Abril 22 de 2016.- Prince, el genio de Minneapolis, falleció este jueves por la mañana en su casa-estudio de Paisley Park, situado en Chanhassen, Minnesota, según confirmó su agente. Tenía 57 años y preparaba sus memorias. El cantante, compositor, arreglista e instrumentalista estaba considerado como uno de los músicos más innovadores de su era y contaba con éxitos mundiales como Little Red Corvette, Let's Go Crazy y Purple Rain. Las causas de la muerte se desconocerán hasta que se le practique una autopsia, lo que puede tardar varios días.
Nacido Prince Rogers Nelson, bajito en su metro y cincuenta y siete centímetros de estatura, el artista era conocido por ser una persona muy reservada. Prince llevaba varias semanas luchando contra una persistente gripe que, a comienzos de mes, lo obligó a cancelar dos conciertos. Aunque seguía sin estar totalmente recuperado, el artista sí realizó el que tenía previsto en Atlanta el pasado jueves 14. Al día siguiente, sin embargo, cuando regresaba a su casa, su avión tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en Moline, Illinois, donde fue tratado durante varias horas en un hospital. No se reveló en ese momento la causa de la emergencia médica.
Cuando se lee ahora, la crónica que escribía el pasado sábado elMinnesota Star Tribune para alejar los rumores de que el cantante estaba al borde de la muerte es dolorosamente premonitoria. "Prince está vivo y bien". Acababa de regresar a casa tras el susto sufrido un día antes y quería demostrarle a su público más fiel, ese que vivía en la misma ciudad de Minneapolis, que se encontraba en forma pese a llevar semanas arrastrando una gripe que no se lograba quitar.
"Esperad unos días antes de malgastar vuestras oraciones", dijo el ganador de siete Grammys al público cuando, poco después de la medianoche, apareció en la dance party organizada en la casa-estudio donde este jueves moría. Prince "quería fardar de su nuevo piano Yamaha púrpura [tocó Chopsticks y un breve pasaje instrumental] y de su también flamante guitarra púrpura [que no tocó]", contaba el cronista de la noche. Ese mismo piano también aparece retratado en la cuenta de Twitter del fallecido artista, en la que también anunciaba la fiesta del sábado en Paisley Park que acabó siendo su última.
Poco después de que este jueves la página TMZ, dedicada al mundo de las celebridades, anunciara la muerte del icono del pop, el sheriff del condado, Jim Olson, emitía un comunicado. Olson declaró que varios agentes respondieron a una llamada a las 9.43 de la mañana (hora local de Minneapolis). "Cuando los agentes y personal médico llegaron se encontraron a un adulto inconsciente en el ascensor. El equipo de emergencia intentó salvarle la vida practicándole CPR [masaje cardiorrespiratorio] pero fueron incapaces de reavivar a la víctima. Se le declaró cadáver a las 10.07 am", finaliza el comunicado.
La cuenta de Twitter de la policía del condado de Carver, lugar donde está la residencia de Prince, informaba de que varias patrullas habían acordonado la zona para investigar una muerte. Muerte que El presidente de EE.UU., Barack Obama, destacó hoy que no hubo alma "más fuerte, creativa o audaz" que la de Prince, al anotar que hoy "el mundo perdió a un icono" con el fallecimiento del cantante en su residencia de Chanhassen (Minesota).
En un comunicado, el presidente Barack Obama declaraba que "pocos artistas han influido en el sonido y la trayectoria de la música popular más inequívocamente o han conmovido a tantas personas con su talento". Prince "lo hizo todo" y fue "uno de los músicos más talentosos y prolíficos de nuestro tiempo", finalizaba el mandatario.
El pasado noviembre Prince canceló su gira europea con motivo de los atentados de París. "Debido a los trágicos sucesos de París, ICO (agencia organizadora de la gira europea) nos ha comunicado su decisión de posponer los inminentes conciertos de Prince en Europa hasta nuevo aviso", explicó en un comunicado de prensa la agencia promotora en España, Doctor Music. Esta gira, llamada Prince Spotlight: Piano & A Microphone, fue anunciada por el músico en Minnesota. Se trataba de un tour en un formato inédito para él, en el que actuaría solo, con un micrófono y un piano de cola.
En los años 90, Prince cambió su nombre por el símbolo impronunciable "símbolo del amor" y se tatuó en su mejilla la palabra "esclavo", como forma de protesta por las condiciones contractuales impuestas por su sello discográfico Warner. También fue llamado "el artista antes conocido como Prince" o por la abreviatura "TAFKAP".
El hombre que hace unos años descubrió la religión y se acercó a Dios, quien se transformaba en un brutal Jimmy Hendrix, salvaje James Brown o se volcaba en elfunky de Kiss, hacía cada vez menos referencias al sexo en sus conciertos debido a su conversión en Testigo de Jehová.
Su vida privada estuvo salpicada de romances, ya fuera Madonna, Kim Bassinger o Carmen Electra. El cantante estuvo casado dos veces. La primera con la bailarina y cantante puertorriqueña Mayte García, con quien tuvo un hijo que moría días después del nacimiento aquejado del síndrome de Pfeiffer. Su segundo matrimonio fue con Manuela Testolini Nelson. El cantante estaba divorciado y preparaba unas memorias que ya nunca verán la luz.
El artista, nacido en Minneapolis el 7 de junio de 1958, irrumpió en la escena musical a finales de los setenta y alcanzó el éxito una década después con álbumes eternos como "1999" o "Purple Rain". Su madre, Mattie Shaw, era cantante en el mismo grupo en el que tocaba un pianista aficionado con el que se casaría. Se llamaba John L. Nelson y la banda Prince Roger Trio. De ahí surgió el nombre del que llegaría a ser un icono del pop. Cuando Prince tenía siete años, sus padres se divorciaron. El pequeño se quedó con el piano de su padre. Con el tiempo, el joven se transformó en un virtuosos de la música que tocaba con maestría la guitarra eléctrica y manejaba hasta una veintena de instrumentos diferentes.
En apenas hora y media desde que se conoció su fallecimiento, Prince se convirtió en tendencia mundial en Twitter, con más de 2,8 millones de mensajes de famosos pero sobre todo de gente anónima que lamentaba la muerte del Genio de Minneapolis.
Icono entre los iconos, el músico fue una figura incontestable de la música popular de los últimos 30 años. No solo se va un músico mayúsculo. Gracias a su visión innovadora y a su poderosa estética, era un verdadero emblema del pop. Durante la década de los años ochenta, fue uno de los artistas más importantes, dando forma a principios de la década a lo que se conoció como el sonido Minneapolis, que se caracterizaría por su influencia del funk y el R&B dentro de una concepción pop. Fue su gran aportación en la década en la que el pop dominó las listas de éxito.
Debutó en 1978 con For You, donde daba muestras de su gusto por los ritmos urbanos. Sin embargo, su primer gran paso artístico llegó con Dirty Mind (1980), en el que se subía al carro de la new wave con un trabajo sobresaliente. Su fascinación por los sintetizadores, mezclados con R&B y funk, marcaría tendencia gracias a álbumes como Controversy (1981) y 1999 (1982). Alcanzaría la cima de su popularidad con Purple Rain (1984), uno de los discos más emblemáticos de aquella década que influiría en toda una legión de artistas y grupos en años posteriores, compitiendo en relevancia con Michael Jackson y Madonna. Cuando parecía que no podía superarse, publicó poco después Sign O the Times (1987), un doble álbum considerado como su gran obra maestra por la crítica y visto como el gran doble disco de los ochenta, al nivel del White album de los Beatles, Exile On Main St. de los Rolling Stones o Blonde on Blonde de Bob Dylan.
En los noventa, comenzó sus litigios con las discográficas y su emancipación simbólica de las majors. The Love Symbol Album(1992), donde mostraba sus influencias electrónicas para seguir en la cima del pop, se hacía reconocer por el símbolo del amor. Otro notable disco fue Emancipation (1996). Había perdido visibilidad en mitad de sus batallas y experimentos varios. Su último testimonio discográfico fue un doble trabajo llamado HITnRUN: Phase One and Two (2015).
La muerte de Prince viene a constatar un año aciago para la música popular, que ve cómo desaparecen algunos de sus grandes iconos: David Bowie, Glenn Frey de los Eagles o Merle Haggard.