Sin duda que los Derechos Humanos son utilizados como instrumentos de toda la miseria desatada a escala universal contra la humanidad por la dictadura norteamericana y sus cómplices en el logro de sus objetivos hegemónicos imperiales.
Vemos así como Michelle Bachelet en su rol de pieza clave de EEUU contra la República Bolivariana de Venezuela violó los derechos al pueblo venezolano, ofendiendo gravemente en su dignidad. Lo invisibiliza negándole con alevosía, en su desleal informe en Ginebra, lo que ella vio, oyó y constató. Lo cual es una franca contradicción como falta de ética dado su cargo de Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas.
La prueba inequívoca de la farsa de la Bachelet en su pretensión de esconder la verdad, demuestra que ese informe ya estaba hecho. Violando por consiguiente su libertad de expresión, su derecho a la justicia internacional, en suma el derecho del pueblo a ser protagonista de su propia historia.
En el mencionado informe prevalecen de manera alarmante las manipulaciones y mentiras que ha desplegado la dictadura mediática corporativa mundial contra Venezuela y su Gobierno.
Situación que alcanza ribetes escandalosos, cuando desaparecen del insensato informe de la alta representante de DDHH, testimonios de las víctimas de las cuadrillas de la oposición, quienes, provistos de todo tipo de armas les causaron muerte y destrucción durante sus "guarimbas" y la quema de compatriotas en vida. Mientras en el panfleto de la Bachelet, esta asevera que "las autoridades han matado en masa, a miles de personas al reprimir las manifestaciones pacificas. "
A propósito de "asesinatos en masa a pacíficos manifestantes, por parte de los cuerpos policiales del gobierno" como dice en su irresponsable informe, la alta Comisionada de los Derechos Humanos, nada dice acerca de los frustrados intentos de asesinatos en masa, que hubiese provocado el intento de magnicidio al Presidente de la República de Venezuela , Nicolás Maduro y a todos los presentes en la tarima, el 4 de agosto de 2018, o en el fallido golpe de Estado del reciente 30 de abril, y si retrocedemos al 23 de febrero en la pretendida invasión desde Colombia , con la entrada de falsos alimentos programadas por un verdadero usurpador, con su SÍ o SÍ que juega a ser presidente cuando "sea grande".
También la Alta Comisionada Bachelet, recibió de la presidenta de la Fundación Latinoamericana por los Derechos Humanos y el Desarrollo Social (Fundalatin), María Russián, documentos probatorios, de víctimas, causadas por las anti humanas e irresponsables medidas del gobierno de Estados Unidos, por el cese repentino del Convenio Simón Bolívar de la filial Citgo de la estatal petrolera PDVSA de Venezuela, que financiaba casos complejos en materia de salud, en varios centros hospitalarios privados del exterior en Italia por ejemplo.
Resulta muy grave que la Bachelet por su compromiso contraído con los intereses hegemónicos del Gobierno de EEUU, no tuvo, no tiene conciencia de su deber en exhortar a ese gobierno que cesen las amenazas de invasión militar, de bombardear a toda la población venezolana. Tampoco se pronunció de forma enérgica, ni siquiera velada, por el cese del bloqueo económico, financiero y comercial y le sea devuelto el dinero robado a los venezolanos..pero ella con el informe previsto, simplemente cumplió el rol que le toca…todo lo contrario al compromiso con la ONU …organismo que también resulta ambiguo o en disyuntiva…
La Bachelet vino a "corroborar lo que ya está declarado que ese país que sí es culpable. Ella solo se remite a cumplir requisitos de acuerdo al protocolo vigente de la ONU, se reúne con querellantes o denunciantes, con victimas con funcionarios de alto nivel y hasta vuelve con los querellantes o no, porque ya les sacó su aporte que define su función.
Informe que ya estaba redactado. Informe que es solo fiel a los intereses a las denuncias del gobierno de los EEUU, de la Unión Europea, de ONG que tienen en la mira a este país y que a su vez financian esas visitas, tal como lo aseguran destacados expertos en materia política internacional.
Pero sí fue un gran fiasco para la atolondrada oposición, que la Bachelet en su condición de Alta Comisionada de la ON U para los Derechos Humanos reconociera a Nicolás Maduro, como Jefe de Estado, de Gobierno y Comandante en Jefe de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana FANB.
En definitiva, la Bachelet en su accionar en referencia a a la República Bolivariana de Venezuela, puso en práctica con su informe, dos propósitos lamentables y aborrecibles al mismo tiempo, como lo fueron, en primer lugar, ofender gravemente la dignidad del pueblo venezolano negándole sus derechos humanos, tal cual lo hacía con el pueblo Mapuche en su nefasta presidencia de Chile y en segundo lugar , su intento o pretensión de asesinato de la verdad por medio del contenido falso, pernicioso y tendencioso del ya citado informe, lo cual lo cual no será mas que su gran frustración, su pesadilla eterna porque la verdad no se pude esconder , ni tapizar ni desaparecer, porque la verdad, tal, como afirmaba Antonio Granschi es siempre revolucionaria.