Diario de una Cuarentena. Capítulo Ochenta y Siete: Informe de la ONU busca propiciar desenlace violento a la coyuntura política

Al iniciar esta entrega, debo hacerlo como lo haría el inmortal Gabriel García Márquez, con la crónica de una muerte anunciada. Si bien Nicolás Maduro, en uso de sus atribuciones constitucionales otorgó un indulto a 110 políticos presos por conspirar en contra del país, eligiendo lo que él consideró el mal menor para la República. Los hechos están demostrando que aunque puedo entender y respetar la decisión, no la compartó, pues el sistema de Naciones Unidas funciona bajo la égida de la representatividad, y si aplicamos el lente del análisis marxista, del imperialismo.

Ya de alguna manera en la entrega anterior advertíamos lo que se venía: El 45 período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, donde Michelle Bachelet, pese a reconocer la medida de gracia otorgada por el presidente Maduro, no desaprovecharía el referido foro para apuntalar nuevas agresiones en contra del país, como en efecto ocurrió. Importante es de señalar que también se está reuniendo en estos momentos el Consejo Económico y Social de la ONU. Todo ello en el marco de la 75 Asamblea General de la ONU.

Me parece extremadamente peligroso las acusaciones que se señalan allí, donde se expresa que el Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, el Ministro del Poder Popular para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz y vicepresidente sectorial de Obras Públicas y Servicios, G/J Néstor Luis Reverol Torres y el ministro del Poder Popular para la Defensa y vicepresidente sectorial de Soberanía Política, Seguridad y Paz, G/J Vladimir Padrino López, habrían avalado supuestas violaciones de Derechos Humanos en Venezuela.

Ese informe es consecuencia de la Resolución emitida por el mismo Consejo de Derechos Humanos el año pasado, para determinar supuestas ejecuciones extrajudiciales , las desapariciones forzadas, las detenciones arbitrarias y las torturas y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes cometidos desde 2014, para asegurar la plena rendición de cuentas de los autores y la justicia para las víctimas. El informe de estas gestiones debía ser presentado en el 45 período de sesiones de este Consejo, como ha ocurrido efectivamente.

Esto fue acordado el 27 de septiembre de 2019. Este dato es importante porque 4 días antes, nuestro canciller, Jorge Arreaza, en representación de la República Bolivariana de Venezuela, firmó con Michelle Bachelet, Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, un convenio de asistencia técnica humanitaria. De hecho, como lo he señalado en anteriores escritos, tuve la oportunidad de participar a finales del año pasado, en reuniones con el equipo de la Alta Comisionada que vinieron a Venezuela.

Incluso para los interesados, la resolución es la 42/25 del Consejo de Derechos Humanos, que se puede leer en la página del referido organismo.

Este año ocurrió prácticamente lo mismo: El gobierno del presidente Nicolás Maduro ha ratificado el acuerdo de cooperación técnica con la oficina de la ACNUDH, y en el Consejo de Derechos Humanos se presenta este informe, como continuidad de lo que venía haciendo el antecesor de Bachelet, el príncipe jordano Zeid Ra’Ad Al Hussein, quien de hecho es muy amigo del ex diplomático venezolano y furibundo enemigo de la Revolución Bolivariana, Diego Arria.

Por razones de tiempo y espacio, no voy a detenerme en los detalles de este informe, aunque pudiéramos volver sobre éstos en las próximas entregas de esta columna. Pero si quiero expresar en líneas generales lo siguiente.

Me sumo y suscribo en todo y en cada una de sus partes a lo expresado en el comunicado oficial emitido por nuestra Cancillería refiriéndose al informe presentado por el Grupo Internacional de Contacto, y su actitud injerencista contra nuestro país.

Este informe resulta más una compilación de insólitas intromisiones, totalmente disociadas de la realidad venezolana, con el fin de imponer una agenda contraria al espíritu democrático del pueblo venezolano y que busca menoscabar el principio de no intromisión en los asuntos internos de loa países y legitimar políticas de tutelaje sobre el país.

Asimismo, con el presente informe, se busca procurar alimentar las tensiones políticas en Venezuela y exacerbar posiciones extremistas desenfrenadas, en línea directa con la política de agresión constante del gobierno de Estados Unidos. No descartando incluso la posibilidad de propiciar la eliminación física de los funcionarios señalados de manera irresponsable en el referido dossier.

Esto sienta un mal precedente en lo que se refiere al sistema de Naciones Unidas, pero no olvidemos que hay sectores que pretenden activar la teoría sobre la necesidad de proteger, en la que alegando una supuesta emergencia humanitaria compleja en el país, sin tomar en cuenta las medidas coercitivas unilaterales a la que es objeto la República, derogar de facto los principios de soberanía, no intromisión en los asuntos internos de los países, para así justificar una agresión militar liderada por la administración Trump en contra de Venezuela.

Este informe, se torna verdaderamente peligroso, puesto que además de mantener el tema de los Derechos Humanos en Venezuela en la agenda del Consejo de la ONU, busca abrir y que este tema sea planteado en la Asamblea General o inclusive en el Consejo de Seguridad, para que se dicte una Resolución donde se ordene una Misión con los cascos azules, muy parecido a lo ocurrido en Libia en el año 2011.

También con ello se busca engrosar el expediente de crímenes de lesa humanidad del presidente Maduro e integrantes del Gabinete Ejecutivo, a los fines de justificar una operación de extracción como se pretendía realizar durante el 30 de abril de 2019 y los días 3 y 4 de mayo de 2020 con las incursiones mercenarias marítimas por Macuto y Chuao. Ojo con este detalle.

Si a eso le sumamos la gira que viene realizando Mike Pompeo por Guyana, Surinam, Brasil y Colombia, que además de buscar garantizarle el voto latino a Trump, se aprovecha de los ejercicios militares Amazonia 2020 hasta el 23 de septiembre y de otros que se realizaran con Colombia del 17 al 20 de septiembre, debe encender las luces de alerta en la República Bolivariana de Venezuela. De este tema esperamos referirnos en la próxima columna, ya que tenemos un buen análisis preparado, gracias a la colaboración y aportes e "patriotas cooperantes" a nivel internacional.

De igual manera, este mes de septiembre es un mes donde los bonos soberanos de Venezuela se vencen.

Por lo que esta columna en lo sucesivo se tornará más profunda. No se la pierdan

Ya para culminar esta entrega, la cerraré solamente con los datos de la Covid 19 referidos a Venezuela, para no perder el paso de esta estadística.

Pero primero, recordemos que llevamos 187 días de cuarentena social y colectiva en Caracas, La Guaira, Táchira, Miranda, Cojedes, Zulia y Apure, y 186 en el resto del territorio nacional, para no perder la continuidad y dejando testimonio a la posteridad de cómo desde Venezuela sorteamos la pandemia del Covid-20, en un período histórico muy particular para la humanidad, y testimonio para las generaciones futuras. También nos encontramos culminando la semana 26 de esta contingencia desde el pasado 13 de marzo, cuando el Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, decretó el estado constitucional por alarma desde el inicio de la contingencia en Venezuela producto de la pandemia global de la Covid-19, con la llegada de los dos primeros casos al país y dos días después, se decreta la cuarentena como la he planteado en las anteriores entregas y en ésta.

Para el momento en que aparezca publicada esta entrega de esta columna van 30.531.701 registrados casos a nivel mundial, 3.889 casos por cada millón de habitantes, 22.205.856 personas curadas (72,73%) y 952.934 personas fallecidas (3,12%) y 7.372.911 casos activos a nivel mundial.

Este es el top ten de los países con mayor número de casos de Covid-19 en el mundo:

*Desde hace algún tiempo el Reino de España no reporta cifras de recuperados de la Covid-19.

En el caso de la República Bolivariana de Venezuela, hasta el jueves 17 de septiembre de 2020 tenemos 64.284 casos registrados, 1.968 casos por cada millón de habitantes, 52.564 personas recuperadas (81,77%) y 520 personas fallecidas (0,81%). Lo que da la cifra de 11.200 casos activos y que vienen siendo tratadas por el Gobierno Bolivariano. Ocupando el puesto 50 de más países en el mundo con más casos de Covid-19 de los 193 que están inscritos en la ONU.

Acá le agrego la tabla de casos registrados de Covid 19 por estado con sus casos activos, más sus correspondientes tasas, actualizada hasta la fecha de ayer:

De los 11.200 casos activos en Venezuela, 6.414 vienen siendo tratados en hospitales centinela (57,27%), 4.436 en Centros Diagnósticos Integrales (CDI) con un 39,61% y 350 en clínicas privadas para un 3,13%.

De igual manera, de los 11.200 casos activos, 7.678 están sin síntomas (68,55%), 2.541 con insuficiencia respiratoria aguda leve (22,69%), 841 con insuficiencia respiratoria aguda moderada (7,51%) y 141 con insuficiencia respiratoria aguda grave (1,26%) ameritando su reclusión en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).

Por los PASI hasta la fecha han retornado 93.984 connacionales, de los cuales 7.011 (7,46%) han resultado positivos a las pruebas de Covid-19, y distribuidos de la siguiente manera:

1.- Por el PASI Zulia, 9.671 connacionales (10,29% de los ingresos), con 144 casos positivos (2,05% de los casos)

2.- Por el PASI Táchira, 56.018 connacionales (59,60% de los ingresos) con 3.252 casos positivos (46,38% de los casos).

3.- Por el PASI Apure, 22.936 connacionales (24,40% de los ingresos) con 2.846 casos positivos (40,59% de los casos).

4.- Por el PASI Amazonas, 207 connacionales (0,22% de los ingresos) con 10 casos positivos (0,14% de los casos).

5.- Por el PASI Bolívar, 4.680 connacionales (4,98% de los ingresos) con 617 casos positivos (8,80% de los casos).

6.- Por el PASI Lara, 90 connacionales (0,10% de los ingresos) con 19 casos positivos (0,27% de los casos).

7.- Por el PASI Nueva Esparta, 82 connacionales (0,09% de los ingresos) con 2 casos positivos (0,03% de los casos).

8.- Por el PASI La Guaira, 300 connacionales (0,32% de los ingresos) con 121 casos positivos (1,73% de los casos).

¡Leales Siempre! ¡Traidores ni jalabolas Nunca!

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!