El presidente electo de Francia, el derechista Nicolas Sarkozy, descansa con su familia y unos allegados en aguas del Mediterráneo, en el lujoso yate de un empresario multimillonario francés, según medios locales.
Sarkozy, que asumirá el cargo el próximo día 16, abandonó París este lunes al día siguiente de su victoria, para un "retiro" de "introspección" de dos o tres días hacia un rumbo que su equipo mantuvo en secreto, hasta que anoche la televisión de Malta informó de que había aterrizado con su familia y guardaespaldas en la isla.
Lo hizo a bordo de un avión privado, un Falcon 900 EX2, propiedad, al igual que el yate, del multimillonario Vincent Bolloré, según informa la revista Capital en su sitio web.
El alquiler de un barco de este tipo para un crucero de tres días en el Mediterráneo costaría al menos 110.000 euros, según dijo una experta del sector a la emisora "France Info".
La "lujosa escapada mediterránea" del autoproclamado como abanderado de la Francia trabajadora "que se levanta temprano", "puede sorprender", al día siguiente de una elección "en la que los asuntos sociales han ocupado un amplio lugar", escribe Le Parisien.
El diario se pregunta si el presidente electo, que "no disimula" que le gusta el dinero, quiere imponer "un estilo a lo Tony Blair o Silvio Berlusconi. Sin complejos" .
Para impedir que la prensa siguiera a Sarkozy y su familia a su salida de un lujoso hotel de la capital el lunes al mediodía, la policía bloqueó durante unos 20 minutos a todas las motos de la prensa.