18 de Agosto.- Un grupo de activistas anti gay rusos demandaron este viernes a la cantante estadounidense Madonna reclamándole más de 10 millones de dólares, alegando que la cantante había insultado sus sentimientos cuando habló en defensa de los derechos de los homosexuales en un concierto en San Petersburgo la semana pasada.
Nueve querellas con demandas de compensaciones fueron presentadas contra Madonna ante un tribunal de San Petersburgo, la segunda ciudad de Rusia, informó Alexandr Pochúev, representante de los demandantes.
Las querellas, por "daños morales", también se extienden a los organizadores del concierto que el viernes pasado ofreció la diva del pop en la antigua capital rusa, señaló Pochúev en declaraciones a la agencia oficial RIA-Nóvosti
Los demandantes, agregó, reclaman compensaciones económicas por el "fuerte sufrimiento moral" que les causó Madonna al hacer "propaganda de las uniones homosexuales" durante su presentación en San Petersburgo.
"Varias de esas personas estuvieron en el concierto, otras vieron reportajes en los medios informativos", dijo Pochúev.
Actuando vestida con lencería negra con las palabras "sin temor" en su espalda, Madonna atacó una ley de la ciudad adoptada el pasado marzo que impone multas por difundir "propaganda" homosexual. Antes había llamado "una atrocidad ridícula" a la ley.
"Queremos luchar por el derecho a ser libres. He viajado mucho por el mundo y veo que la gente es cada vez más intolerante, pero podemos cambiar esto. Tenemos la fuerza para ello", proclamó ante el público la cantante estadounidense.
Madonna aseguró que "el amor" es lo único que puede cambiar el mundo y pidió tolerancia hacia las personas con orientación sexual no tradicional.
La homosexualidad, castigada con penas de cárcel en la Unión Soviética, fue discriminalizada en Rusia en 1993, pero gran parte de la comunidad gay sigue en el anonimato por los fuertes prejuicios que se mantienen.
"Ella (Madonna) había sido advertida verbalmente de que debía comportarse de acuerdo con la ley y lo ignoró. Así que le hablaremos en el lenguaje del dinero", dijo Darya Dedova, una de los diez activistas que presentaron la demanda en un tribunal de San Petersburgo.
"Por supuesto, es difícil medir los daños morales y el sufrimiento pero quizás ayudará a la gente que gana dinero sin respetar las reglas morales, a entenderlo", señaló Dedova añadiendo que si gana el caso donará el dinero a orfanatos.
"Tal vez alguien no ve la conexión pero después del concierto de Madonna quizás algún niño se convirtió en gay, alguna niña en lesbiana, pocos niños nacerán como resultado de esto y este gran país no podrá defender sus fronteras. Esto me causa un sufrimiento moral", dijo Alexei Kolotkov, otro de los demandantes.
La ley contra la propaganda de San Petersburgo es el modelo para un proyecto de ley que se ha presentado en el Parlamento pero que todavía no se ha sometido a votación. Los críticos dicen temer que pueda ser utilizada para reprimir a la comunidad de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales al prohibir, por ejemplo, manifestaciones en defensa de sus derechos.
