Bases geo-histórico-culturales y espirituales del actual imaginario indígena de Caracas

Martes, 08/12/2020 06:51 PM

Coordinador de la Cátedra Libre Intercultural César Rengifo/en sincronía con la Cátedra Intercultural de saberes ancestrales – inventamos o erramos.

Con Guaicaipuro y Paramaconi, con los desnudos y heroicos caribes hemos de estar y no con los perros que los mordieron, ni con las cuerdas que los ataron, ni con las espadas que los degollaron.

Del imaginario indígena del apóstol José Martí, porque ¡América no caminará sin el indio!.

Borrador. Anexo A de la Primera parte: encuentro con el imaginario indígena de Caracas. Para responder una pregunta insistente que varias personas nos han hecho: ¿Tiene un sustento histórico- social y bases materiales concretas ese imaginario indígena en nuestras ciudades hoy?

Aquello que permanece bloqueado, invisibilizado, no es algo que se ha ido o ha desaparecido –o que carece de vigencia histórica y social- sino lo que está oprimido y reprimido por siglos, que resiste culturalmente en silencio, mientras se prepara para emerger e insurgir políticamente en el momento más oportuno. Cuando la identidad es reprimida en las grandes metrópolis, se refugia en la Provincia. Palabras más, palabras menos, es lo que planteaba de fondo el africano Amílcar Cabral. Es lo mismo que EE Mosonyi ha llamado el sentido pancrónico de nuestras identidades y en particular de la Identidad Nacional. Vale decir, es como se hacen presentes en nuestra contemporaneidad todos los tiempos de nuestra historia. Esta sospecha la sintió el cronista estrella de Caracas: Enrique Bernardo Núñez, encontrándose a cada rato con el pasado/ presente y rompiendo con el etapismo histórico unilineal. Lo diremos en nuestros propios términos: la conquista, la colonia, la independencia, el neocolonialismo, la resistencia y la insurgencia indígena -como piernas distintas del mismo cuerpo- están todos, en el aquí y ahora de la política. Cuauhtémoc, Túpac Amaru y Micaela Bastidas, Túpac Katari y Bartolina Sisa, Guaicaipuro y Urquía, con Quetzalcoalt y Amalivacá vuelven hecho millones. Vienen por Bolivia y Chile, sacudirán el corazón de los virreynatos y del gigante de Brasil contra el fariseísmo o falso evangelio de los agronegocios de los Bolsonaro. Las luchas de nuestros pueblos fortalecerán el imaginario indígena de Caracas desde la Provincia, en sintonía con Abya-Yala.

EL CRISTIANISMO ORIGINARIO ENCARNA MEJOR EL DIOS COMUNAL QUE EL ROMANO DIOS IMPERIAL O EL IMPERIALISTA DIOS DEL TÍO SAM

El cristianismo originario, el del Nuevo Testamento, subversivo por naturaleza desde la clandestinidad de las catacumbas, es radicalmente distinto al Dios patriarcal y autoritario, que llegó a la Abya Yala matando "indios sin alma" con la espada y la cruz: crucificando a esos cristos azotados de Las Indias, como decía Bartolomé de Las Casas. El Dios de Amor, el de Ama a tu prójimo como a ti mismo, es muy distinto al Dios patriarcal del terror y el miedo. El Dios originario es comunitario, el imperial desde Constantino El Grande, se vuelve imperialista (313 dc- 2020). El originario, es maternal y comunitario: la matriz histórica y social de las teologías de la liberación. El imperial representa una nueva recaída en el patriarcalismo, ahora individualista y anti-solidario. La relación con Dios es comunal, el Dios imperialista es verticalista, su relación no pasa por el prójimo (Cristo y yo, mayoría aplastante). La Madre, tampoco cuenta. Es un padre machista, dictador que construye padrastros y madrastras para deslegitimar desde la concepción y el nacimiento a los hijos de la Patria/Matria.[Fabricantes de hijastros sin dignidad y sin identidad]. Dejar a Venezuela sin jóvenes es el gran sueño de los nuevos buscadores de El Dorado para castrar el diálogo de civilizaciones, que pasa por el diálogo entre generaciones. Dejarnos sin jóvenes y proseguir el destierro, los bloqueos genocidas y la criminalización de los venezolanos en el exterior, desmembrar el país y el reparto descuartizado de la Gallina de los Huevos de Oro, es el propósito irrenunciable de Estados Unidos y Europa y de los centros financieros del capitalismo global. Los mismos que piden el bloqueo y el hambre, son los mismos que ahora te piden el voto para seguir designando a dedo desde la Casa Blanca de Wáshington, Presidentes fantasmas reconocidos por sus gobiernos títeres en el mundo, pasando por la Unión Europea.

LA IDOLAR-TRÍA O EL NUEVO BECERRO DE ORO DEL CAPITALISMO FINANCIERO GLOBAL CONTRA VENEZUELA Y EL MUNDO

Bolívar hablaba de esa desnaturalizada madrastra, hoy aliada del Tío Sam contra Venezuela, el ALBA, UNASUR, MERCOSUR y la CELAC. Pero nuestras academias se quedaron en la idolatría de la "Madre Patria", la cual ha degenerado en idolar-tría [El nuevo Becerro de Oro, ficticio, vacío, sin respaldo, sólo de papel verde, sustentado bajo el terror de las armas y el poder mediático del capitalismo financiero global]. [Desaguadero lamentable en esta coyuntura crítica. Cuando se controlan los precios, esconden los productos, bajan la producción, propician las colas y la buhonería. Cuando se quitan las medidas de control y protección de la población, aparecen los armarios repletos de todo, entonces juegan a la hiper-inflación descomunal, más si hay navidad y elecciones. Siempre montados en el golpe de Estado permanente desde Wáshington y no desde ahora sino desde que llegó Chávez: el mayor delito es buscar la inclusión y el reparto equitativo del presupuesto nacional a pesar de las mafias internas y externas].. La lógica del capitalismo: la crisis siempre la debemos pagar los más pendejos y todo el sistema global funciona para eso y no para otra cosa, con el silencio sepulcral de las cúpulas pseudorreligiosas. Salvo excepciones.

El cristianismo originario, como el de Francisco de Asís y Antonio de Padua, está mucho más cerca del imaginario indígena de nuestras ciudades y de nuestras antiguas culturas comunales, que el Dios de Francisco Fajardo, Juan Rodríguez Suárez, Diego de Losada, Hernán Cortés o Francisco Pizarro.

CÉSAR RENGIFO CON SU DRAMATURGIA Y EL DERROCAMIENTO DE ALLENDE PONE EN PRUEBA EL IMAGINARIO MAPUCHE DEL PUEBLO CHILENO

En "Volcanes sobre El Mapocho", que es una obra de teatro sobre el derrocamiento de Salvador Allende (1973), César nos demuestra cómo la resistencia indígena del pueblo mapuche, transversaliza las luchas de todos los movimientos de resistencia y emancipación del pueblo chileno. Comprueba además, cómo el imaginario mapuche, sigue transversalizando las luchas actuales contra Pinochet y el fantasma del Pinochet post mortem, representado en las figuras funestas "alternadas" de Piñera y la Bachelet. Desde 1973 hasta hoy, (47 años, casi medio siglo) la llamada "alternabilidad" del poder frente a la supuesta dictadura de Salvador Allende, ha desembocado en las luchas de calle más sostenidas contra la oprobiosa dictadura del capital neoliberal a escala mundial; como también lo fue el caracazo de 1989 contra el FMI. Los carabineros siguen disparando a la lámpara del cuerpo y espejo del alma de la heroica juventud chilena…en su resistencia de calle. [En los "Consejos del viejo Miranda para el joven O´Higgins", ya encontramos al pueblo mapuche como ícono ancestral de la libertad y la resistencia cultural, sostenida, en el imaginario del pueblo chileno]..

ORÍGENES DE VENEZUELA –REGIONES GEOHISTÓRICAS ABORÍGENES HASTA 1500 D.C.

Un extraordinario libro de los amigos y camaradas Mario Sanoja e Iraida Vargas, llamado Orígenes de Venezuela (Regiones geohistóricas aborígenes hasta 1500 dc. Caracas.1999.), hace una crítica rigurosa a las historias oficiales que siguen desconociendo más de 14.000 años hasta ahora, antes de la llegada del hombre blanco. Señalan claramente que nuestras sociedades indígenas establecieron, -escuchen bien- las bases humanas y técnico-materiales sobre las cuales se erigiría posteriormente la sociedad nacional. Del mismo modo en "El Agua y el poder". Caracas: 2007, como auténticos historiadores de la ancestral y actual Caracas, dejan muy claro que los pueblos pobladores del valle de Los Toromaima y de la Región Centro Norte de Venezuela, pudieron dar cuenta de un manejo magistral de la ecología y del paisaje natural/cultural recreado en distintas fases del poblamiento en el manejo del territorio: su macro-comunidad sobre El Valle, sus alrededores y en todo el amplio espacio circuncaribe, era una red de comunidades autónomas que en tiempos de guerra se confederaban en alianzas contra el enemigo común. No es simplemente, como creía Darcy Ribeiro sólo el aporte de la adaptación a los ecosistemas, la cual tampoco es improvisada y es complejísima en su desenvolvimiento durante miles de años; pero el legado abarca todos los campos del saber, del conocer y de la acción concreta dentro de sus propios modelos civilizatorios. Mucho menos es verdad aquello de que por asumir ese modelo flexible eran simplemente tribus y no naciones, como lo mal entiende Guillermo Morón. De igual forma, el buen amigo Horacio Biord Castillo, hace un desmontaje de la visión ligera y estereotipada de los cronistas y particularmente de Oviedo y Baños.(1). Ya de alguna forma Angelina Lemmus venía señalando "Cómo se des-morona la historia", ante esa forma alegre de despachar milenios de historia en 3 o 4 páginas para cumplir con un formalismo académico empeñado en un supuesto primitivismo, sin historia y sin estatus civilizatorio propio: con ello pretendían explicar y suprimir de 14 a 15.000 años de historia. De allí que constituya además, un error garrafal de ciertos autores venezolanos, plantear que el Waraira-Repano debió esperar la llegada de Humboldt y de otros investigadores europeos para iniciar los estudios de estos paisajes geográficos, presentados como "tierras vírgenes", "despobladas" o "poco pobladas" por parte de sus primeros habitantes… Dicha virginidad o santidad de las tierras o la "Tierra de Gracia" estaban casadas de un modo extraño con "salvajismo", "barbarie", "buen salvaje" y "Paraíso Terrenal".[De allí la idea de "Descubrimiento" y "descubrimientos" sucesivos, hasta de una planta y un animal, una mina de perlas, oro o diamantes, hasta el petróleo, el gas o el litio: a cualquier shamán indígena le causaría risa la opinión de Henry Pittier, de presentar el mastranto como una "planta inútil o casi inútil".] [Fluye la gente como el hormiguero, decía Juan de Castellanos, para referirse al poblamiento de las costas de Tierra Firme]. Todo tenía nombre propio en los idiomas originarios: lugares, ríos, lagos, montañas, sabanas, pueblos y comunidades, personas, plantas, animales, alimentos y cosas.[Lo que hoy no tiene nombre indígena es porque de un modo u otro la colonia y la república lo han cambiado].[De Santiago de León de Caracas, sobrevivió el nombre de Caracas. En otros casos sobrevivían juntos el nombre originario y el hispánico como Santa María de Ipire].

BASES HUMANAS, MATERIALES Y ESPIRITUALES DEL IMAGINARIO INDÍGENA DE CARACAS

En el estudio riguroso de los investigadores Sanoja y Vargas, vamos a ver cuáles son esas bases de etno-ciencias ancestrales, humanas, materiales y espirituales de los pueblos originarios sobre las cuales se erigiría la actual sociedad nacional venezolana.

Veamos cómo lo planteaban la pareja Sanoja-Vargas desde la década del 80:

1.- Un paisaje cultural, un espacio geográfico humanizado en el cual existían aldeas y pueblos de diversas magnitudes espaciales y demográficas, que sirvió de referencia para delimitar las provincias o regiones aborígenes geohistóricas.

2.-Itinerario de viaje marcados por senderos cuyo trazado sirvió de base a las caminerías coloniales y posteriormente a la actual vialidad moderna.

3).- Modos y dispositivos para el acarreo terrestre y el transporte fluvial, los cuales todavía constituyen en muchas regiones del país, la base del transporte fluvial y marítimo y de la pesca artesanal.

4)Tradiciones técnicas para el trabajo agrícola, la caza y la recolección, el trabajo de la piedra y la madera.

5).-Conocimiento sobre el cultivo y la domesticación de plantas útiles tanto para la alimentación como para usos medicinales.

6).-Conocimientos de etnomedicina tanto para la alimentación como la utilización curativa de plantas medicinales, alucinógenos, resinas etc.

7).- Conocimientos de etno-agronomía para domesticar plantas silvestres, modificando artificialmente su sistemas de reproducción natural.

8).- Tradiciones técnicas para la fabricación de textiles: telas de algodón, hamacas, chinchorros, cestas para la pesca, para el acarreo y almacenamiento de productos diversos, los cuales todavía son utilizados por la población venezolana en muchas regiones del país.

9).- Tradiciones técnicas alfareras para la fabricación de vajillas y otros enseres utilizados para almacenar agua y sólidos, cocinar y consumir los alimentos y llevar a cabo funciones rituales.

10).- Técnicas para preservar los alimentos vegetales o animales, para transformar la materia prima vegetal en alimentos culturalmente producidos.

11).- Tradiciones arquitectónicas para la fabricación de viviendas de habitación, para el diseño estructural y funcional de sus espacios interiores y la distribución del mobiliario y enseres utilizados en la vida cotidiana.

12).-Tradiciones técnicas para la construcción de estructuras de terracería: montículos, terraplenes, pirámides, terrazas o andenes para el cultivo en pendiente, sistemas de canales de riego utilizando las pendientes y de reservorios o estanques para almacenar las reservas de agua.

13).- Conocimientos de mecánica y balística para fabricar arcos, flechas, cerbatanas, dardos; utilización del principio del resorte para fabricar sebucanes, trampas para la caza de pequeños mamíferos. (Orígenes de Venezuela. ps. 9 y 10).

POR QUÉ TOMAMOS COMO REFERENCIA EL IMAGINARIO INDÍGENA DE CARACAS

a).Porque al crearse la Capitanía General de Venezuela, [con Carlos III, quien decretó y programó la abolición de los idiomas indígenas] como lo vieron Miguel Acosta Saignes y otros autores, las siete grandes áreas del poblamiento indígena, reviste una extraordinaria coincidencia con la conformación de las Siete Provincias que dieron origen a la Capitanía General de Venezuela (1777). Otra amiga nuestra, alumna de los Sanoja-Vargas, nos traerá un estudio muy denso titulado "Seis ensayos de estética prehispánica de Venezuela": Lelia Delgado, publicado por la Academia Nacional de la Historia: 1989. Lelia reivindica los valores estéticos de los pueblos y culturas indígenas de Venezuela, señalando la pretendida universalidad del arte como un pretexto de Occidente para devaluar y colonializar la estética de las microsociedades.

A las mismas conclusiones en distintos órdenes siguen llegando los registros arqueológicos y etnohistóricos, lingüísticos y etno-científicos a lo largo y ancho del territorio nacional.

[Los pueblos y comunidades indígenas constituyen lo más originario, lo más antiguo, constante y específico en el poblamiento del país y del continente en todo su quehacer y devenir histórico. Ver: EE Mosonyi. Identidad Nacional y Culturas Populares. Edic. de Fundarte, Caracas. 2013.]

b) Por razones de colonialismo interno, Caracas ha sido presentada ante la Provincia, como la negación del país; en otro sentido, aceptando su propia negación contrastada en el espejo alucinante del París de Guzmán Blanco y otros; luego el Londres de Walter Raleigh, el Berlín de los bélzares o ya finalmente, Nueva York o Mayami Nuestro del Tío Sam…y del Destino Manifiesto(que siempre marcan –según la época y la hegemonía- el último grito de la moda, cuyos grandes almacenes de prendas femeninas, siempre bautizaban nuestros obispos, arzobispos y cardenales de las Conferencias Episcopales: ¿Qué les decía a ellos, incluso con groserías desesperadas el católico francés León Blay? ¿O qué les diría el católico Julio González desde la Librería Nuevo Orden de Caracas?: 1960-67).

[A lo interno del continente con un comparatismo impertinente con las ciudades de las sociedades mesoamericanas y andinas: Venezuela y Caracas, vistas sólo como "lugar de paso" y no como lugar de encuentro y enriquecimiento de pueblos, culturas y civilizaciones antes de la llegada del hombre blanco.

c) La identidad indígena y en general, el imaginario indígena –sea como cosmovisión o cosmovivencia- es lo más bloqueado y reprimido o se presume que es inexistente en las grandes ciudades y peor aún, en la capital [de Coche pa´allá lo que hay es monte y culebra]. Caracas y por tanto Venezuela no tienen identidad porque es una ciudad cosmopolita me decía en un foro del CELARG un intelectual de izquierda: ¿y por qué sí la tiene París siendo cosmopolita? Era nuestra pregunta traviesa. Además ¿por qué París no es sincrético, pero son apartadas o excluidas y cuando no, sincretizables las culturas, nacionalidades y clases dominadas por la hegemonía metropolitana aquí y allá?. [La revolución francesa y la Comuna de París, siguen siendo sólo y únicamente francesas y parisinas: lo comunal sigue demonizado; las utopías de la igualdad, libertad y fraternidad, permanecen adormecidas por el opio colonial en las grandes ciudades de Nuestra América]. Ver: de Humberto Gómez García. "El Aporte del Indio Americano al Pensamiento Europeo". Edit. Caracola. Caracas.2002.

d) A pesar de todos estos prejuicios, estereotipos, racismos-clasistas y patriarcales, endorracismo materno, vergüenza étnica y de clase, colonialismo academicista y estético, gente de toda la provincia vive en Caracas y de Caracas también vive gente en la provincia; de allí que indígenas, afro-venezolanos, andinos, llaneros, zulianos, guayano-amazonenses, deltaicos- caribeño-atlánticos, lleguen a Caracas y vivan en Caracas con su imaginario indígena muy interferido, constantemente sometidos al borrador escolar, mediático, académico y pseudorreligioso.

SANTOS LUZARDO ES LA SOMBRA DEL TÍO SAM Y DOÑA BÁRBARA EL ESPECTRO DE LA MADRASTRA

El caraqueño que vive en el interior del país debe entender que ya es hora de dejar de disfrazarse de Santos Luzardo para "barbarizar" a cada Madre de la Provincia. Ese falso imaginario imperialista, es la dicotomía del colonialismo: la falsa escogencia entre Civilización o Barbarie. Doña Bárbara no está ahora en el llano o en la selva. Doña Bárbara está en Wáshington y en Mayami… Doña Bárbara de Wáshington y los Santos Luzardo de Caracas, contribuyeron al derrocamiento de Rómulo Gallegos después de la más pujante votación de la Caracas y del país bolivariano, donde ganó con el 80% de los votos. Gallegos era incorruptible políticamente, pero en la pluma de sus proteicas novelas llevaba a cuestas el fantasma del empobrecimiento cultural y espiritual de nuestros pueblos: la dicotomía Civilización o Barbarie; columna vertebral de nuestra dominación cultural y educativa, comunicacional y espiritual (bajo la fábula de una ideología mestiza/desmestizante y de un criollismo huero, tan novelesco que sirvió para demonizar la sabana y la selva, pero sobre todo su gente: Doña Bárbara, Canaima, Pobre Negro, Sobre la misma tierra). No podía soltar las amarras de su densa prosa, llevando encima el cordón de perlas como brújula anti-nativa de la misma dominación cultural y educacional, desde la cual pensaba realizar la liberación política, económica y social: "Un pueblo avergonzado de sus propios orígenes y que duda de sus posibilidades de autorrealización, no es el sujeto histórico más idóneo para una revolución". [Con Santos Luzardo y Doña Bárbara, con su Juan Bimba y la Juana Bimba como imaginarios de los blancos por autodefinición, negadores radicales de los imaginarios de nuestras indianidades, no podíamos nunca retomar los imaginarios indoamericanos de Haya de La Torre de sus primeros tiempos de anti-imperialista, ni de José Carlos Mariátegui, ni los afroamericanismos o los hispanoamericanismos; tampoco podíamos, reivindicar ante el coloso del Norte el latino-americanismo]. [Apenas Gallegos tocó los intereses yanquis y de las empresas petroleras ¿qué ocurrió? Lo tumbaron los Santos Luzardo de Caracas y las Doña Bárbara de Wáshington y Nueva York, de Londres y otras metrópolis. Esos Santos Luzardo de Caracas ya en octubre del 45 habían tumbado al General Medina Angarita, acusado de comunista. Como Gallegos, Pérez Alfonzo, Luis Beltrán Prieto y Andrés Eloy que –aunque adecos- también eran sospechosos de comunistas. Mientras COPEI al modelo de las DC europeas –Italia, Alemania, Bélgica- era sinónimo de partido de los ricos; identificado con la dictadura de Franco y de otras modalidades del fascismo; de lo cual hoy Bolsonaro y parte de los golpistas de Bolivia son una vulgar versión protestante –todavía peor, más degradada y ultra-fanática- del viejo y reaccionario Copei, de factura católica confesional. [El catolicismo italiano predicaba el apoliticismo de los católicos cuando estaba identificado con el fascismo de Mussolini, pero al fracasar el fascismo, aparecen los partidos demócratas-cristianos. Hoy encontramos en algunos troncos protestantes ciertas prédicas del apoliticismo mientras arremeten en forma agresiva y ultrafanática en los barrios de las grandes ciudades, preparando el trabajo de base para una acción política cuando lo reclamen los intereses del sistema y de la contrarrevolución. Otros, más adelantados, como Bertucci, se lanzan de una vez en la arena política ¿queriendo imitar a Bolsonaro y a los golpistas de Bolivia? Mucho cuidado.. ].[Bertucci reparte una sopa a los mendigos, pero de allá, de la Casa Blanca de Wáshington apoya las medidas que buscan llevar a nuestro pueblo al matadero: a la mendicidad y al destierro. ¡Hay muchos disfrazados de inocentes ovejas pero que por dentro son lobos rapaces! Bernabé Gutiérrez, Secretario Juvenil de AD, en el decir jocoso de Diosdado, era el personaje que Liborio Guarulla iba a poner preso cuando llegara a la gobernación de Amazonas: aunque muy pronto se convirtió en otro Bernabé y se declaró –con orgullo- "el indio más rico de Latinoamérica". –Ahora ¿Quién pone preso a quién? Los dos se aliaron para seguir saqueando el Amazonas y nombrar diputados indígenas a su medida y según sus intereses. [Visité Maroa con Omar González y Jorge Pocaterra, nos buscó la gente de El Garcero para decirnos: Liborio nació aquí en El Garcero, pero desde que es Gobernador, se blanqueó como Bernabé y más nunca quiso saber de nosotros. ¿Por qué no hablan con él a ver si nos visita? Es casi inútil, les dijimos. Pero lo intentamos… En esos días saltó la talanquera y se declaró un perseguido político, como muchos, pero montado desde la Gobernación]. [Chávez, el proyecto bolivariano y el movimiento indígena le ofrecieron a Liborio la oportunidad de construir un liderazgo indígena en el país y en el continente, antes de que Evo Morales llegara al poder. Pero Liborio prefirió el Becerro de Oro. Por eso, ya nadie lo recuerda. Ahora es más anónimo que Bernabé. Con su propio rabo de paja pisoteó el arcoíris de los imaginarios indígenas amazonenses].

BETANCOURT ENTERRÓ A JUAN BIMBA CON EL PACTO DE PUNTOFIJO [O PACTO DE NUEVA YORK]

Bien, pero sigamos con AD y el entierro de Juan y Juana Bimba: ya hemos "modernizado" a Venezuela, el campesino corrió hacia las grandes ciudades, entonces, Juan Bimba murió y… hay que dejar conciudadanos, ¡que los muertos entierren a sus muertos!

Rómulo Betancourt se encargó de lavarle la cara a su partido ante el imperio llevando a AD al Pacto de Nueva York y al macartismo más sanguinario y retrógrado, que ya –dicho sea de paso- había desplazado a COPEI de la hegemonía en FEDECÁMARAS desde su nacimiento(2). Juan Bimba se quitó el liki-liki del populismo, se bajó la máscara y ya, sin tapaboca tenía la cara de Santos Luzardo al servicio de Doña Bárbara de Nueva York [Pacto de Punto Fijo, que traicionó al movimiento popular después de la caída de Pérez Jiménez del 23 de enero de 1958 y montó una dictadura de 40 años]. Hemos dicho en otras oportunidades que el populismo de AD, nunca llegó al indígena, ni siquiera al indoamericanismo de Haya de La Torre. Betancourt pensaba que aquí no hubo matriz colectiva en nuestra indianidad.(3) Pero su sondeo del imaginario del país, no llegó al fondo de esos 14.000 años de historia antes de la conquista: llegó a un campesinado famélico, que el mismo sistema colonial y republicano había desmembrado y desarraigado culturalmente para hacerlo endorracista y agazapado en la vergüenza étnica: la ciudad se le convirtió en el alfa y el omega. La dicotomía civilización o barbarie –y sus intereses materiales- le impedían ver más allá del inmediatismo y de su pragmatismo político.

LOS HOMBRES CÉLEBRES DE AD SUENAN MÁS EN EL MAZO Y LA HOJILLA QUE EN BOCA DE RAMOS ALLUP O DE BERNABÉ GUTIÉRREZ

Ellos olvidaron la historia de la AD originaria, anti-imperialista. Por eso de esa historia y de esos hombres incorruptibles de esa época, perseguidos por las dictaduras junto con los comunistas, ellos no hablan. Se olvidaron de sus guasineros y de sus hombres y mujeres célebres o de los más honestos: ellos no hablan de Rómulo Gallegos, Andrés Eloy, Pinto Salinas, Pérez Alfonzo, Luis Beltrán Prieto, de aquellos expulsados como Tribunal de Ética: Carlos Olivares Bosque y Feliciano Acevedo. Quien los incorpora a la memoria es la revolución bolivariana. Suenan más en El Mazo o en La Hojilla, en los discursos del Presidente Nicolás Maduro y de Jorge Rodríguez, que en las Casas de AD (y que en los discursos de Ramos Allup y de Bernabé).

LOS QUE VIENEN A VENEZUELA DE LOS PAÍSES HERMANOS DE NUESTRA AMÉRICA, LLEGAN CON SU IMAGINARIO INDÍGENA BASTANTE BLOQUEADO

De igual forma –debemos decirlo- los hermanos procedentes de los mismos países bolivarianos y de otros países del continente llegan a Venezuela con su identidad indígena como la más bloqueada, peor aún si vienen de los Virreynatos. La identidad indígena es la que permanece más bloqueada, oprimida y reprimida o se toma como ausente y cuando mucho, como parte de un pasado remoto, inalcanzable, sin vigencia histórica, con pretensiones de superación "global," en redondo, en medio milenio de conquista y colonización[¡qué aberración histórica ésta!].

IMPOSIBLE CLAUSURAR 15 ó 20 MILENIOS DE VIDA INDÍGENA EN QUINIENTOS AÑOS DE CONQUISTA

[Es sin duda una apuesta de lo imposible, pretender superar en 500 años, entre 15 o 20 milenios de poblamiento indígena en lo que hoy forma parte del territorio venezolano: para ello no bastan los Santos Luzardo y las Doña Bárbara].

e) La vergüenza materna [el castigo del gentío materno lo llama Darcy Ribeiro] transversaliza todas las vergüenzas sobre las cuales se asientan los procesos de discriminación y exclusión o apartheid de los colonizados y las colonizadas en antagonismo con el padre blanco que viene supuestamente "a mejorar y salvar la raza": identificado con el culto al padrastro conquistador (en tanto que fetiche fundador de pueblos y sobre todo, de ciudades: Losada, Fco. Fajardo, Juan Rodríguez Suárez, Pizarro, Cortés).[Preguntamos: ¿por qué en Barquisimeto cuando eliminaron en la IV República la Plaza de los Jirahara para ponerle Plaza de Italia no escogieron para ello la Plaza Juan de Villegas?¿Por qué eliminar como en efecto lo hicieron, la Plaza de Los Jirahara y el muerto no tenía dolientes? Y como siempre, los dolientes no teníamos donde escribir o hablar: de vainita el amigo Cañizales Verde podía protestar por el Impulso de Barquisimeto]

f) Hay un ficticio vacío materno o maternal [en el Caribe, muy traumático, por la destrucción de la Madre India, con el despoblamiento de las islas, como lo apunta Ribeiro, de esa madre como trasmisora de la lengua y cultura materna a sus hijos y nuevos pobladores como lo entendieron bastante bien los hermanos haitianos; en Tierra Firme, en los países indígenas, y sobre todo, en las grandes ciudades, no se acepta, se persigue o se apedrea a las María La Onza o las María Lionza, como Símbolos de La Gran Madre de la Cultura Nacional (*). Sin embargo, el Dólar, el Becerro de Oro de nuestra época y su idolartría, no son tocados ni con el pétalo de una rosa por los llamados monoteísmos occidentales, enfrentados al Dios comunitario de los pueblos, culturas, civilizaciones y clases oprimidas. El "Dios" protestante –salvo algunas excepciones proféticas tipo Luther King- nos llega como capitalista y recolonizante, identificado con el Tío Sam, su Destino Manifiesto, su Santa Alianza con Gran Bretaña y la Unión Europea en las nuevas búsquedas de El Dorado. En su Santa Alianza hoy contra Venezuela, Palestina, Haití, Irán y los pueblos indígenas del mundo. En otro orden, contra China y Rusia como contrapesos para la formación de un mundo pluripolar y un nuevo equilibrio del universo, como en su tiempo lo buscó El Libertador.

g) La ciudad colonizada es presentada como la síntesis de la cosmópolis o de la "raza cósmica", donde supuestamente no es posible construir o establecer ninguna identidad, mientras que las identidades europeas o pseudo-europeas, ahora pitiyanquis son las únicas legitimadas y valorizadas; en cambio la de los pueblos, culturas y clases subalternas deben permanecer reprimidas, sincretizadas, con sus identidades en suspenso, en puntos suspensivos, pasadas por el cedazo del "crisol de razas", sin derecho a la personalidad individual y colectiva y a la correspondiente autoestima: entonces su destino es el de sobrevivir en las catacumbas de la resistencia y emancipación cultural y espiritual para encarnar y expresar de alguna manera la insurgencia política y revolucionaria cuando las condiciones históricas y sociales y las alianzas, tácticas y estratégicas, lo permiten.

DON NAIDEN: EL HOMBRE Y LA MUJER SIN ROSTRO EN EL BARRIO

h) En las ciudades se quiere presentar al barrio como el territorio de los "Don Naiden", sin rostro, masas, ovejas descarriadas, número sin identidades. Se presentan los problemas profundos de la existencia como una necesidad sólo de los intelectuales o de ciertos magnates esclarecidos de la cultura dominante. La búsqueda y construcción de las identidades personales y colectivas se ven sólo como necesidades prioritarias de los sectores "clasemedizados"… En tanto que el cholo, el mestizo/ en camino a la des-mestización, quedaría en el fondo privado de personalidad individual y colectiva, quien deba construir o jugar a la "esperanza" sin rumbo y simular una ternura felina, amor y ternura que aruña en su peligrosa y desconfiada ferocidad adormecida. Sin destino, jugando al azar y la necesidad. ¿Cuál esperanza le asignas Don Pedro Mestizo-Segundo, si estás desconociendo su dignidad como persona y como comunidad –aquí y ahora- en reconstrucción constante de su matriz colectiva frente al individualismo aberrante de las ciudades caricaturas de Europa y de USA? En muchos casos, vistos como obstáculos o rémoras del progreso y como mano de obra, en algunos casos inútil o desechable…[¿Réplica de la ciudad masa, oveja sin rostro, vista así la Gran Caracas como una gran fritanga de pueblos y culturas locales? ¿Es que no hay un rostro histórico y social en las manifestaciones culturales y espirituales del barrio?][Es tan tramposa esta ideología mestiza, que le niega rostro propio al barrio y a la ciudad para que después nos hablen –cínicamente- de "La Cultura del Barrio"]…

[Lamentablemente la Ciudad no cuenta con una oposición patriótica y muchísimo menos, con un imaginario simbólico de naturaleza matrilineal: salvo algunas excepciones honrosas, son muchachos y muchachas de mandado de los Padrastros y Madrastras de la Conquista, ayer y hoy]…

[La María Lionza de la Autopista Cacique Guaicaipuro, como símbolo de la Gran Madre de la Cultura Nacional, se corresponde con una necesidad del momento histórico actual para enfrentar el endorracismo materno y el patriarcalismo del Estado y la sociedad nacional]. El endorracismo materno es la base del racismo global de la sociedad venezolana y de todas nuestras sociedades nacionales indoamericanas, caribeñas.

No es cierto lo que vienen informando algunos investigadores que han presentado a María Lionza como una referencia simbólica reciente (década del 50). Será reciente en el medio urbano de las grandes ciudades, pero el símbolo de la Gran Madre tiene referencias arqueológicas y etnohistóricas en todo el territorio nacional. ¿Qué es la llamada Venus de Tacarigua del Lago de Tacarigua (Lago de Valencia) sino una manifestación de ancestrales matrilinealidades de algunas de nuestras culturas originarias?¿No tenemos hoy en vivo muchas María Lionza en la cultura wayuu y añu como pueblos clánico-matrilineales de la actual venezolanidad? Estas sociedades son matrilineales: ojo, que no matriarcales y son claves en los imaginarios de nuestros pueblos y ciudades para restablecer el equilibrio de la Madre Nativa con el Padre Extranjero, que ha sido antagonizado en grado extremo después de la conquista europea. Dándole de esta forma luz verde al malinchismo y la xenofobia como caras distintas de la misma medalla del colonialismo social y cultural]. Hijas de la misma enfermedad del colonialismo.

i).-El imaginario indígena de sentimiento matrilineal de la ciudad tiene una doble y hasta una cuádruple vertiente en la preponderancia hegemónica de su sello patriarcal:

|-Aquella herencia endorracista y de vergüenza étnica que parte de la auto-negación radical de la Madre India mediante el malinchismo o el fetichismo de lo extranjerizante, tan penoso y nocivo como la xenofobia (pero que en el fondo, esta madre renegada de sus propios orígenes, dominante/dominada, de algún modo semi-indianiza al padrote de la conquista, que la adopta o que ella adopta como marido, pero un poco más, su indianismo si bien en estado renegado o recesivo, impacta más a los hijos). Muchas veces sobrevive en la madre cautiva el idioma materno, en otros casos, fragmentos del mismo; la cosmovisión es, parte viva de la herencia piachénica expresada en la medicina natural, el calendario agrícola, de cacería o pesca y otros elementos de la vida cotidiana donde se camufla la espiritualidad originaria. Es la vía vergonzante o avergonzada del imaginario indígena que dobla como una sombra el alma de nuestras ciudades colonizadas.

|.La otra vertiente, es ya de resistencia indígena abierta o encubierta y de emancipación irreverente. Es la luz y sombra, ojos de los cocuyos en la noche, la lámpara del cuerpo y espejo del alma de los Guaicaipuro, de los Tiuna, los Paramaconi, los Terepaima, las Urquía, las Apakuana y las Urimare frente a la ciudad ilustrada, real y pontificia como la Universidad y sus Academias. ¡Carajo, se arrechó Guaicaipuro! Gritaba el pueblo de Los Teques el 27 de febrero de 1989…en la hora del caracazo y del guarenazo derrotando al FMI. De los cerros bajó Guaicaipuro, decía el pueblo el 13 de abril de 2002 frente al Carmonazo de Fedecámaras y el Opus Dei, con el poder mediático del imperialismo y de los imperios europeos [al salir al rescate de su Comandante en Unidad Cívico-militar].

|-Pero tiene otro ramal en la zambería y en las alianzas antiesclavistas india y negra, en los cimarronajes y las rebeliones de los Miguel y las Giomar, en los zambos como José Leonardo Chirino y en la zambería anónima de la venezolanidad, pasando por nuestra guerra de Independencia. En las alianzas de Miguel con la resistencia Jirahara, que se prolongó por un siglo de guerrillas entre Lara y Yaracuy. [No olvidemos esa zambería de los llamados caribes negros, los garífuna, como un filete significativo de este tipo de resistencia y emancipación].

|-La cuarta vertiente es tal vez, la más castigadora del gentío materno: es la indodescendencia que niega o reniega de su propia indodescendencia. ¿Cómo es la vaina?¿Qué no hay descendientes de indios sino "mestizos" o "criollos"? Me explico: en la Gran Caracas puede haber de todo. Hay europeos, árabes, turcos, chinos, japoneses, iraníes, judíos; incluso, hay afrodescendientes, aunque se acepte a regañadientes (o de mala gana). Hay hispanoamericanos, iberoamericanos y latinoamericanos, pero –ojo con esto- no hay indoamericanos. Y muchísimo menos, indo-descendientes o actuales descendientes de los pueblos originarios. En conclusión: el único rostro de lo indio en la Caracas actual –para algunos mantuanos- es el indio itinerante entre su comunidad y la gran ciudad, que sale a vender su artesanía, por lo general, la mujer y los hijos, lindando con la mendicidad. Porque si hay barrios indígenas en las grandes ciudades –que los hay en todas- ellos están bien ocultos, más ocultos que los barrios negros y como el peor de los estigmas de una conciencia culpable, no sólo de la clase dominante sino de toda la población en su conjunto. Un mendigo blanco o negro, puede muchas veces pasar como indiferente o desapercibido en nuestro diario desplazamiento en la calle. Pero, un mendigo indígena, en la calle no lo soportan ni las Manuela Sanz (ni las Manuela de ayer, ni las de hoy):

-¡Qué vaina esta, Simón! Para qué carajos hicimos una independencia si va a continuar esto, con los indios pidiendo limosna en la calle. [De paso, vale la pena recordar que las iglesias occidentales tienen más de medio milenio tratando de "resolver" el puesto y la dignificación de los pueblos y comunidades indígenas, pero han fracasado en choque con serios problemas estructurales del colonialismo; luego, terminaron creando y prolongando lo que ellos llamaron y siguen llamando con gran tranquilidad de conciencia "el problema indígena". Trataron de callar y de invisibilizar a sus voces más esclarecidas como Antonio Montesinos y Bartolomé de Las Casas…quienes también eran hombres de la conquista a pesar de su gran humanismo. Aclaremos que los pueblos originarios y sus múltiples descendencias, no somos problema: el problema es Occidente, negando al Otro y la Otra, sus iguales/diferentes.] [Mientras tanto, le siguen negando a nuestros pueblos y ciudades el derecho a encarnar y fraguar en políticas concretas, el florecimiento y fructificación de los múltiples imaginarios de nuestras indianidades de ayer y de hoy].

|.Hay dos vertientes planetarias ancestrales y contemporáneas que se interconectan hoy con nuestros imaginarios indígenas e indianistas, pero todavía muy tabuadas por la dicotomía civilización o barbarie. Que son el producto de la diáspora planetaria de la humanidad; nuestra herencia asiática antes del cruce por el estrecho de Bering o por todo el Pacífico: esa marca achinada indeleble[asiática-americana, amarillo-cobriza]. Y en lo más remoto, aquella herencia africana de los primeros homínidos que un día partieron de aquel continente, cruzaron el istmo de Suez, poblaron Europa y Asia y Oceanía, luego poblaron la Abya Yala y desde allí, restablecimos probablemente por Brasil antes de la llegada del hombre blanco, nuestra nueva comunicación con África, para encontrarnos así en la unidad y diversidad del género humano. Es nuestro primer viaje en redondo, como humanidad, desde donde la Geografía e Historia Universal deben rescribirse y no siempre desde Europa. La Chinita de Maracaibo y el San Benito de Bobures, de alguna manera, dan cuenta de esos encuentros remotos y contemporáneos de Asia, Oceanía y África con América, tamizado por la herencia semítico-cristiana. ¿Tiene o no tiene sentido asumir el 12 de octubre desde los pueblos del mundo como "Día de la Resistencia Indígena Planetaria"?. En el Zulia en el imaginario de apariencia más racista y excluyente llaman a las wayuu con algunos genéricos significativos que ponen a pensar y sentir como aquello de: "las chinas"(¿cómo la Chinita o la Chiquinquirá?¿Búsqueda inconsciente de la Madre India que ha querido quitarnos la conquista para dejarnos huérfanos?); "María" (el nombre más general y menos aindiado de La Chinita ¿en vías de mestización y de blanqueamiento?¿o la búsqueda de algún símbolo de "La Gran Madre" en la Cultura Nacional?); otras como "Comadre", "paisana" (su prójima o más próxima, su igual/diferente en un "te odio y te quiero": "¿algo que puede ser y no ser al mismo tiempo?"). Las parteras son llamadas por nuestros pueblos comadronas, que son las que ayudan a traernos al mundo y sin traumáticas cesáreas. Por eso algunos países europeos del norte no las han eliminado ni perseguido, como lo hacemos aquí, atentando contra los imaginarios indígenas de la venezolanidad. Ellas se olvidan hoy hasta en los propósitos del llamado parto humanizado de la revolución bolivariana.

Esas chinitas y esas María son en el fondo las mismas maracuchas. Maracaibo es un pueblo añú, matrilineal, aculturado, huyendo de sí mismo (al verse en su propio espejo: endorracismo, vergüenza étnica, vergüenza de clase, colonialismo estético, constituyen una cruz cuadrada de un escapar y un volver a encontrarse con su propia mismidad: con su propia indianidad constantemente desenterrada.

Por otro lado anda el negro San Benito, buscando que lo bailen y lo mimen las mujeres (¿todavía en el exilio materno, rompiendo cadenas y echándose el palo?¿buscando la fecundidad de la tierra y procrear para multiplicarse a través de la realización de su vida afectiva, cultural y espiritual?).

Sobre la negritud y la afrovenezolanidad y su minusvalía en la literatura y la religiosidad del venezolano ha escrito bastante el maestro Marcial Ramos Guedez y en otro orden, Jesús Chucho García.

AMÉRICA NO CAMINARÁ SIN EL INDIO

 

El indio, esa sombra que nos dobla en nuestro inconsciente colectivo es una corazonada punzante que atraviesa no sólo a lo que José Martí llamó "Nuestra América" sino a todo el continente y el Caribe. Pero también recordábamos en fecha reciente con el poeta Gustavo Pereira un libro muy acucioso que publicó Monte Ávila. Aunque no recuerdo el autor, el libro se llama "El Americano en vías de extinción Está de vuelta". Se refiere al indio norteamericano, como esa sombra que dobla con sentimiento de culpa al norteamericano común.

Creo que era Jung en una de sus cartas –me lo recordaba Itala Scotto- quien comprobó cómo los europeos que habían vivido en América, regresaban a Europa con un indio atormentado en su mundo interior. Es un imaginario indígena vivo, que sacude en su conciencia a los nietos y tataranietos de los conquistadores europeos.

EN CONCLUSIÓN:

Bajo la dicotomía civilización o barbarie, la ideología mestiza, el culto a los conquistadores, la degradación del colonialismo estético; el mito de las ciudades como alfa y omega de nuestra existencia histórica y cultural, jamás podremos arribar a una revolución cultural, educativa, comunicacional y espiritual como complementarias de la revolución política, económica y social por otros mundos posibles –como decía nuestro hermano y camarada Otto Maduro- hacia los socialismos del siglo XXI (remarcando en la unidad, sus pluralidades irreductibles).

 

(*) Ver nuestro borrador: Encuentro con el imaginario indígena de Caracas.

1.-Horacio Biord Castillo…me habló en una oportunidad del imaginario indígena del caraqueño Andrés Bello. Otros me han hablado de su anti-imperialismo y de su clara concepción de la soberanía nacional y continental. Bello se enfrenta desde el Sur al pitiyanquismo de Domingo Faustino Sarmiento y a las guerras entre países hermanos recién liberados. Valdría la pena dedicarle un tiempo a revisar el imaginario indígena de los caraqueños más ilustres.

Veamos de Horacio dos libros claves: a) Los Aborígenes de la región centro norte de Venezuela [1550-1600]: una ponderación etnográfica de la obra de José Oviedo y Baños. Universidad Católica Andrés Bello. Caracas.2001. Este libro fue dedicado de puño y letra del autor a Erólida y a mí con estas palabras textuales, que demuestra cómo el imaginario indígena está presente en un investigador católico, hoy miembro de la Academia Venezolana de la Lengua: "Para los amigos, Saúl y María Erólida con afecto y fe en Guaicaipuro, Horacio. Tierra de Guaicaipuro,22-IX,2001." (Esto, más allá de las normales diferencias políticas ¿Qué significa afecto y fe en Guaicaipuro?). Después me envió con el amigo Ildefonso Leal su segundo libro sobre el tema. Ver a continuación:

b) Niebla en las sierras. Los aborígenes de la región centro norte de Venezuela [1550-1625]. Academia Nacional de la Historia. Caracas. 2005.

Cuando Horacio discutía su tesis doctoral en la UCAB rompió el protocolo académico para decirme en broma:

-Saúl se va a poner bravo conmigo, pero debo decir que encontré poca documentación histórica sobre Guaicaipuro.

A lo que le respondí de inmediato: recuerda Horacio que los cronistas, eran cronistas del rey y no de los indios, menos de los Caciques de la Resistencia y Emancipación … El jurado soltó la carcajada. Eran esas dos estrellas del indianismo Nelly Arvelo y Érika Wagner. Ambas siempre del lado de la descolonización cultural y educativa.

2.- Betancourt le puso en sus manos a la naciente Fedecámaras nada menos que la Corporación Venezolana de Fomento, para que se despachara y se diera el vuelto. Era quien otorgaba los créditos a la naciente Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción FEDECÁMARAS después del golpe contra el General Medina Angarita (1945). Por eso Fedecámaras nació adeca y laica en competencia con COPEI). Carmona El Breve en el 2002 era el Presidente de Fedecámaras y de un plumazo y con una auto-juramentación, disolvió todos los poderes y arrancó a Bolívar del Salón Ayacucho del Palacio de Miraflores. Mientras que después a Ramos Allup le correspondió arrancar al Bolívar zambo del Palacio Federal Legislativo. Los huevos de la serpiente, Fedecámaras por dentro, libro de Samuel Moncada es una buena referencia de esas circunstancias políticas.

3. Ver en la revista Política. N° 1. ps.116-125. Caracas. 1958, el discurso de Rómulo Betancourt en la Facultad de Ciencias Económicas y sociales de la UCV sobre la Reforma Agraria. Ver específicamente la p.123.Es un discurso que antecede la campesinización extrema del país y el despelote que venía después, el desmembramiento del campo y la urbanización unilateral con una agricultura de puertos. La mentira de la Reforma Agraria y el desconocimiento en redondo del descomunal aporte agroalimentario de los pueblos indígenas y de sus potencialidades adormecidas. Llega Betancourt al extremo de presentar como individualista las distintas modalidades de los conucos del trópico, diversificados en más de 50 rubros. El no partió del indio sino del campesinado más aculturado, caricaturizado por la colonia y la república. El conuco además, como lo vemos, no es tampoco la única modalidad agrícola de los pueblos indígenas de las microsociedades. Andenes, terraplenes, morichales drenados de los kariña que poco tenían que envidiarle a las chinampas de México, trojas palafíticas para la siembra contra la salinización, islotes de verano entre los ríos y lagos, cultivos en humedales, entre otros, como lo hacen hasta hoy los warao de Guariquén en Sucre. Todo en función de la adaptación a complejos y variados ecosistemas. El mismo conuco ofrece distintas modalidades, si bien es el más importante de las modalidades de agricultura en los trópicos: el conuco mantenía el hato y la hacienda. Hay conucos entre los caminos selváticos, para completar el abastecimiento de las caminatas y para el reposo. Conucos itinerantes o semi-itinerantes. Aparte de otras modalidades de regadío en las zonas semi-desérticas de Lara y Falcón. En la península de la Guajira los wayuu aplican también distintas tecnologías para la siembra y para afrontar, combinado con el pastoreo semi-itinerante, distintos modos de siembra y de cosecha, pasando por los palafitos de los añú en la Laguna de Sinamaica. Todas estas modalidades tienen su asiento en la matriz colectiva de nuestros pueblos: fundados en la familia extensa de la comunidad, no en el individualismo. El individualismo ha llegado después.

Tierra de Guaicaipuro, 4 de diciembre 2020.

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