¡SOMOS SOCIALISTAS ANTIMPERIALISTAS! ¡LIBERTAD PARA LOS MUCHACHOS! Es el grito firme y definitivo de las madres de Alfredo y Aryenis.
Yo no conozco personalmente a los muchachos capturados, pero cuando le mostré a mi más joven hijo, la fotografía que de Alfredo y Aryenis, se publicó en aporrea; con rostro lleno de ternura me dijo: "No, ellos dos son los antimperialistas".
Creo que la nueva revolución ya llegó al campo de las condiciones subjetivas. Y desde allí, al pueblo, otro gallo le cantará.
Pues, este acto represivo gubernamental, no solo es un insulto a la tradición antimperialista de los familiares y del pueblo venezolano revolucionario, sino que también, es un soasado anti terrorista a manera de los que el Tribunal del Santo Oficio realizaba en la Edad Media. Que más que provocar miedo, hace surgir de lo más profundo del alma de los seres humanos, un rechazo terminante a la detención y a las acusaciones vertidas por el Tribunal de Primera Instancia, y una gran arqueada de vómito al gobierno, al ver el temor judicial o el hacerse del ojo pacho, cuándo de procesar al que clandestina y públicamente ha comprometido con los gringos y europeos no solo la seguridad de PDVSA, sino del Estado mismo.
Este acto contra los jóvenes trabajadores de PDVSA, Alfredo y Aryenis, ha roto los muros de contención subjetiva, donde estaban caldeándose las ofensas, las dudas sobre el socialismo de Maduro, la reflexión sobre la destrucción del socialismo, la búsqueda de formas de lucha contra el imperialismo, la exploración de salidas a la crisis económica del país, el examen de las calamidades del gobierno de Maduro y la búsqueda de propuestas que superen la flojera y desvaríos del gobierno, el renacer de Chávez y muchos problemas y esperanzas más.
Y de acuerdo al crecimiento gigantesco y continuo de información, noticias, opiniones, análisis que aparecen en los medios, se nota que el pueblo conscientemente está expresando la exigencia de continuar con el proyecto socialista, de cambiar el gobierno de Maduro, de buscar formas menos entreguistas de enfrentar el bloqueo y de reorientar la producción en la dirección de superar la inflación, elevar el valor del Bolívar y administrar en función de toda la ciudadanía y principalmente de los trabajadores, la industria energética, del petróleo y la producción agropecuaria. También hay una exigencia de reformar la relación del pueblo con la Fuerza Armada.
Ahora bien, si toda la actividad política de denuncias, exigencias de restauración de derechos perdidos, exigir aumentos salariales, empleo, libertades de organización y cumplimientos de contratos colectivos es reprimida por el gobierno; ténganlo presente, si el desarrollo de los procesos es dialéctico, el pueblo con una subjetividad decidida va a resolver todos los problemas: restaurando el chavismo de Chávez; talvez por vía electoral, por una ruta de Juntas de gobierno, por verdaderos frentes unidos, o quien sabe, con golpes de Estado.
Pero si, las condiciones subjetivas están próximas para que aparezca un gobierno nuevo. Ojalá el chavismo de Chávez, se anticipe al plan imperialista o a la continuidad del madurismo o a un híbrido de maduro y guaidó.