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| Foto: ARMANDO ARISTIGUIETA |
Caracas.- El Fiscal General de la República, Isaías Rodríguez, dijo ayer que de nada valieron los intentos que los medios de comunicación social adelantaron los días 11, 12, 13 y 14 de abril para ocultar la verdad de lo que estaba pasando, pues a pesar de todo, el Ministerio Público logró “romper el cerco informativo impuesto por algunos de los medios privados”.
“Logramos decirle al país que el Presidente de la República no había renunciado y, lo más significativo, que había un golpe de Estado en Venezuela”, sentenció.
El jefe del Ministerio Público fungió como orador de orden en una sesión especial que la Asamblea Nacional celebró para condenar la ruptura del orden constitucional ocurrida el 12 de abril de 2002.
Rodríguez, quien estuvo acompañado del vicepresidente ejecutivo de la República, José Vicente Rangel; ministros del gabinete ejecutivo, el Alto Mando Militar, entre ellos el general Raúl Isaías Baduel, quien rompió en llanto en plena sesión y los máximos representantes de los Poderes Públicos, hizo un recuento de los hechos que derivaron en el Golpe de Estado y posterior retorno del Jefe del Estado.
Apoyo estadounidense
Según Rodríguez, la conspiración fue orquestada por factores de oposición con ayuda del Gobierno norteamericano.
Dijo que los hechos se iniciaron el 29 de octubre del 2001, luego que Hugo Chávez deploró el ataque que Estados Unidos lanzó contra Afganistán y la entonces embajadora de Estados Unidos en Venezuela, Donna Hrinack le exigió que se retractara pública y oficialmente.
Narró cómo este hecho y otros como el fortalecimiento de la Opep, el anuncio de apoyar la creación de un Estado palestino y las visitas presidenciales a varios países exportadores de petróleo considerados enemigos de Estados Unidos, llevaron a la Fundación Nacional para la Democracia -NED-, según el Fiscal, a cuadriplicar el financiamiento "para entrenar a las ramas nacionales y/o locales de los partidos y organizaciones civiles de oposición".
Asimismo, denunció que se sextuplicaron las donaciones al Instituto Republicano Internacional con objetivos similares y militares norteamericanos asentados en el Fuerte Tiuna "preparaban el terreno desde junio del 2001", dijo, citando el libro "El Código Chávez", de la periodista Eva Golinger.
Confesiones
Rodríguez puntualizó que el 11 de abril él quiso alertar a la población del golpe de Estado y por ello convocó a una rueda de prensa que, aseguró, no concluyó "porque me sacaron del aire" a los tres minutos de intervención, pese a que sus declaraciones se extendieron por 56 minutos.
"Fiscales militares habían informado al MP que el Presidente de la República no había renunciado y si no había renunciado, si nadie había mostrado constancia escrita de esa renuncia, Hugo Chávez seguía siendo el Presidente".
A su parecer, "el silencio informativo de abril del 2002 es un estigma que pesará siempre sobre el desempeño periodístico en nuestro país".
También dijo que las leyes de la Habilitante fueron la excusa para "articular las acciones concertadas entre sectores nacionales desplazados del poder y los grandes intereses imperiales internacionales".
De Pedro Carmona dijo que pretendió usurpar los poderes locales para condicionar las decisiones del Estado.
Investigacion objetiva
El Fiscal apuntó que su despacho sigue las averiguaciones sobre los sucesos de abril.
“La multitudinaria concentración del 11 de abril de 2002 se dirigió al Palacio y hubo las muertes y los acontecimientos en cuyas investigaciones se ha avanzado con más ahínco, más certeza y más objetividad”.
El Fiscal resaltó el alzamiento del general Isaías Baduel en Maracay, quien evitó que se concretara el golpe de Estado.
Baduel, conmovido por las palabras, recibió una ovación de pie. Desgranó un rosario, sacó un pañuelo del bolsillo y se limpió las lágrimas.
BADUEL "El 5 de abril se desencadenaron los hechos"
El comandante del Ejército, G/D Raúl Isaías Baduel, recordó los sucesos de 11 de abril y dijo que ya el 5 de abril de ese año "teníamos precisado que efectivamente se habían desencadenado las acciones que buscaban alterar el orden público".
Narró que el 8 de abril no le cupo duda de la conspiración porque ese día pretendieron relevarlo de la Brigada 42 de Paracaidistas.
No obstante, el general Baduel indicó que la crisis política se agudizó a partir de febrero de 2002, cuando se generó una matriz de opinión en los medios de comunicación que daba cuenta de su pronunciamiento contra el Jefe del Estado, Hugo Chávez.
Recuerda que el Presidente de la República le agradeció la madrugada del 12 de abril, su intervención oportuna. "Me dijo que nuestra intervención había sido un factor de contención, porque de lo contrario habrían atacado el Palacio de Miraflores".
RANGEL “El Fiscal combinó sobriedad con emoción en su discurso”
El vicepresidente ejecutivo de la República, José Vicente Rangel, dijo del discurso pronunciado por Isaías Rodríguez que “es difícil combinar la sobriedad con la emoción, y eso lo logró el Fiscal General”.
“Fue un discurso impecable desde el punto de vista de su construcción literaria, pero además de eso está lleno de contenido. Hizo una radiografía de lo que ocurrió en Venezuela”.
En relación con el hecho de que durante su discurso Isaías Rodríguez obvió mencionar al entonces Inspector General de la FAN, Lucas Rincón Romero, Rangel Vale señaló que “ese es un hecho totalmente relevante” y que lo importante de todo esto fue la traición y el desconocimiento y la violación al Estado de Derecho.
A su parecer, los generales Raúl Isaías Baduel y Jorge Luis García Carneiro, se portaron durante los hechos de abril “como unos varones, son militares dignos que contrastan con el militar leal a la Constitución”.
GARCÍA CARNEIRO “Hay que entender las presiones sobre Lucas Rincón”
“Por su parte, el ministro de la Defensa, G/J (Ej.) Jorge Luis García Carneiro, dijo que ante los hechos del 11 de abril de 2002 “hay que entender las presiones que recibió el general Lucas Rincón”.
“Hay que comprender las presiones, los momentos difíciles que estaban reinando en el país. Yo, lejos de criticarlo, reconozco la valentía que tuvo en los momentos difíciles”, expuso el titular de Fuerte Tiuna poco antes de retirarse del Parlamento nacional.
"El saldo que debemos sacar es que en cada uno de nosotros como ciudadanos y soldados debe consolidarse la convicción del ejercicio de la democracia".
“Logramos decirle al país que el Presidente de la República no había renunciado y, lo más significativo, que había un golpe de Estado en Venezuela”, sentenció.
El jefe del Ministerio Público fungió como orador de orden en una sesión especial que la Asamblea Nacional celebró para condenar la ruptura del orden constitucional ocurrida el 12 de abril de 2002.
Rodríguez, quien estuvo acompañado del vicepresidente ejecutivo de la República, José Vicente Rangel; ministros del gabinete ejecutivo, el Alto Mando Militar, entre ellos el general Raúl Isaías Baduel, quien rompió en llanto en plena sesión y los máximos representantes de los Poderes Públicos, hizo un recuento de los hechos que derivaron en el Golpe de Estado y posterior retorno del Jefe del Estado.
Apoyo estadounidense
Según Rodríguez, la conspiración fue orquestada por factores de oposición con ayuda del Gobierno norteamericano.
Dijo que los hechos se iniciaron el 29 de octubre del 2001, luego que Hugo Chávez deploró el ataque que Estados Unidos lanzó contra Afganistán y la entonces embajadora de Estados Unidos en Venezuela, Donna Hrinack le exigió que se retractara pública y oficialmente.
Narró cómo este hecho y otros como el fortalecimiento de la Opep, el anuncio de apoyar la creación de un Estado palestino y las visitas presidenciales a varios países exportadores de petróleo considerados enemigos de Estados Unidos, llevaron a la Fundación Nacional para la Democracia -NED-, según el Fiscal, a cuadriplicar el financiamiento "para entrenar a las ramas nacionales y/o locales de los partidos y organizaciones civiles de oposición".
Asimismo, denunció que se sextuplicaron las donaciones al Instituto Republicano Internacional con objetivos similares y militares norteamericanos asentados en el Fuerte Tiuna "preparaban el terreno desde junio del 2001", dijo, citando el libro "El Código Chávez", de la periodista Eva Golinger.
Confesiones
Rodríguez puntualizó que el 11 de abril él quiso alertar a la población del golpe de Estado y por ello convocó a una rueda de prensa que, aseguró, no concluyó "porque me sacaron del aire" a los tres minutos de intervención, pese a que sus declaraciones se extendieron por 56 minutos.
"Fiscales militares habían informado al MP que el Presidente de la República no había renunciado y si no había renunciado, si nadie había mostrado constancia escrita de esa renuncia, Hugo Chávez seguía siendo el Presidente".
A su parecer, "el silencio informativo de abril del 2002 es un estigma que pesará siempre sobre el desempeño periodístico en nuestro país".
También dijo que las leyes de la Habilitante fueron la excusa para "articular las acciones concertadas entre sectores nacionales desplazados del poder y los grandes intereses imperiales internacionales".
De Pedro Carmona dijo que pretendió usurpar los poderes locales para condicionar las decisiones del Estado.
Investigacion objetiva
El Fiscal apuntó que su despacho sigue las averiguaciones sobre los sucesos de abril.
“La multitudinaria concentración del 11 de abril de 2002 se dirigió al Palacio y hubo las muertes y los acontecimientos en cuyas investigaciones se ha avanzado con más ahínco, más certeza y más objetividad”.
El Fiscal resaltó el alzamiento del general Isaías Baduel en Maracay, quien evitó que se concretara el golpe de Estado.
Baduel, conmovido por las palabras, recibió una ovación de pie. Desgranó un rosario, sacó un pañuelo del bolsillo y se limpió las lágrimas.
BADUEL "El 5 de abril se desencadenaron los hechos"
El comandante del Ejército, G/D Raúl Isaías Baduel, recordó los sucesos de 11 de abril y dijo que ya el 5 de abril de ese año "teníamos precisado que efectivamente se habían desencadenado las acciones que buscaban alterar el orden público".
Narró que el 8 de abril no le cupo duda de la conspiración porque ese día pretendieron relevarlo de la Brigada 42 de Paracaidistas.
No obstante, el general Baduel indicó que la crisis política se agudizó a partir de febrero de 2002, cuando se generó una matriz de opinión en los medios de comunicación que daba cuenta de su pronunciamiento contra el Jefe del Estado, Hugo Chávez.
Recuerda que el Presidente de la República le agradeció la madrugada del 12 de abril, su intervención oportuna. "Me dijo que nuestra intervención había sido un factor de contención, porque de lo contrario habrían atacado el Palacio de Miraflores".
RANGEL “El Fiscal combinó sobriedad con emoción en su discurso”
El vicepresidente ejecutivo de la República, José Vicente Rangel, dijo del discurso pronunciado por Isaías Rodríguez que “es difícil combinar la sobriedad con la emoción, y eso lo logró el Fiscal General”.
“Fue un discurso impecable desde el punto de vista de su construcción literaria, pero además de eso está lleno de contenido. Hizo una radiografía de lo que ocurrió en Venezuela”.
En relación con el hecho de que durante su discurso Isaías Rodríguez obvió mencionar al entonces Inspector General de la FAN, Lucas Rincón Romero, Rangel Vale señaló que “ese es un hecho totalmente relevante” y que lo importante de todo esto fue la traición y el desconocimiento y la violación al Estado de Derecho.
A su parecer, los generales Raúl Isaías Baduel y Jorge Luis García Carneiro, se portaron durante los hechos de abril “como unos varones, son militares dignos que contrastan con el militar leal a la Constitución”.
GARCÍA CARNEIRO “Hay que entender las presiones sobre Lucas Rincón”
“Por su parte, el ministro de la Defensa, G/J (Ej.) Jorge Luis García Carneiro, dijo que ante los hechos del 11 de abril de 2002 “hay que entender las presiones que recibió el general Lucas Rincón”.
“Hay que comprender las presiones, los momentos difíciles que estaban reinando en el país. Yo, lejos de criticarlo, reconozco la valentía que tuvo en los momentos difíciles”, expuso el titular de Fuerte Tiuna poco antes de retirarse del Parlamento nacional.
"El saldo que debemos sacar es que en cada uno de nosotros como ciudadanos y soldados debe consolidarse la convicción del ejercicio de la democracia".