Advierto que esto que a continuación intento relatar, forma parte de la autocrítica necesaria y olvidada. Tal vez tengamos miedo a la etiqueta que desde el poder manipulan de manera insolente. Aprendí que no debo preocuparme por mi reputación, sino por lo que realmente soy, pues la reputación, consiste en lo que los demas piensan de mi, y sobre eso no es mucho lo que yo pueda hacer; mientras que sabiendo lo que realmente soy, y con un puñado de ética y moral en las alforjas, me doy la libertad de opinar sin esos miedos absurdos a la etiqueta hostil y pendenciera.
El pueblo en la busqueda de su liberación se topa en el camino con millones de obstaculos, entre ellos, la resistencia del estado, quien lucha a rabiar, para frenar el camino creador hacia la libertad, el estado moderno no es otra cosa que un instrumento creado por los sectores de poder para consolidar su dominación. El estado se convierte así, en un instrumento para defender los intereses de la burguesía.
No es casual que los intentos independentistas y de liberacion ensayados en el mundo, terminen secuestrados por la garras de poder del estado burgues. Todos los movimientos de liberacion y revoluciones ensayadas en el mundo terminan siendo abortadas desde el momento en que degeneran en gobierno. Se distraen en los asuntos del gobierno y desatienden el mandato popular de crear desde su seno, las instancias liberadoras y tranformadoras que el pueblo requiere, en este tortuoso transitar hacia niveles de liberación e independencia.
Nos llenan hasta hartar de leyes inutiles, que no avanzan mas allá de la intencionalidad, simulando la busqueda de herramientas que permitan dar los pasos correctos hacia objetivos liberadores. El aparato de estado, convertido en nuestro propio verdugo, crece desmesuradamente, mientras crea mecanismos de distracción que nos hace suponer que transitamos el camino correcto.
El pueblo debe crear sus propias herramientas liberadoras, pero ya nuestros compañeros, son parte del estado y no del pueblo al que fungen representar. Pasan sin notarlo siquiera, a ser defendores de los intereses del monstruo a quien deberiamos enfrentar. Su accionar es para fortalecer la eficiencia del estado como aparato dominante, entonces crean nuevas modalidades de dominación con sutil apariencia democratica, para darle mayor consistencia al ministerio al que representan.
Le pondré tan solo un ejemplo, se han puesto a pensar, cuantos ministerios existen en Venezuela en el nuevo aparato burgues contruido desde este ensayo revolucionario. Cuantos de ellos son destinados al ambito de la agricultura y el campo. Desde ellos, cuantos institutos autonomos u organismos son creados para abordar los distintos temas del sector agricola. Cuantos Institutos, fundaciones, corporaciones, creadas a imagen y semejansa del estado burgues. Siendo estas instancias burocraticas de la misma área de acción, ni siquiera intentan trabajar de manera coordinada y articulada, cada uno anda por su lado construyendo lo que a su parecer es su tarea. Al final, todas esas instancias solo fortalecen al estado burgues y debilitan la organización popular. Lo primero que debemos hacer en achicar el aparato burocratico del estado. Cosa que pareciera imposible ante tanta apetencia y tanto populismo disperso en las instancias de poder.
El estado usando sus aparatos ideológicos, Escuela, Iglesia, Militar, crean su andamiaje dominante, aparentando una democracia, pero luciendo cada vez más manoseada y amasada para la acumulacion de más poder. Ali Primera lo denunciaba, "Hablan de libertad, cuando en verdad, solo hay tolerancia. Trafican con la mentira, su mercancía es la democracia"
Las instancias creadas para avanzar hacia nuevas estructuras liberadoras, han sido secuestradas por el estado burgues, Consejo Comunales y Comunas, fueron castradas de liberación y rebeldía, cuando decretaron su creación y conformaron sendos ministerios para garantizar su tutelaje. Hoy se convierten en excenario de la lucha intestina del partido y del estado depredador y soez.
Hemos venido cavando nuestra propia fosa, hemos reproducido a una velocidad impresionante, el estado burgues que deberiamos destruir, lo hemos logrado de manera tan eficiente, que me atreveria a señalar que quizas hoy somos el estado-pais, mas abultado burocraticamente hablando, con mas de trienta ministerios, con leyes a monton que nadie cumple y un arsenal de instituciones publicas a merced de la ingnominia y la desidia. Mientras mas leyes y alcabalas legales existan, mas apetitosa y obstentosa será la despensa del corrupto.
Cuando la revolución degeneró en gobierno se truncaron muchas de las aspiraciones de liberacion popular. Es necesario volver al pueblo, construir con él sus propias estructuras de funcionamiento, no anclarlas al estado para garantizar su tutelaje, por el contrario, dotarlas de herramientas liberadoras y de autonomia que trascienda hacia la autogestión y el autogobierno. Cada sector tiene sus particularidades y su accionar cultural, cada region tiene sus necedidades, con esas realidades y desde el rerritorio es donde debemos contruir las propuestas.
Ministros e "infuncionarios", salgan, vengan a patear barro con el pueblo. Las oficinas serviran para otras cosas.