"En política, las personas que se cambian de acera, se olvidan de donde vienen"
En estos momentos de la dinámica política venezolana, hay un debate que de vez en cuando sale a la superficie…se trata sobre la vigencia o no de la libertad de expresión y de pensamiento, (artículo 57 CRBV)…producto de la detención de un politólogo mediático, que antes era un furibundo chavista y que luego se convirtió en un radical antichavista…en donde existen una gran variedad de criterios jurídicos políticos que se contraponen de manera extrema, en primer lugar, está "la posición ideal" de que nadie debería ser detenido por sus pensamientos políticos, es decir, por ninguna razón y por respeto a los derechos humanos y al disfrute pleno de los derechos políticos, en un sistema democrático, no debería de haber los llamados "presos de consciencia o presos políticos"…en segundo lugar, están los que consideran de que el mismo articulo 57 constitucional señala, " Quien haga uso de este derecho asume plena responsabilidad por todo lo expresado."
Eso significa que si un político comete delitos tales como: difamación, injuria y la calumnia, son hechos punibles que están tipificados en el código penal venezolano, en sus artículos 442, 444 y 240 respectivamente, y si un político los comete tienen que llamarse "político preso" y no "preso político"… y ahora tenemos que agregar "la ley constitucional contra el odio, por la convivencia pacífica y la tolerancia", que se conoce como "la ley contra el odio"…y hay personas que consideran que hay una frágil frontera entre la subjetividad y la objetividad jurídica para su aplicación…
En que los sectores opositores lo ven como un instrumento político propio de las dictaduras…pero también están los que consideran que después de todas las atrocidades ocurridas en la época de las guarimbas del 2017, había que colocar un limite a los instigadores del odio…y reducir la impunidad sobre los que piensan que basta con ser un político opositor para que puedas decir "lo que te de la gana", y que no debes tener ningún tipo de consecuencias jurídicas…
Lo que sucede es que los ex chavistas, intentan ser más antichavistas que la derecha venezolana, y no les importa decir lo que sea para ganarse el aplauso de los opositores…