Caracas 12 de abril de 2005.Por prensa UBV.“Si seguimos trabajando bajo la tesis del reformismo, difícilmente vamos a crear una conciencia revolucionaria acorde con los tiempos de cambio que estamos viviendo y seremos nosotros mismos los que echemos por tierra el esfuerzo realizado por nuestro Presidente Hugo Chávez Frías”. Así lo expresó el Vice-ministro de Relaciones Exteriores para Asia y el Pacifico, William Izarra durante el acto denominado “Socialismo del siglo XXI,” acompañado de Alan Woods intelectual británico de la Corriente Marxista Revolucionaria, la Dra. Orietta Caponi Rectora de la Universidad Bolivariana de Venezuela y la Secretaria General Elizabeth Alves en el salón Simón Bolívar de nuestra casa de estudios.
Izarra explicó que hemos entrado en una nueva etapa del proceso. Situación que implica definiciones ideológicas para tomar la ruta correcta entre dos vertientes: reforma o revolución. La reforma que implica la continuidad del modelo político de la democracia representativa y proseguir el ejercicio del mando sustentado en la fascinación del poder.
Por otro lado está la revolución, cuyo modelo político es la democracia directa que significa, antes que nada, transformar el poder en instrumento del pueblo. Es transferir la toma de decisiones a las comunidades organizadas. “Es gobernar con base en los derechos de la participación del pueblo, darle consistencia constitucional a los actos soberanos del colectivo nacional”, afirmó el Comandante Izarra.
Por su parte Alan Woods, reforzando lo dicho por Izarra, apuntó que la conducta reformista es la expresión contra-revolucionaria, pura y simple. “Por eso digo, insistentemente, que en muchas ocasiones una victoria puede convertirse en derrota si no existe una dirigencia consecuente y coherente con estos tiempos”.
El intelectual británico reivindicó la epopeya protagonizada por el pueblo venezolano durante el Golpe de Estado del 11 de abril del 2002, indicando que esa sublevación popular no tiene paralelos en el mundo y mucho menos antecedentes en ningún país de Latinoamérica.
Woods expuso que Venezuela esta viviendo una revolución a medias porque mientras exista la oligarquía con su poderío económico intacto no se puede hablar de una revolución como tal, “mientras la propiedad privada siga consagrada lamentablemente nunca vamos a tener una revolución completa”.
El dirigente Marxista terminó sentenciando que Venezuela se encuentra en una encrucijada con dos caminos: o conseguimos la victoria política y social más importante de nuestra historia contemporánea o sufrimos la derrota más aplastante, “o derrotamos la contrarrevolución o ella nos derrotará a nosotros”.