Al infierno Aristóteles, la expresión es del filósofo matemático lógico escritor británico Bertrand Russel, que recogiera el profesor escritor abogado ingeniero eléctrico borroso difuminado norteamericano Bart Kosko en 1993 en el texto, Pensamiento Borroso, mas y más, y que esto no pasó a mayores. Aun y aún, el filósofo lógico matemático norteamericano, Orman Quine, el sucesor moderno de Bertrand Russell, expresara que lo dicho por el filósofo británico, referíase a lo dicho por el mismísimo anglosajón, que: "Una contradicción lo implica todo, a partir de ella, pude demostrarse lo que sea". Y, que asegún Quine, que esta afirmación del británico, era como una especie de reducción al absurdo. Y, que por lo tanto lo de Aristóteles al infierno, fue un circunstancial ensoberbecimiento elevado británico. Mas y más, al filósofo matemático lógico escritor británico, faltóle, un pelín escroto intelectual imaginario, para que su afirmación hubiera tocado su fin, pese a que, en otra ocasión dijera que: "Una oración tiene una propiedad que llamaré significación." Todo lo cual, entorno a Bertrand Russel, hase de expresar que no viera el tercio incluso aristotélico profundo entre los casos límite contradictorios borrosos, el tercio excluso y el tercio incluso, del filósofo de Estagira, quizás y sin quizás, y a buen seguro, que si lo hubiera visto, con seguridad, hubiera zumbado cohetes borrascosos ideológicos. Mas y más, Russell, no viera el tercio incluso aristotélico, puesto que habíase imbuido y hundido en el tercio excluso del principio escolástico aristotélico. A Bertrand Russel, pasóle la misma varilla que a Albert Einstein con la teoría holística unificada, éste, no metióle el teodolito mental abisal a los aspectos límbico antagónicos borroso, y, en especial al tercio incluso aristotélico profundo entre el exceso y el defecto de La Gran Moral Socrática, asina asín así, Einstein, quizás y sin quizás, aun y aún, hubiera tocado su fin, y, con borrascosos cohetes ideológicos, hubieran mandado al carajo a Aristóteles.
Al infierno Aristóteles, la expresión, equivalente al carajo, es del filósofo matemático lógico escritor británico Bertrand Russel. Hogaño, el filósofo lógico matemático norteamericano Orman Quine, el sucesor moderno de Bertrand Russell, expresara que lo dicho por el filósofo británico, referíase a que: "Una contradicción lo implica todo, a partir de ella, pude demostrarse lo que quiérase". Y, que asegún Quine, esta afirmación, era una especie de reducción al absurdo, ya dicho por el mismísimo Sócrates. Aristóteles fue alumno de Sócrates, tanto como Platón, ahora, Sócrates, el abanderado y padre del razonamiento ad absurdum y de la moralidad moderna, demuéstralo y arguméntalo, que una contradicción implícalo todo, y que a partir de ella, pude demostrarse lo que se quiera, dicho esto, con los casos límite contradictorios, o sea, con el teorema directo y el teorema indirecto, y, que dichos teoremas están contenidos en el cuadrángulo rectángulo socrático, similaricadencia tautológica repetitiva platónica, de los casos límite contradictorios, lo consciente y lo inconsciente, del torbellino de ideas einsteinianas de la Dinámica de Grupos de Cirigliano y Villaverde, en que la mejor argumentación demostrativa está en la diagonal contrarrecíproca alopeceiana, que es la slash, la barra, la optimalidad ortogonal pitagórica, antes que el cuadrángulo rectángulo socrático, que es el tercio incluso aristotélico profundo entre los caso limite, exceso y defecto, de La gran Moral Aristotélica, similaricadencia tautológica repetitiva platónica, tercio excluso y tercio incluso, asina asín así, teorema directo y teorema indirecto, mas y más, que la reducción al absurdo, ad absurdum, es la mejor argumentación demostrativa, la optimalidad ortogonal pitagórica, es el mismo tercio incluso aristotélico profundo, escondido por, mas y más, de tres mil años, en La Gran Moral, que Bertrand Russel, no viera. Y, que la expresión del filósofo británico es un tremendo dato: "Una contradicción lo implica todo, a partir de ella, pude demostrarse lo que sea", por reducción al absurdo, indícanos el filósofo inglés, que la mejor solución demostrativa está en la diagonal socrática ad absurdum, para todos los casos límite contradictorios borrosos de la forma ser y noser, y que dicha curiosidad discernitiva aventurera, encuéntrala y véala en el clásico, en el Tomo Uno, Análisis Matemático de Julio Rey Pastor y otros. Editorial Kapelusz. Buenos Aires. 1969. P. 6, en que ha de estar el teorema directo y el teorema indirecto, que es otra grafía gráfica gratificante para todos los aspectos límbico antagónicos difusos de la forma típica, ser y noser. Ahí, en la diagonal alopeceiana socrática en la optimalidad ortogonal pitagórica en la slash, en la barra, ahí, ahí está la conjuntiva inclusiva copulativa "Y" luisalbertomachadoiana de La Gran Moral Aristotélica. "Y", arrumbada arrumada escondida por más de tres mil años, hasta el derrumbe de Las Torres Gemelas Neoyorquina, el 11/09/2001, y derribo del reinado de la "O" conjuntiva exclusiva disyuntiva georgebushiana de la famosa imprecación parlamentaria: "O estás conmigo o estás con mí enemigo", sobre las ruinas de Las Torres, en que tocara su fin el principio del tercio excluso aristotélico, y, fuera complementado con complementariedad correspondiente como principio del tercio incluso, tal como la partícula y la onda, de la complementariedad principista normativa bohriana, de los aspectos pareados paradójicos, los corpusculares y los ondulatorios, de la radiación y de la materia, en el medio, de La Gran Moral. Y, con borrascosos cohetes ideológicos, hubiérase mandado al carajo a Aristóteles, con la ayudadita de Bertrand Russel y con el rempujoncito de Orman Quine, por la calle de en medio, ahí, sí ahí, en el medio estagirita esquivo, mas y más, ellos enceguecidos no vieron la luz de la razón existencial del tercio incluso aristotélico.
Al infierno Aristóteles, la expresión, equivalente al carajo, es del filósofo matemático lógico escritor británico Bertrand Russel, que recogiera el profesor escritor abogado ingeniero eléctrico borroso difuminado norteamericano Bart Kosko en 1993 en el texto, Pensamiento Borroso, ms y más, y que esto no pasó a mayores, aun y aún, el filósofo lógico matemático estadounidense Irving Copi, en 1953, en La Introducción a la Lógica, de alguna manera, llegara al conocimiento de Bertrand Russell: "Una oración tiene una propiedad que llamaré significación". El filósofo británico, referíase a los casos límite contradictorios, genero próximo y diferencia específica, género y propiedad, significación extensiva denotativa y significación intensiva connotativa. El filósofo británico, quédase corto, mas y más, mata el tigre, y, pégale culillo, habla de propiedad, y, él hubo de saber que la antípoda de la propiedad específica atributiva es el género, mas y más, no pasóle por el magín estupendo envidiable, los casos límite contradictorios de la forma exceso y defecto de La Gran Moral Aristotélica, y, de la forma típica védica, del ser y del noser, que viera el caraqueño Luis Alberto Machado, en la conjuntiva copulativa inclusiva "Y", por la calle de en medio, el medio, tercio incluso aristotélico profundo. Mas y más, la propiedad de la oración, es significado intensivo connotativo, llevada la propiedad de la oración por el significado extensivo denotativo, o sea, genero próximo y diferencia específica, que si viéralo el filósofo lógico matemático estadounidense Irving Copi, en 1953, que hablónos de los significados en su texto, en la Introducción a la Lógica, o sea, del significado intensivo connotativo y del significación extensiva denotativa. Mas y más, a ambos, al matemático estadounidense y al matemático británico, pasóles la misma varilla, como a Albert Einstein, no vieron el tercio incluso aristotélico profundo entre los significados, entre los casos límite contradictorios borrosos, similaricadencia tautológica repetitiva platónica, del ser y del noser, de la Gran Moral Védica. Del exceso y del defecto de la Gran Moral Aristotélica. Del teorema directo y del teorema indirecto de La Gran Moral Socrática. Y, con borrascosos cohetes ideológicos, hubiérase mandado al carajo a Aristóteles, por la calle de en medio, ahí, sí ahí, en el medio, si ellos no enceguecidos hubieran visto la luz de la razón existencial del tercio incluso aristotélico profundo esquivo por mas y más de tres mil años.
Si al infierno Aristóteles, equivalente al carajo, que fuera la expresión del filósofo matemático lógico escritor británico Bertrand Russel. Entonces sea dicho que esa manifestación de Bertrand Russell, tocara su fin con la voladura de Las Torres Gemelas Neoyorquinas. Ergo vergo sea dicho que con la voladura de Las Torres Gemelas Neoyorquinas, el 11/09/2001, el día de La Patrona de Venezuela, rompióse paradigmas paradójicos. Ergo vergo sea dicho que lo que, mas y más, ha perturbado de la forma significativa conmovedora de los venezolanos, los mas y más recientes, endenantes, ha sido el derrumbe la dictadura del FMI y del Banco Mundial, 27/02/1989, con el caracazo, y, endespués, la dictadura del principio del tercio excluso, con la voladura de Las Torres Gemelas Neoyorquinas, 11/09/2001. Ergo vergo sea dicho que al infierno Aristóteles, el día de la Virgen de la Coromoto venezolana. Ergo vergo sea dicho que con borrascosos cohetes ideológicos: ¡Al carajo Aristóteles! Ergo vergo sea dicho que a Aristóteles, sálvalo, históricamente, la borrosa borrascosa complementariedad bohriana de los casos límite contradictorios, onda y partícula, de los aspectos pareados paradójicos, los corpusculares y los ondulatorios, de la radiación y de la materia. "¡Nojiede Carijo!", como decía el maestro Anastasio en San Carlos, que en respetuosa traducción libérrima, diría el maestro: ¡No Joda Carajo!