12 de abril de 2025.-La reciente decisión de China de imponer restricciones a la exportación de tierras raras, cruciales para la tecnología militar avanzada de EE. UU., ha generado repercusiones en el sector de defensa estadounidense, afectando especialmente los planes para el avión de combate de próxima generación, conocido como el programa de Dominio Aéreo de Próxima Generación (NGAD), informó bulgarianmilitary.com.
Anunciada como parte de una respuesta más amplia a los aranceles estadounidenses, la medida se centra en materiales esenciales para la aviónica, los sofisticados sistemas electrónicos que permiten a las aeronaves modernas navegar, comunicarse y atacar objetivos con precisión.
Con China controlando una parte dominante del procesamiento mundial de tierras raras, las restricciones plantean preguntas urgentes sobre las vulnerabilidades de las cadenas de suministro de defensa de Estados Unidos y el futuro de sus ambiciones de superioridad aérea. Hay mucho en juego, ya que estos materiales no son solo componentes, sino la columna vertebral de los sistemas de vanguardia que definen la guerra moderna.
Los elementos de tierras raras, un grupo de 17 metales, no son tan escasos como su nombre indica, pero su extracción y refinamiento son complejos y presentan desafíos ambientales. Estos elementos, como el neodimio, el disprosio, el itrio y el gadolinio, desempeñan un papel fundamental en la aviónica del NGAD.
El neodimio y el disprosio, por ejemplo, se utilizan para crear potentes imanes que impulsan motores eléctricos y actuadores, lo que permite un control preciso de los sistemas de la aeronave. El itrio mejora los sistemas láser, esenciales para la orientación y la comunicación, mientras que el gadolinio mejora el rendimiento de las tecnologías de radar, como los sistemas de matriz activa de barrido electrónico (AESA), que permiten a los pilotos detectar amenazas a larga distancia.
Sin estos materiales, la capacidad del NGAD para operar en entornos conflictivos, donde el sigilo, la velocidad y el conocimiento de la situación son primordiales, podría verse comprometida. El NGAD, todavía en desarrollo, está concebido como un gran avance respecto del F-35 Lightning II, integrando sensores avanzados, inteligencia artificial y potencialmente armas de energía dirigida para contrarrestar las amenazas cambiantes de adversarios como China y Rusia.