Crítica ácida

Presidente encargado de… una banda de pillos

Viernes, 02/08/2019 08:47 AM

La vicepresidenta Delcy Rodríguez presentó desde el Palacio de Miraflores, captura de un chat telefónico entre los líderes de la oposición venezolana Juan Guaidó, Carlos Vecchio y José Ignacio Hernández, donde se evidencia el intento para apropiarse de los activos de PDVSA en Colombia, USA y el Caribe. Uno de ellos sugirió a Guaidó que firme un acta para crear la "junta ad hoc" de la empresa Monómeros, filial de Petróleos de Venezuela en Colombia, dedicada a la producción de materia prima del nylon y derivados.

Hernández, designado "Procurador" de un inexistente ilegal gobierno venezolano en el exilio, al que EE UU apoya pese a mantener contactos con el funcionariado del Presidente Nicolás Maduro, admitió a un medio estadounidense que él hizo gestiones ante Donald Trump, para que liberaran a la empresa Monómeros de las sanciones, y que esta siga su "giro comercial", así el gobierno títere puede disfrutar ganancias milmillonarias de dicha empresa venezolana en Colombia. Una forma ideada por la banda de pillos, que sustraen dinero propiedad del pueblo venezolano.

Enfatizó la Vicepresidenta Delcy que "esta es una operación de crimen organizado trasnacional, para robarse los recursos de Venezuela". Entretanto el gobierno castiga la corrupción cumpliendo la Ley. El director general del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime), Gustavo Vizcaíno, informó que 126 funcionarios se han visto involucrados en casos de corrupción, 65 ya fueron detenidos.

Investigaciones y detenciones son prueba de la lucha socialista por adecentar la política en la conducción del país, mientras en la acera opositora permanentemente se descubren las ansias de apropiarse del dinero venezolano, para vivir en el exilio y desestabilizar con terrorismo a nuestra colectividad. Lo inexplicable es que el periodismo venezolano hagan maromas mediante sus voceros periodistas y locutores en corporaciones impresas, emisoras de radio y en especial la influyente panorámica noticiosa de la televisión, para arrullar a los corruptos si actúan como opositores.

Se les ven las costuras politiqueras, pues satanizan cualquier asomo de periodismo revolucionario, o simplemente de izquierda crítica. Lo digo con experiencia, he sido objeto de discriminación profesional por los análisis críticos hacia ambas tendencias, con los opositores evidentemente descerebrada su dirección, y entre los rojos rojitos que se les parecen, por ineficientes y hala mecates desde sus cargos de elección o designados. Por mi edad no busco trabajo, así que no hay intereses personales soterrados.

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