"La libertad es siempre la libertad de
aquellos que piensan de manera diferente"
Rosa Luxemburgo
Antonio Gramsci, uno de los marxistas más brillante que ha tenido la humanidad afirmó, refiriéndose a los procesos revolucionarios, que hay etapas de avances pero también de retrocesos, que no todo lo que muere termina de morir y todo lo que nace termina de nacer. Textualmente decía "El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. Y en ese claro oscuro surgen los monstruos"
Estas palabras se han convertido en una premisa histórica que nos permite explicar los fracasos o avances de las diferentes experiencias revolucionarias que han ocurrido en la humanidad, incluyendo la Revolución Bolchevique, la Revolución China y otras similares.
La historia de estos errores es larga y Latinoamérica ha sido escenario trágico de la afirmación gramsciana.
El ejemplo más evidente lo constituyen la Revolución Mexicana, la Revolución Sandinista, la Revolución Salvadoreña, la experiencia Chilena y otras conocidas, con la excepción trascendente de la Revolución Cubana.
El Comandante Tomás Borges en una charla que hizo en la UCV y en la que le hicieron la pregunta ¿Por qué el sandinismo fue derrotado? luego que Violeta Chamorro ganara las elecciones respondió con humildad reconociendo los errores en que se cayeron los errores en que cayeron los militantes del Frente
"Porque perdimos la humildad" fue la respuesta de Borges. Y afirmó: La pérdida de la humildad arrastra dos vicios, la ostentación y la soberbia. Esos pecados hacen mucho daño a una revolución. La ostentación trae el mal ejemplo, la desconfianza, el derroche (carros de lujo, las prendas, las ropas de marca, el reloj de lujo, casas suntuosas), todo eso son malas compañeras de la revolución".
Y continuó: "La soberbia vuelve ciegos y sordos a los dirigentes, a los gobernantes, a cualquier nivel, no atienden al pueblo, a las masas, de ellos se separan. Pero lo peor es que nubla la mente. Impide el entendimiento, cultiva la vanidad, se creen sabios, y lo más grave, pronuncian discursos para engañar al pueblo, hacen ver que ser rico es malo, pero todos los ven, a esos dirigentes, gozando del poder, burlándose de quienes creyeron en ellos."
Los monstruos, los fantasmas del pasado surgieron del claro oscuro y el amanecer se volvió noche: la prepotencia, la soberbia, la burla al pueblo, la vanidad, la arrogancia, la supremacía, la dominancia. Los pueblos desesperanzados volvieron a la penumbra, a la pobreza, esclavitud, exclusión, opresión.
La Revolución Socialista Bolivariana venezolana no es una excepción. El Comandante Eterno en cada reunión, programa televisivo, conversaciones con el pueblo, programas radiales, Aló Presidente enfrentaba a los incapaces, ineptos, miraba al pueblo a los ojos, estimulaba el debate, la denuncia, increpaba a los soberbios, criticaba a los vanidosos, a los prepotentes. Estaba claro que era necesario sanear la revolución de los fantasmas del viejo orden.
Chávez escuchaba las denuncias del pueblo, olfateaba a los ineptos, los incapaces y los apartaba cuando era el momento oportuno. Eso le permitió sortear el golpe de estado, el paro petrolero, depurar su equipo de gobierno cuando era necesario. Alejar, en lo posible los fantasmas, los espantos del viejo orden en vías de desaparición.
La muerte sorprendió tempranamente al líder indiscutible del proceso revolucionario bolivariano y con ella se oscurecieron los sueños, las esperanzas del pueblo venezolano, de los desposeídos, marginados, excluidos.
Hoy hacen rimbombante presencia en cargos importantes y claves del ejecutivo nacional y en cargos importantes los zombies del pasado, unos revividos del pasado, otros arrimados en el presente. De la boliburguesía, los enchufados, los amiguitos de los hijos de ministros y ministras, los amiguitos de los hijitos, lo compadritos, los amigos de los compadritos, los uniformados amigos, los amigos de los uniformados, el testaferro del primo está lleno el gobierno. Las sombras del pasado oscurecen y alejan las esperanzas del pueblo.
El fantasma de la privatización, del deterioro del ya deteriorado salario de los trabajadores recorre al país de norte a sur, de este a oeste, al igual que la seguridad de las prestaciones sociales…ya ese susto se presentó durante el gobierno del Pte. Chávez el cual supo superar inducido por los fantasmas del momento, hoy parece que tal situación pasó al baúl de los recuerdos y brota de la urna revivido a lograr lo que no pudo realizar años atrás.
Pareciera que el gobierno nacional está bailando un son macabro dando traspiés exprofeso, dando un pasito para adelante pero tres pasitos para atrás, es decir, una marcha de retro, un viaje del presente al pasado en una carroza fúnebre llena de monstruos del pasado, de familiares de los monstruos, amigos de los monstruos, compadres de los monstruos, guardianes de los monstruos.
Latinoamérica está hirviendo, el fantasma de la revolución ha salido de su sepulcro y hoy cabalga de norte a sur, desde México a la Patagonia. Colombia, Perú, Bolivia, Chile, Brasil, Haití viven un momento de convulsión social y las fuerzas del orden capitalista están prestas para una eventual intervención. La confrontación parece inminente. En Venezuela en cambio parece que la confrontación popular será contra los vicios del pasado, del aburguesamiento, de la privatización, es decir, dando los tres pasos para atrás.
Ojalá se corrija el rumbo, se enderece la marcha, se visualice el sur. Ojalá la sangre no llegue al rio
Hasta la victoria siempre. Venceremos
#RebeldesSiempreTraidoresNunca