestiza”, es evidente la escasez de funcionarios públicos de piel oscura.
La psicóloga social comunitaria María de Lourdes Lara dijo al diario que que los resultados de la encuesta son un reconocimiento de que tanto la discriminación entre clases sociales como el racismo permean en la sociedad, contrario a la idea generalizada de que no existían.