Toda crítica sirve para que una persona inteligente pueda alcanzar sus ideales, los que no tienen ideales los irrita la crítica, se comportan como si de ella dependiera su reputación, la cual termina en ellos mismos, como petulantes y vanidosos.
¿Por qué nos tenemos que sacrificar por gente tan petulante? ¿Qué tiene este gobierno de bueno y de democracia popular? Todas las decisiones se toman en secreto, en la macolla, de espaldas a todos, pero en nombre del pueblo. Todas las decisiones que se toman son reactivas, ni una sola sale de un plan concebido, ni siquiera de los, no se sabe ya cuántos, proyectos de desarrollo, planes económicos, motores, congresos, etc., improvisados en estos seis años. Todo se hace a lo loco, y estamos en una condición muy precaria, con PDVSA destruida, que fue la base de nuestra economía y de nuestra independencia hasta la muerte de Chávez; expuestos, débiles, desmoralizados, sin la posibilidad de que estos maniáticos soberbios y petulantes vuelvan a sí. Hay que recuperar las fuerzas socialistas del país en torno a Chávez, y el chavismos que no cree en maduro, ni se le pega a maduro por conveniencias o por estar atontados.
Aun así estos señores se consideran insustituibles, salvadores de la patria (no se sabe cuál patria), no aceptan críticas, a menos que sea para terminar ofrendando al presidente como un tótem. Hay un componente de locura en todo el gobierno muy elevado el cual tiene cautiva a buena parte de la población, la cual, en medio de su relajada ignorancia, se conduce como zombis. Necesitamos hacer presión para que el gobierno se dé cuenta que está acabando con todo, con lo nuevo y lo viejo, que un pueblo estúpido con líderes iguales no es capaz de defender nada ni a nadie. La única reacción son las improvisaciones del gobierno, pero debe haber una reacción a la reacción, debemos activar nuestra reacción con el plan de la patria, para cambiar y sustituir este gobierno de locos y poder enfrentar a la otra cara de nuestro problema: EEUU y los guaidoses, esa fauna de disociados que están aquí y en Mayami.
Ahora la pandemia nos ha dado la razón: el capitalismo no tiene alma ni sirve para salvar al mundo, sino a unos pocos llenos de privilegios ¿Por qué la reina de Inglaterra no da el ejemplo y se sacrifica, para salvar al capitalismo mundial del gasto en ancianos improductivos (empezando por esa señora), tal y como lo sugiere Lagarde en el FMI?, no lo hacen porque hay unos ancianos que valen más que otros, así de simple, porque ella sola, la reina Isabel, vale más que miles de italianos e italianas ancianos (españoles, ecuatorianos, etc.). La pandemia develó la hipocresía capitalista. Ahora la usan para reducir la población de malos consumidores, pobres consumidores, de gente que estorba, que sobra, que molesta; ahora el modelo americano muestra su verdadero rostro con los camiones cava llenos de cadáveres: lo que falta es que los conviertan en galletas. Por cada presidente de Banco fallecido por el virus y de ministro de finanzas desesperado que se suicide, habrá miles de pobres muertos e insepultos por falta de atención.
Los chavistas debemos conformarnos como bloque ideológico, socialista, enfrentar la pandemia como socialistas, enfrentar al imperio como socialistas; salvar al capitalismo en medio de una disyuntiva moral es una disparate: capitalista o seres humanos, ¡es un disparate! Ya el capitalismo mostró su verdadero rostro despiadado, no cabe dudas: hay que acabar con la propiedad privada de los medios de producción. Dejemos que sus líderes mueran por su estilo de vida de privilegios, a Trump y sus gobernadores, los esclavos del FMI, la reina de Inglaterra, si le da la gana, pero nosotros no tenemos que defender esos privilegios, no tenemos que defender la propiedad privada de los medios de producción, de los grandes, de los cuales depende nuestra existencia, nuestras vidas y la vida del planeta.
Es hora de la verdad y nosotros contamos con el Plan de la Patria de Chávez, el cual fue cambiado a favor del capitalismo por maduro y sus lacayos. Ahora se ve con más claridad quién tenía la razón: ¡los socialistas tuvimos la razón!: la economía si no está al servicio de la humanidad no sirve, si no sirve a la vida, no sirve a nadie ni a nada. Volvamos por el camino de Chávez, volvamos al consenso ideológico socialista y surjamos otra vez como fuerza socialista, ¡y al coño con maduro, Guaidó, Trump y su ejército!, esta es la única manera de derrotarlos: digamos ¡Patria es humanidad!