Mantener la producción a pesar de la difícil situación económica, es la razón que indicó el presidente Nicolás Maduro, al elogiar el esfuerzo de la compañía venezolana Diablitos Underwood, durante contacto con dicha empresa en Cagua, Aragua, y en varias transmisiones remotas con industrias de otras localidades nacionales en la tarde del 18 de agosto 2021. Tomo nota que el jefe del estado catalogó a empresarios y sus iniciativas conjuntas con el Poder Ejecutivo, "emprendedores de la Venezuela de verdad, merecedores de todo el apoyo".
Seré sincero y conmigo posiblemente deseen acompañarme en la apreciación, si digo la marca a la cual el Presidente calificó de icónica conocida por producir embutidos de jamón –el diablito–, desde hace algún tiempo no me ha permitido disfrutar del producto por su alto precio, y de todo corazón espero que en esta nueva política de facilitarle a los industriales y empresarios querer más a Venezuela, e importar menos sus insumos en medio de la inducida hiperinflación, no nos priven de poder saborearlos, imposibles de comprar por familias de exiguo presupuesto,
A quien piense que antes era más barato el jamón endiablado, no olviden que los empresarios enriquecían a funcionarios (actos de corrupción), ciertamente entregaban sus productos a los supermercados, y era tradicional dominar el presupuesto nacional desde fedecámaras, consecomercio, la industria, etc, e igualmente su influencia llegó a dictar leyes en el Poder Legislativo, aprovechando las veleidades del estado venezolano demócrata representativo, sin que los dueños del capital sirviesen al verdadero porvenir productivo nacional.
Si se acaba el tradicional "todo lo compramos corrupción mediante" consigna adecopeyana, la conclusión es que las sanciones legales actuales a vagabundócratas no deben cesar en el accionar desde el poder socialista legal. Puede criticársele al gobierno del Presidente Maduro, por ejemplo, haber concedido crédito fabuloso en dólares preferenciales a los dueños de MIKRO, se llevaron las divisas y abandonaron instalaciones en muchas partes del país sin recibir castigo. Propaganda socialista negativa.
De acuerdo Señor Presidente en que usted facilite a quienes según sus palabras "Hay que aprender mucho de estos sectores industriales, empresariales que, haciendo los ajustes en un proceso económico tan duro y difícil, pudieron tomar las medidas para mantener la producción", noté el entusiasmo de las y los trabajadores que le acompañaron desde las empresas, y la alegría manifiesta de los inversores. Sin miedo afirmo que eso ocurre en China donde los particulares y los religiosos no intervienen en la influenciocracia, impídaselo a quienes aquí lo hacen, que el fiscal Tareck continúe sanciones a funcionarios deshonestos, que solo viven del estado para sacarle punta al cargo, y se legisle en la A N para que los empresarios que mandan los reales e inventen inversiones en el extranjero y no en su país se les corte cualquier apoyo oficial.
Leí aspectos noticiosos por internet indicando que Diablitos Underwood será respaldada por el Estado, permitirán aumentar su productividad y eficiencia, mejorar la calidad de los productos y construir el sistema de distribución de mercancías. La aspiración es que lo logren sin engañar la buena fe del gobierno socialista, y podamos consumirlos a precios razonables. Encarecer los productos es arma contra usted Presidente y contra el legado del Comandante Chávez. El pueblo lo sabe, aprendemos con China como ejemplo de respeto al capital, siempre y cuando se amolden a lo que el estado dicta y permite, en nuestro caso solo así y tenemos con qué, seremos verdadera POTENCIA, para ello nos sobran recursos y gente.