En la segunda sesión de la Asamblea Nacional Constituyente convocada por el Presidente de la República y sometida a elección el pasado 30 de julio, dicho órgano, proclamado como poder supraconstitucional, acordó por unanimidad, con propuesta del constituyente del PSUV, Diosdado Cabello, la adopción de estatutos tomados de los que rigieron la Constituyente de 199 y estableció la vigencia de la ANC por el lapso de dos años, para el cumplimiento de sus funciones o fines y para la redacción de la Constitución que reemplazaría a la actual.
Decisiones como estas fueron adoptadas por unanimidad e incluso por aclamación de los constituyentes.
De ser así, el funcionamiento de la ANC y la concentración de todos los poderes por esta instancia, podría extenderse más allá del período presidencial actualmente establecido, que debería culminar, de no haber alguna otra decisión que lo modifique, a inicios del 2019, con elecciones previstas para finales de 2018.
En la misma sesión la ANC resolvió aprobar la remoción de la Fiscal General, Luísa Ortega Díaz e iniciar la reestructuración de emergencia del Ministerio Público, desigbnando para ello, de manera temporal y para evitar un "vacío" al actual Defensor del Pueblo, Tarek William Saab, quien ha venido ejerciendo la presidencia del Consejo Moral Republicano.