En Venezuela todos los partidos políticos nacen burocratizados, no se construyen con el paso del tiempo, pues los Estatutos fundacionales son como una camiseta de fuerza irrremovible que les impide ser cambiada. El venezolano como forma de ser es muy legalista y todo lo quiere ver por escrito, aunque eso no se cumpla. Eso de que: "aquí acatamos, pero no cumplimos ", es genético y viene desde la Colonia.
¿Y eso pasa con el PSUV y los partidos políticos del Polo Patriótico que giran a su alrededor?
En todas las democracias occidentales pasa lo mismo, pues todas se rigen por el mismo modelo donde los partidos políticos se conciben y constituyen como instrumentos para la toma y ejercicio del Poder político; solamente hay que revisar cómo está concebido y constituido el PSUV para darle respuesta a la pregunta y comenzar por revisar si es un partido de cuadros o si es un partido de masas.
Tanto Acción Democrática como el PSUV han sido grandes partidos mayoritarios, cada uno con su especificidad, pero mayoritarios por obtener en cada elección la mayor cantidad de votos. Eso es un hecho irrefutable, pero su conformación orgánica es de partidos de cuadros, donde la Dirección está Centralizada en la figura de un Presidente o Secretario General, electo en un Congreso por representantes afines a la Dirección Centralizada. (Cobra y se dá el vuelto, dice la jerga popular).
Se puede afirmar sin ser refutado, que la estructura política menos democrática es la de un Partido Político, pues se constituye dentro de él una casta que le coge miedo a las bases que dice representar o ser voceros y en este caso el PSUV no escapa de ello. La práctica es copiada de las otras tres estructuras que durante siglos han ejercido el poder como son: La Iglesia Católica, la Casta Militar y la Empresa Privada, en las cuales la obediencia al superior es el principio fundamental de su existencia.
Además, a un partido político con una estructura anquilosada, pesada, sin ideales y sin resultados visibles no se le puede pedir que actúe revolucionariamente y haga lo que no hizo cuando pudo hacerlo. Eso es igual como pasa con los viejos, que algunos esperan que puedan correr los 100 metros en 10 segundos y además ser reflexivos y sabios; a los Partidos Políticos se les quiere pedir que ejerciendo el gobierno sean también de oposición, cuando eso es la antítesis de su existir. O se es gobierno o se es oposición. Eso está pasando con el PSUV que ejerce el Gobierno y los demás miembros del Polo Patriótico se sienten Opositores y exigen cuotas de Poder para satisfacer sus legítimas aspiraciones burocráticas.
En Mérida, una ciudad con alto índice de Adultos Mayores de 80 años como yo, gran parte están retirados de toda actividad social, política, económica y cultural; unos arrinconados en las partes traseras de sus casas o en geriátricos sufriendo enfermedades terminales y los que se pueden mover los vemos en las calles haciendo colas en los bancos para poder hacer efectivo las pensiones o bonos que les llegan por dádivas del gobierno. Si alguien trata de establecer conversación con uno de ellos se van a encontrar con gente malhumorada, muy pocos sonríen o se ven felices por haber llegado vivos a esa edad. Lo que podemos asegurar, si retrocedemos en el tiempo, es que la mayoría de ellos tuvieron sueños e ideales y gastaron los mejores años de su vida luchando por un mundo mejor a través de la militancia en partidos políticos. O se es gobierno o se es oposición. Aquí no hay tercera opción. También hay que hacer la salvedad que un partido político puede envejecer sin haber ejercido el gobierno y siempre será de oposición, como una persona llegar a vieja sin casarse y sin hijos; siempre será soltera.
Ser idealista, soñador y principista, no es ningún pecado; lo único malo es que causa frustraciones y amarga la existencia de mucha gente, llevándola al escepticismo. Eso pienso después de haber pasado toda mi vida soñando con un mundo perfecto, donde los seres humanos viviríamos en paz y justicia amándonos los unos a los otros. No quiero decir que estoy frustrado y amargado, sino que en mi madurez me he transformado en un hombre escéptico, que duda de todo lo que ve u oye y ha aprendido a escuchar, o sea que he dejado de ser "creyón". . Un Partido Burocratizado es un partido viejo, no importa el tiempo de fundado. Así como una persona puede ser y actuar como un viejo, no importando la edad que tenga. Es por eso que hemos colocado el concepto de Burocratizado, pues no hay nada que envejezca más a las instituciones que la burocratización que se teje interna y externamente alrededor de su funcionamiento.
El PSUV ha demostrado que es una maquinaria casi perfecta para ganar elecciones, pero de allí a estar preparado y constituido, para hacer una Revolución que cambie el Modo de Producción Capitalista y establecer nuevas relaciones entre los factores que confluyen en el proceso productivo de bienes y servicios, hay mucha distancia.