Es la frase que está de moda en todo el territorio nacional y en cierta manera va bien encaminada la estrategia que colocó en práctica la dirección nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Si se quería que ocurriera un despertar en las filas de la tolda roja, se está logrando, punto positivo para incentivar al electorado de manera que se promueva el ejercicio del voto pero que además se sienta parte del proceso de escogencia del candidato que irá a la contienda electoral del próximo 21 de noviembre.
Recordemos que el 27 de junio se darán las asambleas por cada Unidad de Batalla Bolívar Chávez (UBCH), donde se celebrará un proceso que consta de 6 pasos de participación en el que la militancia del partido de Chávez, expresará de forma secreta su voluntad de quien cree debe ser el candidato o candidata, a los cargos de gobernador o gobernadora, alcalde o alcaldesa, legislador o legisladora y concejal o concejala, más los de la lista, tanto del Consejo Legislativo y Concejos Municipales. Luego los más votados se enfrentarán en las primarias de dicho partido el próximo 8 de agosto.
Todos y todas creen reunir las condiciones para conquistar el voto de las bases, el cual es bien visto por la militancia y quienes seguimos de cerca a cada líder o lideresa. También hay quienes solo son figuras que no conocen realmente las funciones de los cargos que aspiran obtener mediante el voto popular y es donde se presenta el meollo del asunto, proponerse a si mimo en un proceso electoral solicitando el apoyo del pueblo sin tener la formación para el cargo que se pide, es el primer acto de corrupción y engaño ¡Pilas con eso!
Veo con mucha preocupación a hermanos y hermanas que dejan ver claramente la formación que llevan, las cuales van desde cosas simples de la cotidianidad y otras más complejas, tales es el caso de las escrituras de "Consejales" refiriéndose a concejales que es la palabra correcta, decir "aiga" en vez de haya. También confundir las funciones de cada instancia o instituciones de los poderes del Estado en cada entidad, vemos como rápidamente se cruza en la práctica las funciones del Legislativo y el Ejecutivo, para la cual debe haber una corrección urgente.
Creo que podemos avanzar en la reinstitucionalizacion del Estado, fortaleciendo el conocimiento práctico de la mano con la academia. De lo contrario, tendremos mucha gente en cargos que solo sirven para pegar gritos repitiendo frases de moda y que poco construyen o aporta para lo que realmente se le confió determinada responsabilidad.
¡La historia la escribe el vencedor!