Caracas, 4 dic (PL) Las elecciones parlamentarias venezolanas comenzaron hoy con una gran afluencia de votantes en los barrios más populares de la capital, pese a retrasos en la apertura de algunos colegios y un boicot opositor.
Durante un recorrido por el barrio "23 de Enero", uno de los más populosos de Caracas, Prensa Latina pudo apreciar como una constante filas delante de los centros electorales de unas 20 personas como promedio y hasta de un centenar en varios de ellos.
En un ambiente tranquilo, Gabriel Antonio Lucena, pensionado de 74 años que acudió de los primeros a las mesas ubicadas en la biblioteca La Cañada, del barrio "23 de Enero", apuntó que vota porque "es un compromiso con el presidente (Hugo) Chávez".
Esta respuesta coincide con las opiniones de varios de los entrevistados por Prensa Latina en la populosa sección de la ciudad, que esperó el 4 de diciembre con una fiesta de "cohetones" y fuegos artificiales.
Para Jennifer Arévalos, una promotora social de la Alcaldía Mayor, de 23 años, votar es un deber y un compromiso con la Revolución, sobre todo luego que varios partidos de oposición anunciaron su retirada de los comicios.
En un intento por boicotear la elección de los 167 miembros de la Asamblea Nacional, los partidos Acción Democrática (AD) y el socialcristiano COPEI, junto a otras tres organizaciones, ordenaron la retirada de sus candidatos y llamaron a la abstención.
La maniobra para intentar deslegitimar el proceso, según todo indica, tuvo una respuesta contraria de la población, que incrementó su disposición al voto luego de la retirada de esos partidos opositores, según sondeos.
Ayer el canciller Alí Rodríguez dijo a corresponsales extranjeros en Caracas que se espera la afluencia a las urnas del 61 por ciento de los 14,4 millones de electores, 10 por ciento más que el estimado antes del anuncio
de la retirada de varios partidos.
En los comicios parlamentarios anteriores de 2000 la participación se calculó en el 54 por ciento. En relación con los atrasos en la apertura de varios centros de votación, el diputado y vocero del gobernante Movimiento V República (MVR), William Lara, consideró que se trata de demoras normales en este tipo de procesos.
Según pudo conocer Prensa Latina los atrasos se debieron en lo fundamental a la demora en llegar de algunos miembros de mesa y no a dificultades organizativas.
Interrogado sobre la gran afluencia de votantes en el "23 de Enero", Rafael Otaiza, de 25 años y trabajador social del Ministerio de Educación Superior, lo atribuyó a la decisión de un pueblo "que sabemos a donde queremos ir". "Sabemos qué queremos, en qué se invierten nuestros recursos y al Parlamento
deben ir las personas que nos van a representar en nuestro estado. Estamos
legitimando a nuestro gobierno y creemos en la democracia popular", apuntó.