"La bilis no facilita la negociación"
Balzac
La negociación la ha llevado la oposición, como los toreros, cuando se preparan para entrar al ruego, paso a paso y en permanentes contorneos, sabiendo que los astados han pasado por un proceso de debilitamiento, y a pesar de su casta y bravura llevan todas las de perder, al ser sometidos a una serie de etapas crueles, hasta quitarle los ímpetos ofensivos; para después pasar a los engaños propios de un humano frente a un animal. Esto parece la táctica empleada por la oposición, para presentarse a las conversaciones, y para añadidura no se realizan en un asentamiento en medio de un desierto; si no en confortables hoteles, ideal para turistas, y así cualquiera va.
Sin embargo, la frustración siempre los acompaña, al llegar a las negociaciones, envalentonados, queriendo imponer la agenda de las discusiones, sabiendo del apoyo incondicional del imperialismo, y apenas comienza el primer tercio levantan la miradas, buscando a quien embestir, hasta darse cuenta que, los cuernos no meten miedos, y por muchos argumentos y la grave situación del país, en un alto porcentaje inducida, desde la Casa Blanca, con la ayuda de sus títeres, no pueden imponer su agenda de odio, terror y entrega total de los recursos naturales de nuestro país.
La fiesta de la tauromaquia, está a punto de perecer. Son muchas las personas opuestas, a una lucha el cual consideran desigual. La doctora Marlene Sánchez –médica internista– nacida en Mérida, tierra de mucha tradición, cuando oye hablar de corridas de toros, es como si escuchara a Guaidó, hablar de libertad o de corrupción. Pero, lo que son las cosas, desaparece el circo de los toros y aparecen estos nuevos "actores" lanzados al "ruedo" con el mismo cuento que, da pena repetirlo; como dijo, un amigo: "Da la ligera impresión, que se van lejos, porque aquí no les gusta nada, pero en México saben bastante de estos mentirosos, y por muchos que escondan la verdad, se les va hacer difícil engañar a los que saben historias".
Los nuevos negociadores de la oposición, van a la tierra de Pancho Villa, hablando en nombre de la democracia, porque la dictadura y el reeeeeeegimen en Venezuela, se les ha hecho insoportable, tan es así que el Guaidó, con lo único que, no ha podido acabar es con el gobierno y todavía está pidiendo libertad; pero son tan pasados de cómicos que, apenas le pusieron los ganchos a Freddy Guevara se enfermó y Leopoldo López, se escabulló para darse la mano, con Álvaro Uribe Vélez, e Iván Duque, como un verdadero autómata; porque habla muy poco, pero con la mirada encendida, penetrante, es capaz de espantar a un encierro de toros; las guarimbas lo delataron, como un verdadero asesino, ratificado en los tribunales.
Los voluntarios para el dialogo y las negociaciones nunca sobran, pero, ni de vaina, se les ocurre mandar a uno de estos personajes; ni siquiera a la María Corina Machado, antes la falta de representantes del sexo femenino, porque es terminar de echar la bilis encima de la agenda. El gran objetivo trazado por estos ambulantes de las mentiras, es seguir presentando al presidente Maduro, como un dictador; cuando el gran pecado, desde el mismo momento de tomar el mandato, es el respeto de la constitución y por ende a los agresores, quienes contribuyeron con el imperialismo en crear este caso, y ahora piden diálogo y negociación, como unos angelitos.