8 de junio de 2018.- La llegada del mes de junio abre un nuevo capítulo para la integración e igualdad en la ciudad de Caracas, lugar que durante 30 días se arropará bajo la sombra de una bandera que ondea al viento sus seis colores, anunciando así la rebelión de la diversidad sexual.
Una sociedad sin “tabúes” se congrega en la capital del país promoviendo la cultura de inclusión, sin dejar espacio alguno a la discriminación de ningún tipo, propiciando de esta manera lugares de encuentro y formación sobre el vasto mundo de la sexodiversidad.
¿Quiénes son estas personas que no le temen a ofensas o prejuicios? ¿Cómo pueden ser tan diferentes ante los ojos de muchos? Y, al mismo tiempo, ¿tan semejantes para aquellos que realmente comprenden cuál es su identidad?
Variadas son las interrogantes que surgen desde el seno de la sociedad a fin de conocer qué es la diversidad sexual y los diferentes matices que han sido construidos para clasificar a quienes se encuentran al margen de esa “norma universal de la heterosexualidad”.
Katherine Castrillo, perteneciente a la Alianza Sexo-Género Diversa Revolucionaria (ASGDRe), explica que estas “categorías” responden a un proceso de construcción social que busca –aparte de ayudar a comprender a la comunidad sexodiversa– “patologizarlos, volverlos una enfermedad”. No obstante, la activista amplía los detalles más allá de esta intencionalidad y de lo que se encuentra a simple vista, para asomar un mundo de personas que al igual que todos, sienten, padecen y merecen respeto.
