Lo asertivo en la historia cuando se habla de Derechos Humanos como expresión sincera de alta política, es difícil; cada quien tiene preferencias a las que no renuncia dada su inclinación a la izquierda o la derecha política, corrientes más importantes a nivel mundial. Deseosos de imponer su interpretación interesada capitalista o socialista, construyen falsedades mediante utilización de prensa comprometida como poder exultante, habilitando medios de penetración social en las masas, exacerbando o manipulando noticias. Hay un cúmulo de excusas en los comprometidos durante actos inconstitucionales, aquí y en cualquier parte del mundo, razonamientos politiqueros que dan pie a múltiples acomodos patéticos.
EE UU en su afán permanente de dominación, preserva dictaduras militares apegadas a su orden internacional, al FMI, Banco Mundial o similares, llamándolas "búsquedas de la democracia" en países a los que catalogan urgidos de cambios y los endeudan. Los regímenes castrenses de Pinochet, Videla, Stroessner, Odría, y otros en suramérica, fueron intocables según la visión "reconstructora". Desentendidos en horrorosas violaciones a los derechos humanos durante gobiernos civiles, organizaron y disponen exterminio a adversarios electos por la izquierda. En Venezuela lo hicieron en quinquenios socialdemócratas y socialcristianos, ejecutando masacres impunemente contra grupos socialistas y comunistas. Lo nuevo es construir una falsa dictadura y asesinar a su Presidente, actos fallidos que no logran encender al país.
En campaña mundial protestan detenciones completamente legales a diputados y ciudadanos violentos, comprometidos en instigación a la desobediencia y a delinquir, que en cualquier país del mundo habrían recibido represión policial y militar quienes hicieron armas dispararando contra civiles y militares (están filmados). Emulando a Chávez su maestro y mentor, el Presidente obrero Maduro Moros los deja cocinarse en la salsa de ineptitud y mediocridad que caracteriza a dirigentes opositores. Les queda sólo esperanzas creadas por fake news, por ejemplo noticias falsas sobre una escaramuza de traidores el 30 de Abril 2019, presunta "victoria" de propósitos salvajes. Minimizan la desgracia capitalista que viven Argentina, Honduras, Brasil y Paraguay, junto a otros gobiernos regidos por disimulócratas obedientes a la historia infeliz que les dicta la Casa Blanca, y terminan históricamente descubiertos en sus patrañas.