23 de abril de 2024.- En Venezuela, la industria petrolera, los incendios, el extractivismo y la deforestación han venido dañando el ecosistema en varios estados y regiones del país sin una política clara y eficiente en materia ambiental, según denuncias de activistas y organizaciones de derechos ambientales.
El fundador del Observatorio de Ecología Política, Emiliano Terán, afirmó que lo que más le preocupa es que los encargados de generar políticas no están abordando los retrasos ambientales del país.
“El debate político no le está poniendo la relevancia ni la prioridad que tienen estos temas; sentimos que hay un vacío. Necesitamos que los actores políticos y la ciudadanía se involucren porque eso tiene que ver con el futuro del país”, indicó en el programa Punto y Seguimos de Radio Fe y Alegría Noticias, en el marco del Día Mundial de la Tierra que se conmemoró este 22 de abril.
Terán explicó que los daños ambientales terminan permeando la cotidianidad de la gente, dañando la pesca, el agua y alterando los ciclos de siembra, por lo que no es un daño solo al ambiente.
De acuerdo con el especialista, deben aplicarse políticas públicas en materia energética, económica y agrícola acompañadas de una mirada ambiental. “La dimensión ambiental debe ser transversal a todas las políticas públicas”, añadió.
Daños ambientales tanto en agua como en suelos
Terán explicó que las afectaciones ambientales en Venezuela ocurren en ecosistemas tanto terrestres como acuáticos.
Resaltó que la deforestación en el país está entre los niveles más altos del mundo, mientras el petróleo y el extractivismo han dañado las fuentes de agua, como es el caso del Lago de Maracaibo; la cuenca del río Orinoco afectada por la minería ilegal y “contaminada de gravedad” por el mercurio; y la cuenca del Lago de Valencia.
“Hay cuencas hidrográficas en Venezuela seriamente afectadas por la deforestación, contaminación y carencias de políticas públicas (…) El avance de esto está poniendo en entredicho fuentes de aguas muy importantes”, indicó.
“A medida que los derrames petroleros se perpetúan en el tiempo, pueden tener impactos irreversibles en los ecosistemas. Comunidades pescadoras de la Península de Paraguaná tienen comprometida su actividad de subsistencia por los derrames petroleros que ocurren en la zona”, sentenció.