El gobierno de Hugo Chávez cumple así el primer paso en la formalización de su retirada del organismo de integración regional.

"Aquí tengo la carta que hemos enviado a primera hora de la tarde a la sede de la Comunidad Andina de Naciones (...) es la carta mediante la cual procedemos a la denuncia formal ante la Comisión de la Comunidad Andina en relación al Acuerdo de Cartagena", informó la ministra de Industrias Ligeras y Comercio (Milco), María Cristina Iglesias.

La ministra precisó que Venezuela habló con el secretario general de la CAN para que se convoque la semana que viene, a más tardar el miércoles, una reunión de la Comisión Andina, que reúne a los ministros de Comercio e Industria del bloque "con la intención de iniciar el proceso de transición para materializar la salida de Venezuela de la CAN".

Informó que la salida será "un proceso largo que dura aproximadamente 5 años, en algunos casos específicos pudiera ser un poco más".

Subrayó que durante ese período se "conservan las relaciones tal como están establecidas en el marco de la comunidad" por lo que "tenemos un espacio importante de tiempo para prepararnos".

Por su parte, el canciller Alí Rodríguez informó que Venezuela mantendrá su participación en organismos y acuerdos vinculados a la CAN pero que la trascienden, como la Corporación Andina de Fomento (CAF), el convenio Andrés Bello en materia de educación y los de salud.

El presidente Hugo Chávez anunció el miércoles en Asunción la salida de Venezuela de la CAN tras denunciar que la presencia en ese mecanismo no tiene sentido.

"La Comunidad Andina de Naciones está herida de muerte y hoy puedo decir que está muerta. La mataron. No existe. Venezuela se sale de la Comunidad Andina. No tiene sentido. Hay que hacer otra cosa", afirmó Chávez ante sus colegas de Paraguay, Nicanor Duarte; Bolivia, Evo Morales y Uruguay, Tabaré Vázquez.

El viernes el mandatario venezolano ratificó que esa decisión era irrevocable.

"No hay marcha atrás (...) Lo lamentamos mucho, pero eso ya no sirve, lo destruyó el imperio" (Estados Unidos), dijo Chávez.

La decisión fue anunciada también a la Unión Europea en Bruselas.

La ministra informó que se iniciará a partir del lunes intensas reuniones de trabajo con los sectores productivos del país y se programará una agenda de reuniones bilaterales con las otras naciones de la CAN para analizar la posible firma de tratados en el marco de la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI).

La primera de estas reuniones tratará sobre el sector automovilístico, informó.

Iglesias aseguró que no habrá baja en el flujo del comercio con las demás naciones integrantes de la CAN (Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia).

La ministra defendió la salida de la CAN, aseverando que este mecanismo comenzará a estar bajo la tutela de los Tratados de Libre Comercio (TLC) suscritos por algunos de sus miembros con Estados Unidos.

"Bajo la tutela ejercida de los TLC sobre la CAN tendríamos inmediatamente desregulaciones de mercado que implican abrir a importaciones que vendrían trianguladas a través de Colombia pero procedentes de Estados Unidos", dijo.

Aseveró que "salir de "la tutela de esos concentrados de malignidad que son los TLC es absolutamente saludable para la industria nacional".

Rodríguez mencionó los efectos negativos de los TLC: la flexibilización laboral que desmejora al trabajador, nuevos fenómenos de concentración de capital, renuncia del Estado a la generación de políticas públicas, daño al desarrollo agrícola autónomo por la entrada de productos altamente subsidiados y bloqueo del "desarrollo endógeno" (hacia lo interno) que impulsa Venezuela.

El país que se verá más afectado por la decisión venezolana será Colombia, que exporta unos 2.000 millones de dólares anuales a Venezuela y sólo le compra por alrededor de 1.000 millones de dólares. Las exportacines de Venezuela a los otros tres países (Perú, Ecuador y Bolivia) ascienden a unos 800 millones de dólares y sus imporaciones a más de 500 millones de dólares.

El comercio intrarregional de la Comunidad Andina asciende a 8.000 millones de dólares, de los cuales la mitad corresponden a exportaciones de Colombia.