Miércoles, 08 de marzo de 2023.- Hace ya diez años, una década, y en las tierras que vieron nacer a sus ancestros fue vilmente asesinado el cacique yukpa Sabino Romero Izarra, se cumplió lo que él ya había previsto desde hacía un tiempo, a mi me van a matar, me están buscando para matarme, solía comentar, con absoluta tranquilidad y certeza, los ganaderos me van a mandar a matar.
Y así fue.
Se cumplió lo que había previsto.
Y hoy, en Caracas, en el Zulia y en todo el territorio nacional recordamos a Sabino, hombre luchador, batallador y persistente quien vivió y murió por su pueblo, por el rescate de las tierras que les pertenecían ancestralmente y por el logro de mayor justicia y de una vida mejor para su gente.
Sabino vive, la lucha sigue.
Algunos de los participantes a este homenaje-recordatorio hicieron uso de la palabra, el primero de ellos fue Carlos Borola, activista social de larga data, quien mantuvo una relación cercana con el cacique Sabino Romero Izarra y a quien presentamos a aporreadores y aporreadoras en el siguiente video.
Entre otras cosas, señaló Borola: Chávez dignificó a esta gente, a los Yukpa, y les concedió una gran cantidad de hectáreas, por supuesto de tierras, pues, y derivado de esa actuación de Chávez fue que comenzó la persecución atroz en esos mismos escenarios, en esa misma tierra, de parte de los enviados de los terratenientes.
Pero no solamente de los terratenientes, porque lo que pasa es que a Edgard, y a Iván y a estos, dicen que no esté nombrando a los militares, me dice Roberto ten cuidado con esos militares, si esos militares fueron cómplices, si esos militares fueron autores, también, de ese vil asesinato y lo cazaron como se caza a un venado, como se caza a una lapa.
Porque nosotros estábamos cercanos a él y él nos notificaba me están siguiendo, me están persiguiendo, mi familia está siendo acosada y toda una cantidad de cuestiones.
Entonces, dentro de esas circunstancias, Sabino empezó a desplazarse por toda la tierra concedida por Hugo Chávez Frías, por toda esa tierra comenzó a desplazarse y claro, les pegó el olor de pueblo, les pegó el olor a aborigen y que les afecta a esa gente, a esos terratenientes, a esos militares de gran poder, les afecta, lo que huela a pueblo, lo que huela a humildad, lo que huela a ser verdaderamente un aborigen.
Y lo empezaron a cazar, hasta que se salieron con la de ellos.
Por eso es que yo digo que la gente dice que caiga el que caiga, pero los que caen son los nuestros, entienden, los que caen son los nuestros.
Esto es un elemento más, esto es un elemento formal (la carta), de cómo tratar de obtener justicia en una sociedad donde la desigualdad es lo que reina, donde la desigualdad es lo que priva.
Entonces, nosotros no vamos a dejar de hacer eso, esa carta y todas las que haya que hacer y pa donde nos digan vayan, hay que hacer esto, lo vamos a hacer.
Pero no vamos a abandonar la calle, pero no se nos va a olvidar Sabino, así como ya ustedes verán que dentro de tres días nos van a meter la muerte de Chávez hasta por los ojos.
De un poco de fariseos que a nombre de Chávez quieren vivir, que a nombre de Chávez quieren seguir robando, que a nombre de Chávez han impuesto el imperio de la corrupción, de la desmoralización, desde cuando aquí no capturan a alguien con drogas, eso tiene tiempo.
Porque, ahora el hampa está con el gobierno y el gobierno está con el hampa.
Ni un cacerolazo se oye porque esos carajos en las comunidades no permiten que suenen las cacerolas, no permiten, entienden, y bastantes motivos que hay.