Se ratifica la derrota, en las megaelecciones realizadas el 21 de noviembre, en el sector de la extrema derecha, la catástrofe es de grandes magnitudes. Los derrotó la mezquindad, la desunión y el egoísmo que son las reglas de juego de los oposicionistas venezolano. Se observó en el recién finalizado proceso electoral, una atomización del voto, dispersa en multiplicidad de tarjetas y figuras aisladas, cuya característica común fue la difusión de discursos incoherentes, alejados de la realidad y de las necesidades del electorado. El Chavismo expresión democrática en la Venezuela, de hoy es la primera mayoría en las gobernaciones, Alcaldías, legisladores regionales y concejales, desde la medición porcentual los resultados son los siguientes: Chavismo Gobernadores 90% y Alcaldía 73%, ganó la democracia, para la mayor suma de felicidad para el pueblo venezolanos.
El inmoral sector de la extrema derecha agrupado alrededor de la tarjeta de la MUD, se presentó ante el electorado como el aventajado representante de la Casa Blanca, la Unión Europea, Gobierno de Canadá, el cárter de lima, la OEA y la Conferencia Episcopal Venezolana. La derrota fue contundente. Su discurso fue altanero, fue golpista, fue descarado y fundamente grosero, pero si ningún postulado que solicitara la necesidad de reconstruir la Venezuela, que la oposición terrorista solicito y ayuda a su destrucción, con las agresiones y sanciones ejecutada por los gobierno de Donald Trump y Joe Binde, con el beneplácito de la oposición terrorista venezolana, siempre de rodilla al lado de los agresores de la Venezuela de: Guaicaipuro, Simón Bolívar, Antonio José de Sucre, Ezequiel Zamora, Fabricio Ojeda y el comandante Chávez. La Venezuela que es de todos, debe ser reconstruida por todos los venezolano.
En este momento histórico, los dirigentes de la oposición terrorista venezolana, no tienen el discurso ni la capacidad para guiar a sus seguidores, estoy hablando de: Leopoldo López y Julio Borges. Mucho menos en Capriles Radosnki o Henry Ramos Allup. Menos todavía en los bufones mediáticos llamados Juan Guaidó, Carlos Ocariz o David Uzcátegui. Ninguno, en este momento histórico, tiene la capacidad para derrotar en este momento al Chavismo. El legado de esta generación de fracasados líderes opositores es un aluvión de derrotas. Sus promesas electorales inútiles ya no motivan a sus antiguos partidarios.
Conozca los dirigentes más impopulares de la oposición venezolana, según trabajo de campo recocido, reveló quiénes son los dirigentes de oposición más impopulares en Venezuela. La investigación se realizaron en hogares de todo el país, 15% de los estratos A, B y C y 85% de los estratos D y E. El dirigente Henry Ramos Allup es quien tiene mayor cantidad de opinión desfavorable con 83%. Solo 13% de los encuestados tiene una opinión favorable sobre su imagen y 4% no emitió respuesta. Julio Borges, 80% desfavorable, Henrique Capriles 76% desfavorable, Juan Guaidó 75% desfavorable, Leopoldo López tiene 74% desfavorable y Henry Falcón cuenta con 71% desfavorable.
El 21 de noviembre gano el pueblo, que con su heroica voluntad de participación fortaleció la democracia. Desde las megaelecciones nace en Venezuela, una nueva clase política de oposición, representativa de las base antichavista. Se ve en el futuro inmediato el surgimiento de un nuevo liderazgo de la oposición, producto de los recientes resultados electorales.
La mayor victoria de la MUD data de 2015, cuando le arrebató al oficialismo la mayoría de los escaños en el Parlamento. De allí en adelante, su buena fortuna se vino a menos; la alianza perdió ligazón. El ridículo en el proceso electoral reciente, lo represento La delegación de espías de la Unión Europea que no encontró nada, ni un elemento, para criticar y descalificar el sistema electoral venezolano.