Si me falla el magín, me jodí con ti violín hasta el del sobaco. Si fállame la fantasía. Acábase la vida mía. Si fállame el magín. Entonces jodíme. Si fállame la teoría especulativa matemática hipotética existencial última. Entonces no ha de existir el algo existente ya y la nada existente ya de Maleo. Si fállame la magia. Fállame el realismo. Si fállame el realismo. Fállame la ingenuidad. Si fállame Dulcinea. Entonces los molinos destrózanme. Si fállame Maleo. Entonces mareo. Si fállame la magia. Entonces fállame el magín. Si fállame la fantasía. Entonces no existe el realismo ingenuo einsteiniano y el realismo mágico cervantino. Si me falla el magín, me jodí. Puédeme fallar la memoria, a mas y a más, pero empero, nunca jamás, jamás y nunca, jamás de los jamases, ha de fallarme la imaginación. En mi imaginación ha de estar todo lo que he desarrollado y demostrado de la teoría de los casos correlativos límite contradictorios caliginosos, de equilibrio dinámico dialéctico difuso, al través y en de por medio por la calle de en medio el medio maleoiano profundo. Es la novedosa tesis teórica práctica inédita, y, cuando digo inédita, es porque y no hay un texto que la testimonie, mas y más, encontrada pública notoria en la página web de Aporrea. Y, ha de encontrarse manifiesta en el cleuasmo quiasmo río heraclitoiano. La teoría de los casos límite correlativos límite contradictorios caliginosos, de equilibrio dinámico dialéctico difuso, es contenido que contiene el continente de la filosofía de las 4E de Maleo. Que surgiera de la voladura de las Torres Gemelas Neoyorquinas, el 11/09/2001, en que margullía, y, que arrumbara por siglos, en el anonimato, al través y por culpa de Aristóteles, que le diera, solo y sólo, aun y aún, un cuarto al pregonero al Principio del Tercio excluso de su Lógica. Y, que la teoría de los casos correlativos límite contradictorios caliginosos, de equilibrio dinámico dialéctico difuso, manifestárase, dicha teoría, con el tercio excluso y el tercio incluso de Maleo, y que Aristóteles, lo denunciara, en su Moral del exceso y del defecto. A mas y más, el imperio capitalista neoliberal gringo go home sí le ha sacado la punta puta, hasta las últimas invasiones, al tercio excluso egocéntrico insolidario. Y, que fue con voladura de las Torres Gemelas Neoyorquinas, el 11/09/2001, en que surge el tercio incluso, y, nace el contrapeso al tercio excluso, y, de la penumbra sombría whitmaniana y borgesiana, en que aparecen los casos correlativos límite contradictorios caliginosos, el tercio excluso y el tercio incluso de Maleo. Margullido y arrumbado en el cleuasmo quiasmo río heraclitoiano, en que un río no es dos veces el mismo río y es el río las dos veces. En ese mismo río en que margullera Hegel y Marx, y, que no diéranse cuenta de la existencia del excluso y del incluso. Y, que, paradójicamente, Albert Einstein, nos enviara siempre, a la modernidad ilustrada originaria, a sacar las nuevas conceptualidades, y, él, no se mojara el culo, tan solo los tobillos, cuando manifestara aquello de: "En la medida en que las matemáticas se refieran a la realidad, no son ciertas, y en la medida en que son ciertas, no se refieren a la realidad." El quiasmo río efesoíta, no le tocara ni los talones a Albert Einstein. De haberse margullido, Einstein, en el quiasmo río heraclitoiano, hubiera dado con la teoría holística unificada, pero fue todo por culpa de Aristóteles, quien se diera a la tarea de pregonar el Principio del Tercio Excluso, que los gringos le sacaran la punta puta, a mas y a más, con la voladura de las torres Gemelas Neoyorquinas y las sucesivas invasiones a pueblos y naciones, asedios bloqueos cercos persecuciones sanciones a Estados, y, que la República Bolivariana de Venezuela no escapárase de las medidas coercitivas criminales del imperio gringo go home. De todo esto dicho, es lo que digo que no ha de fallarme el magín, y, si me fallara me jodería. Es algo asina como Dulcinea y Don Quijote. Como si fuera este cura ignaro raro cleuasmo asno y Maleo. El magín y el trajín. Y si me fallara el magín, entonces debo decir, que en mi trajinar, me jodería.
Con digresión y sin digresión, si fállame el magín, debo decir, me jodí con ti violín. Si fállame la fantasía. Acábase la vida mía. Si fállame el magín. Entonces jodíme con ti violín. Si fállame la teoría especulativa matemática hipotética existencial última. Entonces no ha de existir el algo existente ya y la nada existente ya. Si fállame la magia. Fállame el realismo. Si fállame el realismo. Fállame la ingenuidad. Si fállame Dulcinea. Entonces los molinos destrózanme. Si fállame Maleo. Entonces mareo. Hoy, primero de enero de dos mil veinte y dos. Hemos de ir al río, a la Boca Toma de San Carlos de Cojedes, y chapucear, a experimentar el fluir fluvial efesoíta, a sentir a Heráclito, que de un tambor de mierda pasó la miel eterna. Asina, atravesar, todos. Ansí, transitar, todos, en la armonía simultánea contradictoria, esto es, es decir atravesar y transitar el Quizás y el sin quizás, la natura y la persona, el exceso y el defecto, el tercio excluso y el tercio incluso, la tesis y la antítesis, el consciente y el inconsciente, la vida y la muerte, la luz y las tinieblas, la justicia y la injusticia, la mortalidad y la inmortalidad, la guerra y la paz, el amor y el odio, el principio y el fin, la verdad y el error, la evidencia y la duda, la razón y la sinrazón, la lengua y el habla, y, asina asín ansí, una sucesión armónica alternada contradictoria, la armonía visible e invisible tensiva opositiva, en que surgen y se engendra el uno y el otro, el uno engendra al otro, en la sombría penumbra whitmaniana, en la sombría penumbra borgesiana en el medio heraclitoiano profundo, en el medio maleoiano abismal, en el cleuasmo quiasmo río efesoíta. Puédeme fallar la memoria, a mas y a más, pero empero, nunca jamás, jamás y nunca, jamás de los jamases, ha de fallarme la imaginación. En mi imaginación ha de estar todo lo que he desarrollado y demostrado de los casos correlativos límite contradictorios caliginosos, de equilibrio dinámico dialéctico difuso, al través y en de por medio por la calle de en medio el medio maleoiano profundo. Y, en el cleuasmo quiasmo río heraclitoiano ha de estar la fantasía y la magia, y, que margullendo siempre en él, nunca jamás, ha de fallarme el magín y que sería la falta mi morir.
Si me falla el magín. Entonces sea dicho que me jodí con ti violín. Si fállame la fantasía. Ergo vergo sea dicho que acabóse la vida mía. Si fállame el magín. Ergo vergo sea dicho que jodíme con ti violín hasta el del sobaco, porque y hasta Rexona me abandona. Si fállame la teoría especulativa matemática hipotética existencial última. Ergo vergo sea dicho que no ha de existir el algo existente ya y la nada existente ya. Si me falla el magín. Ergo vergo sea dicho que fállame Dulcinea, fállame Maleo. Ergo vergo jodíme.