Auditórium

Los venezolanos del siglo XXI: ¿Cómo muertos vivientes?

Lunes, 30/09/2019 07:54 AM

Los buenos cristianos deben cuidarse de los matemáticos y de todos los que acostumbran a hacer profecías aun cuando estas profecías se cumplan, pues existe el peligro de que hayan pactado con el diablo para obnubilar el espíritu y hundir a los hombres en el infierno. San Agustín (De Génesis ad Litteram).

El modelo comunista del siglo XXI está destruyendo Venezuela. Esta perversión ideológica comunista fracasada del siglo XX en la URSS y Cuba: "es el coctel de la muerte", y con mucho dolor vemos como el país sigue "el camino de la miseria cubana de estos 60 años".

Con la actual dirigencia de la izquierda democrática disidente y de la oposición no le vemos una salida pacifica y electoral a este engaño, de este falso socialismo del siglo XXI, este fantasmagórico socialismo no existe ni existirá jamás, lo que existe es miseria, incapacidad manifiesta gubernamental, y corrupción del tejido social. Todo lo contrario de aquel país donde cabíamos todos y no había necesidad de emigrar, hoy en el poder lo que existe es un grupo de exterminio, de mafiosos que lo único que se dedica es a destruir corromper y ser corrompido.

En todos los foros políticos mundiales lo que se debate y estudia es precisamente la crisis venezolana, un escenario que recorre a los países democráticos de la América Latina para evitar su reproducción en esos países de esta peste ideológica.

Venezuela le será difícil salir de esta tragedia sin traumas duros (...) porque ahora camina a pasos agigantados hacia su destrucción.

Necesitamos el retorno al "camino de la inversión" la confianza de los organismos multilaterales, con ofrecimientos de crédito de millones de dólares para inversiones de desarrollo.

Uno de los principales retos de un eventual gobierno de transición en el país es precisamente detener la avalancha de emigrantes venezolanos que huyen, de los que ya han saturado casi en millones a los países hermanos en una diáspora diabólica: desesperada y desesperante, donde andan como muertos vivientes buscando un horizonte que los saque de esta pesadilla de hambre y pobreza.

Lo que se le ha hecho a Venezuela no tiene perdón de Dios, por eso es que definitivamente tienen que separarse del poder y pagar por los daños cometidos de lesa humanidad, donde no debe existir el perdón y el olvido. El pueblo vive con la extorsión del gobierno a cuestas, robándole al pueblo de Venezuela su futuro, con el diario maltrato por la falta de alimentos y medicinas.

Más allá de la crisis política que vivimos, preocupa las implicaciones de los países hermanos en recibir a la diáspora venezolana: es tanta la desesperación de la gente que ha decidido irse a países que tienen también demasiadas dificultades.

La situación venezolana no es fácil. Debido a las graves circunstancias sociales, económicas y políticas del país. Jamás el poder ni el dinero le han proporcionado felicidad a los que maltratan a su pueblo, cuándo esta gente acabará por entenderlo.

En esta hoguera la oportunidad la pintan calva… el desdén y la subestimación del gobierno nacional bolivariano cuando le resta importancia a la desesperada y desesperante tragedia socio económica que vive Venezuela, y que tiene a su población como unos cadáveres andantes.

Donde por la fuerza se mantienen en el poder, y así evitar que otros actores políticos vengan a construir una democracia verdadera. En el país de los errantes es urgente acabar con la injusta malversación de recursos derivada de un convenio con Cuba que data de 1999.

Por eso estamos como estamos… Aunque regularmente los que critican este desastre son víctima de los embates de los operadores políticos de la revolución, no les queda más remedio que ‘aplastar’ a la defensa del sufrido pueblo venezolano por las hambrunas que los obliga a emigrar, ya que esto no sale en los medios que exhiben los presuntos logros de la revolución bolivariana en materia económica.

Venezuela hoy necesita el concurso de personas probas y honestas que demuestren con hechos su combate contra la corrupción.

A través de las redes sociales los comentarios señalan como el gobierno se excedió al manifestar que los venezolanos se deben sentir orgullosos de contar con un gobierno que ha demostrado ser un fiel defensor de la calidad de vida del pueblo venezolano, aunque sus actos digan lo contrario, pues son múltiples las calamidades en las que han incurrido, donde los responsables de este desastre socioeconómico, ni siquiera se les ha investigado.

Lo cortés no quita lo valiente… En medio de esta controversia que se ha desatado tras la amenaza de acciones en contra de que los que ‘difamen’ al publicar información sobre la diáspora, hiperinflación, escasez, hambre, pésimos e inexistentes servicios públicos etc. El gobierno debe mantener la cordura y mostrar respeto a la libertad de expresión y el derecho a la información.

Hoy la difusión de los sondeos de opinión y encuestas en las que se menciona que la oposición sería el triunfador si la elección de la Asamblea Nacional se celebrara en este año, aunque muchos analistas consideran que es muy temprano para llevar a cabo este tipo de elecciones, pues la dinámica política y social en la Venezuela actual es muy confusa.

Aunque me parece que es muy prematuro para pensar o considerar como válidas las encuestas en movimiento, yo estoy muy enfocado en la presidencia, así se lo hago saber a las personas que me han consultado; sin embargo, la elección de la Asamblea Nacional no está en mi agenda a la hora de las estrategias.

Lo que se ve en las calles no se pregunta… Las informaciones del estado de la crisis venezolana, permite a los analistas, conocer nuevos tiempos en las relaciones políticas entre los partidos e instituciones en la Venezuela del caos.

Ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio… Ahora resulta que los defensores de oficio del gobierno, Enrique Ochoa, y Luis Fuenmayor que no se sabe si cobran como asesores, ahora se nos muestran como no muy preocupados, por la no prestación de los servicios públicos, en el país y en la inexistente prestación de los mismos en nuestra patria Venezuela.

Aunque el sistema eléctrico nacional está colapsado, sin técnicos y sin repuestos, estos líderes asimilados del psuv prefieren criticar a la oposición y culpar a Donald Trump por la ineficiencia e ineptitud del gobierno.

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