"No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución; se hace la revolución para establecer una dictadura". Es una frase que habla de la lucha del pueblo, y de los factores sociales que forjan un cambio para tener libertades. Es un llamado de atención para no perder de vista la dimensión de los intereses militares e individuales de algunos que se hacen llamar "revolucionarios". Fin de la cita. George Orwell.
No creo que esos gritones disfrazados de izquierdosos verde oliva, que se declaran "marxistas-chavistas-revolucionarios, y anti imperialistas" hayan leído al menos 10 páginas de tan compleja obra de los 3 tomos de El Capital De Karl Marx. Pues, yo, siempre me he preguntado si esta izquierda dogmatica, fanfarrona, y charcutera de Venezuela lo ha leído. No soy presumido, yo leí los 3 tomos seguidos, y de vaina no se me volaron los tapones, hace más de 30 años. Fue en los años de 1972 al 74.
Los leí justo después de haber egresado del Luis Caballero Mejías en julio de 1972. Y militaba en la izquierda cristiana. Recuerdo aquella experiencia. Luego leí otros textos muchos más digeribles como Miseria de la Filosofía.
Eso me tomo cerca de tres años. No seguía leyendo hasta que no entendiese a cabalidad los párrafos precedentes. El Capital es largo porque él trabaja con la idea de dar movimiento, de lo que trata de explicar. Ya no lo recuerdo mucho, porque me lo leí hace muchos años. Me faltó en ese momento conocer el contexto histórico, él porque lo escribió, y comprender al hombre, su interés y su persona.
Yo pasé mis años de joven estudiante en la Técnica, y en el Politécnico, cargando debajo del brazo ese pesado ladrillo. Hoy pienso que no vale la pena. Me atrevo a sugerir un libro, a mi modo de ver mucho más valioso, La Condición Humana, de Hannah Arendt. También leí: "los orígenes del totalitarismo", de Arendt.
Lo más increíble es que esa obra fue escrita en una época donde ni siquiera existía la producción en masa, el conocimiento técnico-científico era precario, y donde, según las malas lenguas, el autor era mantenido por su mujer, cosas de Perogrullo. Lo último fue lo más cumbre... Una mujer que era de la aristocracia, cabe destacar, si se puede.
¿Siempre me pregunto si hay algo que rescatar de esa obra? Según mi ya frágil juicio. Pues sí, hay muchísimo que rescatar, una cosa es Marx, y otra el marxismo.
Y es que el materialismo histórico expresado en el capital, fue una innovación en su época, además diría que es una herramienta para estudiar ese evento histórico, algo muy interesante.
La cuestión es que hoy en pleno siglo XXI, con estos revolucionarios de la dolce vita en Miami, y Europa, es creer que con eso se puede hacer un sistema, y otras vainas más.
Los que quieran desmarañar algunas formulas ‘tecno científicas’ del "Capital" de Carlos Marx. Pueden buscar por Internet el debate del fallecido economista Emeterio Gómez, con Juan Carlos Monederos, Capitalismo vs. Socialismo, el 13 de abril del 2007 www.youtube.com/watch?v=OxsbnTSB0T4 en el paraninfo de la Universidad Central de Venezuela. Una joya magistral.
La obra maestra de Karl Marx desenmaraña de manera meticulosa y, a veces, drástica, los orígenes de la desigualdad social y económica. A diferencia del Manifiesto comunista que escribió con Friedrich Engels, este texto clásico no es un llamado a la revolución, sino un análisis exhaustivo y sistemático y una "crítica a la economía política". Marx pasó 15 años trabajando sólo en el primer volumen de esa compleja obra donde detalla la "plusvalía" que los trabajadores crean para quienes poseen los "medios de producción" y cómo venden los explotadores capitalistas sus mercancías, no para comprar otras, sino para incrementar su propia riqueza. "El dinero que genera dinero", o el proceso de acumulación de capital, es el centro de la crítica de Marx al capitalismo. Es una obra para todo aquél que desee entender los orígenes de esta importante, y disruptiva obra de la filosofía política y económica.
Karl Marx nació en Trier, Alemania, en 1818. Estudió derecho, filosofía e historia y trabajó como editor de un periódico liberal. Cuando sus opiniones fueron censuradas, se mudó a Francia y conoció al hijo del dueño de una fábrica, Friedrich Engels, con quien escribió el Manifiesto comunista en 1847. En 1849, Marx se exilió en Londres, donde empezó una intensiva investigación que resultó ser su obra maestra de economía política, El capital. El primer volumen se publicó en 1867; el segundo y tercer volúmenes se publicaron después de que murió en Inglaterra en 1883. Fin de las citas.