El Centro de Derechos Humanos Al-Mizan criticó el estado de silencio internacional hacia los crímenes de la ocupación sionista en Gaza y Cisjordania, afirmando que éste instiga a la ocupación para seguir adelante con sus crímenes.
Insistió, mediante una declaración, sobre la necesidad de que la comunidad internacional asuma su responsabilidad jurídica y moral y actúe inmediatamente para poner fin a la agresión israelí y garantice la protección de los habitantes bajo ocupación.
El Centro Palestino condenó la acelerada política de agresión contra los civiles y sus propiedades, especialmente el bombardeo con cohetes en zonas densamente pobladas. Afirmó que esas actitudes constituyen una grave violación de los derechos humanos, al convertir a la población y sus propiedades en blancos de agresiones.
Señaló que la aviación sionista lanzó en el amanecer del pasado miércoles 11 de octubre un cohete hacia la vivienda de tres plantas de la familia de Rabah Farhat y la diputada del Legislativo, Miriam Farhat. En dicha vivienda, ubicada en el barrio Al-Shajaiya, en Gaza, que quedó totalmente destruida, viven un total de 12 personas, entre ellos 6 niños.
El Centro informó que del continuo bombardeo durante los últimos 2 días resultó la destrucción de 8 viviendas y la muerte de 2 palestinos.
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