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| El Reverendo Jackson durante la Sesión Especial de la Asamblea Nacional de Venezuela en honor al Dr. Martin Luther King. Credito: ABN |
Estas opiniones las emitió Jackson en su discurso como invitado especial en la Asamblea Nacional (AN) por la sesión especial en homenaje al fallecido luchador estadounidense Dr. Martin Luther King, en celebración de los 42 años del discurso que pronunció el 28 de agosto de 1.963 en la plaza Lincoln Memorial en Washington, ante una multitud de simpatizantes.
Explicó el reverendo estadounidense que la lucha por la justicia es algo que no ha cambiado en el mundo, así como la lucha por la autodeterminación de los pueblos y por defender al pobre y al necesitado.
“Dios ha distribuido recursos y riquezas para que a todos nos llegue”, fue el eje del discurso de Jackson.
Por ello, sentenció que el poder del amor y el compromiso con la justicia basado en la misericordia puede cambiar las cosas, “ya que el amor nos obliga a cuidar del otro”, acotó.
Señaló Jackson que en su país, Estados Unidos, la diferencia radical entre la pobreza y la riqueza es una realidad. Cincuenta millones de estadounidenses no tienen seguro médico, los trabajadores pobres aumentan y mientras los más ricos van a la universidad, los más pobres van a la guerra.
Agregó el reverendo que a menudo se construyen cárceles de lujo cuando las escuelas están en la miseria. “De una población de 20% de afroamericanos en el país, 70% de ellos están en las prisiones estadounidenses. Estas son las realidades penosas que debemos superar” comentó Jackson.
El invitado fustigó las políticas de la administración Bush: “Este nuevo orden social y mundial de ataques preventivos, de políticas de magnicidio, de guerras como las de Irak, tiene que terminar”.
“La guerra de Irak no soluciona un problema de seguridad nacional -continuó Jackson- para Estados Unidos es una guerra de desestabilización del Medio Oriente y de la comunidad mundial. Ese conflicto hace al mundo un lugar menos seguro”.
Recordó también el orador invitado a la AN: “Se le dijo al pueblo estadounidense que Irak era una amenaza inminente, que había armas de destrucción masiva allí, una conexión con Al Qaeda. Nada de esto era cierto”.
“La guerra nos está costando vidas, dinero y honor. Es una desgracia moral” fue la sentencia de Jackson.
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| El Reverendo Jackson tocó tambor y maracas en las afueras de la Asamblea Nacional de Venezuela. Credito: ABN |
“Desafortunadamente, recordó Jackson, la semana pasada en los Estados Unidos un ministro muy influyente utilizó su plataforma para sugerir que el Jefe de Estado venezolano pueda ser asesinado”.
A su juicio “esta fue una declaración repugnante, inmoral e ilegal, que merece una investigación por las autoridades locales y el Departamento de Justicia, así como un rechazo enérgico del Presidente Bush, quien debe hablar de manera clara y enfática al respecto”.
Al final del discurso los votos de Jackson fueron por la reconciliación política entre ambos países: “Estados Unidos y Venezuela tienen mucho que construir juntos, tienen retos, intenciones y grandes posibilidades. Hay que cooperar, construir puentes, terminar las batallas de las palabras y las retóricas”.
“Más allá de las dificultades hay que seguir soñando. En mi propio país, el sueño de la paz con los vecinos, de reconciliación, de negociación. Ese sueño debe mantenerse vivo” fue la despedida del reverendo estadounidense.