Diario de una Cuarentena. Capítulo Ciento Setenta y Cinco: Un análisis interesante con respecto al Covid 19 en Venezuela

A un año de la entrada en vigencia del estado de excepción por alarma que se tradujo en el confinamiento y en la cuarentena social, colectiva y voluntaria, producto de la contingencia de la pandemia global de la Covid 19 en la República Bolivariana de Venezuela, ahora nos toca enfrentar una de sus variantes más peligrosas: La P-1 o Manaus (ya que esta mutación se produjo en Brasil, país vecino con el nuestro) que es dos veces mucho más contagiosa, y en proceso de comprobación si es dos veces más letal que las variantes que ya se encuentran en el país.

Algunos han especulado, que casualmente cuando en Venezuela comenzaba a observarse nuevamente un aplanamiento de la curva de contagios, éstos vuelvan nuevamente a incrementarse, lo que insinuaría la posibilidad de guerra biológica. En lo personal, ni la afirmo ni la niego, puesto que este tipo de modalidades de guerra existe, pero no tengo los elementos para afirmarlo en estos momentos y no es objeto de esta edición de esta columna tratarlo.

Lo que sí es importante señalar en este escrito es que, en estos momentos, la epidemia de Covid 19 está en un nuevo proceso de expansión en el mundo. Hay que prestarle en estos momentos mucha atención a Asia, dada la densidad poblacional de éste continente. Y estos tipos y estos detalles dan a Venezuela un Rt de 1,27.

No soy médico, pero como publicador de las cifras de la Covid 19 en el portal ensartaos donde damos los casos activos por estados, he tenido que consultar a expertos y familiarizarme con los métodos y terminologías médicas. Cuando señalo Rt, no es precisamente a la agencia de noticias Rusia Today, sino al factor de reproducción instantánea (Rt) que es la que estima el número de infecciones secundarias que genera cada caso por esta infección. Si tenemos un Rt>1 significa que la epidemia está en expansión, si tenemos un Rt <1 la epidemia está en contracción. Es por ello, que la variante P1 (Manaus) por ser más transmisible, hace aumentar el Rt de la pandemia en Venezuela y en el mundo.

Antes de entrar en consideración lo que quiero expresar en las líneas siguientes, quiero colocar nuevamente y en primer lugar, la tabla de casos activos, fallecidos, tasas de recuperación y de letalidad por estados de la Covid 19 que colocamos en el portal ensartaos, cortesía de la Comisión Presidencial para el Control, Seguimiento y Prevención de la Covid 19 en la República Bolivariana de Venezuela, hasta el 13 de marzo de 2021.

El discurso oficial en estos momentos ha hecho la advertencia de que la variante brasilera sería en estos momentos la responsable del incremento de los casos de la Covid 19 en el país. Pero al observar detenidamente estas estadísticas, y en especial la de casos activos por estados (la columna final de esta tabla que se encuentra a la derecha, nos topamos con un dato a mi parecer bien interesante, y que me lo hizo saber uno de mis lectores.

Por los datos, se infiere que ha podido haber una contención de la infección por el sureste de nuestro territorio (Bolívar-Amazonas), por las medidas adoptadas por las autoridades regionales correspondientes. Este detalle que podría parecer insignificante es muy importante, puesto que la evaluación del resto de entidades federales o del mapa epidemiológico en general en el país nos indicaría que los casos de contagios comunitarios, así como los importados por el occidente del país (tenemos cerca Colombia, no lo olvidemos) están desarrollándose fuertemente, incluso en mayor medida que los que pueden provenir por Brasil, o sea, que no sería necesariamente la variante P1 o Manaus la responsable del actual incremento de la curva de contagios en Venezuela, sobre todo en la región central y occidental del país.

Esto infiere que las cepas que ya se encuentran en el país del Sarv Cov 2 serían o reflejarían la mayor cantidad de contagios que estamos afrontando en estos momentos. Lo que indicaría el relajamiento muy peligroso de las normas de bioseguridad y de distanciamiento físico producto de un desgaste de carácter psicológico producto de un año de confinamiento, sin descartar elementos de la idiosincrasia de nuestro pueblo que en la mayoría de los casos puede traducirse en la falta de conciencia y exceso de confianza ante esta pandemia.

Sólo basta ver los casos activos que refleja en estos momentos el Distrito Capital (2.234) y el estado bolivariano de Miranda (1.083) donde se han incrementado de manera importante el número de infectados por Covid 19, lo que representa como lo indico la semana pasada el presidente Nicolás Maduro, más del 50% de los casos activos que tenemos en el país.

Es por ello, cuando me permito escribir estas líneas que seguramente serán muy leídas, es que me quiero permitir hacer un llamado a la conciencia, sobre todo cuando estamos a punto de entrar en una nueva semana de flexibilización, y a dos semanas del asueto de la Semana Mayor o Semana Santa, en la que algunos incluso consideramos la posibilidad de trasladarnos hacia otros estados, para que respetemos las normas de bioseguridad, de los que no tengan que salir que se queden en sus casas y de todos los llamados que han venido formulando las autoridades, a fin de no contribuir en el agravamiento de la situación en el país, de cortar las cadenas de contagios y de evitar que el Ejecutivo deba adoptar medidas radicales como tuvo que hacerlo en su momento el año pasado, quebrantando de alguna manera el equilibrio que hemos logrado con la implementación del mecanismo "7+7" donde se preserva la salud de la población combinado con el necesario dinamismo de las actividades económicas y permisividad para la realización de algunas diligencias que permitan mantener en alguna medida nuestra calidad de vida y vivir una normalidad lo más cercana a la que tuvimos antes de la pandemia, pero que nunca será igual.

Como lo dice el camarada Diosdado Cabello: "El que entendió, entendió…"

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!